Capítulo 5

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- ¡Despierta! - Sentí una almohada golpear mi rostro.

Abrí mis ojos y Plisetsky estaba de nuevo en mi habitación, esta vez sentado en el sofá.

- Deja de entrar a mi cuarto sin permiso - Me froté los ojos - Menos cuando has tenido algún tipo de contacto con Kira.

- ¿Qué tienes en contra de ella? ahora es mi amiga - Me miró serio con un reflejo de burla en su voz.

- Pues bien por ti - Me levanté de mi cama mientras me estiraba tranquilamente.

- Ella es más amable que tú - Se cruzó de brazos.

- Gracias por la información, casi te pregunto - Lo miré y rodé los ojos.

Se levantó y fue directo a la puerta.

- Yakov, tú y yo, iremos a practicar, apresurate - La cerró con fuerza.

- Yikiv, ti y yi, irimis i pricticir, iprisiriti - Lo arremedé mientras me dirigía al baño - Nadie me dice qué hacer - Entré en él y tomé una ducha.

...

Salí y me vestí, mi teléfono no estaba donde lo había dejado la noche anterior.

- No pudo haber desaparecido de la noche a la mañana - Comencé a buscarlo por cualquier lugar de la habitación, debajo de mi cama, en el baño, incluso en el armario, no había señal alguna de él.

Me mantuve pensando unos instantes, tomé mis patines, una mochila y salí de mi habitación

Llegué a la pista y antes de entrar escuché mi nombre en la conversación de Plisetsky y Kira.

- ¿Acerca de qué se suponía querías hablarme? - Preguntó con desinterés el rubio.

- Tengo el teléfono de Lenna y tiene... - Plisetsky la interrumpió.

- ¿Para eso me pediste las llaves? ¿Para quitarle su teléfono? - Suspiró con furia - Creí que sería algo como que ella estuviera...- Los interrumpí entrando triunfantemente a la escena.

- ¿Debería de sorprenderme de que hayas sido tú? - Avancé hacia Kira y le quité mi teléfono de las manos.

- Quédatelo, ya vi lo que quería - Respondió con un tono de autosuficiencia y una sonrisa en el rostro.

La miré indiferente y después a Plisetsky.

- No deberías prestarte a tales cosas, recuerda que aún tengo las llaves de tu habitación - Lo examiné con la mirada y me di la vuelta.

Me dirigí hacia donde estaba Yakov, metí mi teléfono en mi mochila y me puse mis patines.

- Lenna - Me llamó Yakov - Como sabes, mañana ya competirás, no te hace falta practicar más, pero me gustaría ver una vez más tu rutina.

- Uno jamás se llena de lo que es perfecto - Entré a la pista.

- Espera, primero quiero saber qué quieres representar con esta rutina -

- La gloria, claro está - Sonreí.

Él me miró interrogante y me hizo una seña para que comenzara a patinar.

Comencé con mi rutina.

*Vaya, tanto tiempo practicando esto, y mañana al fin competiré, que el mundo se prepare para ver la perfección que tengo en cada parte de mí* Respiré profundo.

Finalicé con una nueva pose y varias personas aplaudieron.

Sonreí y miré a aquellos que estaban aplaudiendo.

Glory [Yuri Plisetsky] [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora