instinto

capitulo 7 disculpas y acercamientos inesperados

El brasileño se levanto del piso entendiendo al pelirrojo, no lo culpaba de estar exasperado, se disculpo con este y decidió esperar a que llegara su hermano para hacer lo mismo, todos los que vieron esto se sorprendieron de ver al casa nova #1 del zoológico disculpándose con una de sus víctimas.

El albino estaba más que sorprendido, pero al ver fijamente al moreno se dio cuenta de que este en verdad estaba arrepentido por su comportamiento tan obstinado e irritante, el menor decidió darle otra oportunidad y comenzó a tener una conversación bastante tranquila con el chico, cuando su hermano mayor llego los miro con una cara de sorpresa y horror al pensar que su hermanito había caído en las garras del moreno.

Pero antes de que hiciera más conclusiones, omi se le acerco con una gran sonrisa y le conto todo lo que había pasado en su ausencia, el pelirrojo se mostro bastante escéptico con la situación actual, pero al ver como el moreno se disculpaba con la mirada gacha comprobó que este era serio con sus palabras, por lo que acepto la disculpa del brasileño y decidió al igual que su hermano darle una oportunidad más.

Cuando todos los trabajadores abandonaron las instalaciones, fue cuando el pelinegro abrió sus dorados ojos los cuales tenían un brillo muy especial, en su rostro se fue formando una sonrisa la cual era bastante aterradora ya que esta era la sonrisa de un depredador, la cual mostraba que tenía algo entre manos para el chico.

El pelinegro se acerco al cristas de su habitad y lo comenzó a golpear con uno de sus dedos, utilizo su garra la cual había hacho crecer un poco más para que el ruido fuera lo suficientemente fuerte para que se compañero y amigo lo escuchara, se detuvo y espero un poco, hasta que escucho como un ruido similar provenía del habitad del otro.

Su sonrisa creció un poco más al ver que su amigo estaba despierto, comenzó a sisear lo suficientemente fuerte para que el otro lo escuchara, lo cual no fue necesario que alzara mucho la voz, ya que el eco de los pasillos vacios era tal, que este se escuchaba desde muy lejos, durante toda la noche barias de las cámaras de seguridad grabaron los sonidos de gruñidos y siseos de las dos diyu'she, los cuales asustaron bastante a los demás animales del zoológico, en especial los que eran presas de todos los tamaños y formas.

A la mañana siguiente los gemelos llegaron temprano como siempre, al entrar por las puertas del zoológico, saludo a Guan y Doyo, caminaron hasta llegar a sus consultorios correspondientes, en donde cada uno entro para ponerse sus batas de trabajo y comenzar sus jornadas de trabajo, ese dia omi no trabajaría ya que tenia clases y al día siguiente estaría presentando parciales, además ese era el ultimo día de trabajo para todos en el lugar, eso se debía a que el zoológico cerraría por una semana entera ya que estaban por llegar las vacaciones y los trabajadores tendría una semana completa de descanso para después volver con mas energías ya que en vacaciones el zoológico se llenaba hasta reventar por las visitas.

También se debía a que remodelarían alguno de los habitad de animales pequeños para que algunos niños los pudieran tocar, los demás habitas estarían cerrados y prohibidos el paso para cualquiera no fuese personal autorizado.

El de reptiles los cerraban con guardias vigilando, clave y una alarma que sonaba cuando trataban de forzar las puertas de seguridad de estos, pero con la llegada de las dos nuevas diyu'shes los trabajadores de dicho encargo no tendría que cumplir con ese deber ya que todo el mundo les tenía un profundo terror a los dos grandes reptiles, y que casi nadie se acercaba a esa zona sin que uno de los pelirrojos los acompañara, lo cual era comprensible después del alboroto del otro día.

El día transcurrió sin ningún contratiempo, todos los trabajadores llenaron las placas de comida de los animales y activaron los alimentadores automáticos en donde solo tenían que dejar la cantidad de comida necesaria para una semana, estos se activarían a las horas correspondientes para que cada individuo tuviera su ración de comida necesaria, los de las serpientes eran mucho más grandes, estos median tres metros de largo y uno de ancho, eran dos en total, uno con todo tipo de frutas a una temperatura ideal de manera que no se dañaran, y en el otro habían algunos pescados limpios y carne, las diyu'she podían comer todo tipo de frutas y verduras, pero también se alimentaban de algunos animales y peces.

Cuando llego la hora de cerrar los chicos sabían que no se podrían ir todos juntos como siempre, por lo que una hora antes se habían despedido ya que no se verían en toda la semana, cada uno tenía sus propio planes para pasar esa semana como ellos quisieran, clay iría a visitar a sus padre y se quedaría en casa de estos, guan saldría para visitar a su viejo amigo dashi a quien no había visto en años, Fing y Doyo saldrían de la ciudad para ir a una casa en el campo que este tenía para pasar las vacaciones de vez en cuando.

Omi se quedaría en casa de un amigo suyo de estados unidos que estaba de visita, kimico estaría en una convención de videojuegos, Raimundo estaría con sus padre y hermanos de viaje, panda buba, Ashley y Le mime irían a unas aguas termales gratis por un concurso que habían ganado.

El señor fung y doyo habían sido los primeros en irse, luego fueron Ashley, le mime y panda buba, tenían que empacar sus cosas porque debían partir esa misma tarde, así fue siguiendo hasta que solo los dos gemelos quedaron en las instalaciones activando el sistema de seguridad y cerrando todas las entradas, al ser nietos del dueño tenían llaves de todas las puerta del lugar, fueron a despedirse de cada uno de sus nuevos pacientes y asegurarse de que sus alimentadores sirvieran como era debido, pero al ver que estos no trabajaban, los chicos decidieron cerrar la puerta de atrás del zoológico por donde saldrían para tomar un taxi y volver a sus hogares ya que no habían ido con sus carros.

El menor fue a ver a diol dejando a su hermano trabajar más tranquilo en el alimentador del pelinegro, quien precia estar profundamente dormido.

El chico vi que el ducto por donde salían las frutas y la carne parecía estar obstruido por algo, así que decidió volver a desobedecer las ordenar de su abuelo y entro al habitad ya que el pelinegro estaba dormido en su opinión, pero lo que no sabía era que el reptil estaba fingiendo.

Al entrar fue directo en donde estaba el tuvo por donde salían los alimentos del reptil para comprobar lo que estaba atascado y no dejaba que su máquina trabajara como era debido, dejo la puerta abierta con las llaves de repuesto colgando de su cinturón, empezó a revisar la maquina sin prestar mucha atención a su alrededor, no sintió como una mano sigilosamente tomaba la llave de sus cinturón para después ir en donde estaba la puerta de entrada al habitad en donde una larga cola la empujo de manera sutil causando que el sistema se activara de forma silenciosa cerrando la puerta con seguro.

El pelinegro sonrió con orgullo al ver que su plan estaba yendo bastante bien a su parecer, había puesto una piedra del tamaño correcto para que la maquina no pudiera trabajar como era debido, sabía que su humano vendría para comprobar el porqué no trabajaban correctamente, después de fingir estar dormido espero el momento adecuado para luego cerrar la puerta con su cola sin hacer algún ruido que alertara al menor, solo esperaba que este no se alterara y mucho menos tratara de escapar, lo cual era casi imposible sin su llave de seguridad, también esperaba que su amigo hubiera tenido la misma suerte que él en su plan para poder tener a su merced al oto albino.

Cuando el pelirrojo encontró el problema, tuvo que apagar la maquina y meter su mano en el tuvo por donde salían los alimento y halar con fuerza para poder retirar la piedra que estaba atascada, sorprendiéndose bastante ya que salió de manera muy brusca y callo de culo al piso, la piedra era del tamaños de una pelota del futbol, entendí el porqué se le había caído poco después de sacarlo, se levanto limpiándose el pantalón y encendió la maquina, la cual comenzó a trabajar correctamente dejando caer una porción adecuada de comida para el pelinegro tuviera que comer durante la noche si este llegaba a tener hambre a causa de la energía que estaba utilizando su cuerpo para recuperarse, lo cual era bastante rápido, cuando termino con su deber se dio la vuelta topándose con la figura del reptil, quien lo miraba fijamente, los ojos del mayor tenían un brillo bastante travieso.

El albino se sorprendió bastante y retrocedió un par de pasos, dirigió su mirada a la puerta y comprobó que esta estaba cerrar, miro de nuevo al mayor y este tenía una sonrisa bastante traviesa en sus fracciones, lo cual causo que por su cuerpo recorriera un escalofrió por la intensa mirada que este le estaba dando, empezó a sudar frio por el miedo que le producía el pensar en lo que le podría pasar si no salía de ese lugar de inmediato, dirigió su mano derecha hacia su cinturón, solo para ver que este no tenía nada.

-Oh mierda... estoy muerto- pensó el pelirrojo mientrassus ojos se habría a más no poder al ver como el pelinegro movía la llave queestaba en su mano derecha y sonreía aun mas    

espero les guste la continuación, perdonen la tardanza pero tuve algunas complicaciones para poder publicar este capitulo, espero sus comentarios sobre la historia y sus votos buenas noches, días y tardes según el momento que lean esto