Miradas que hablan solas (Stoneismynamee)

Capítulo 13

He quedado hace media hora con Alex, pero al ver que no contestaba tuve la necesidad de hablarle a Jorge. El muy capullo se ha quedado dormido pero menos mal que su amigo es un cacho de pan y me va a abrir la puerta para que lo despierte, así que para ello ya voy de camino a su casa.

—Pasa bonita —me da un abrazo—, no se lo tengas en cuenta, anoche salimos y hemos llegado tarde —ríe.

—Bueno...se lo perdonaré.

—Subes las escaleras y la segunda puerta a la derecha —me señala con el dedo—, estás en tu casa Paula.

Asiento y subo las escaleras con ganas pero sobretodo con nervios. Llevo sin verle desde el día del show y de nuestro no-beso, no se cual va a ser su reacción pero estoy deseando abrir esa puerta y poder despertarlo.

Muerdo mi labio inferior por nervios y abro con cuidado. Está sobre la cama de matrimonio en posición boca abajo con el edredón que solo le cubre los abdominales. Sus hombros quedan al descubierto sin camiseta. Me acerco con cuidado y me siento en un hueco libre.

—Alex —susurro tocándole el hombro.

Como esta de espaldas no veo su cara. Gruñe.

—Venga arriba, dormilón —río flojito.

Se gira inesperadamente y se tapa tanto que solo le veo la cara con la tenue luz que entra por su ventana.

—Perdóname —hace un puchero—, anoche salimos y...

—Volvisteis tarde, ya me lo ha dicho Jorge —sonrío.

—Ven, échate más para mi lado —saca su mano de debajo del edredón y me atre hacia el—puedes quitarte los zapatos, así estarás más cómoda...

—¿Pero no íbamos a desayunar? —pregunto suspirando.

—¿No quieres tumbarte a mi lado? —pregunta intentando que acabe tumbandome.

—Me quedaré dormida —apoyo mi cabeza en el cabecero. 

—Pues arriba bonita, te voy a llevar a la mejor cafetería que conozco —se levanta de un salto. 

—Te espero abajo ¿vale? —sonrío y cierro la puerta. 

En el salón está Jorge con su chica. Me cae tan bien que mantenemos una grata conversación mientras Jorge termina de editar el vídeo. 

—¿Como compaginas tan bien youtube y ella? —pregunto a Jorge que se ha sentado delante de mi. 

Sonríe mirándola. Son tan bonitos juntos que me da envidia. 

—Es más difícil ella con la universidad que yo con youtube, pero sabemos organizarnos bien, esa es la mayor clave —le da un beso en la mejilla.

—Bufff bobito ¿otra vez poniéndome los cuernos? esta ya no te la perdono. —se acerca a mi lado.

Rio ante esta situación tan surrealista pero me hace tanta gracia que adoro la amistad que entrelazan los dos. 

—Mi corazón siempre será tuyo —contesta Jorge con la mano en el pecho. 

—¡¡Oyeeeee!! —le da su chica un leve puñetazo en el hombro.

—Perdona mi amor, soy tuyo —responde riéndose.

—No puedo con vosotros, de verdad —me muerdo el labio negando. 

—¿Nos vamos bonita? —me tiende la mano Alex.

Asiendo y me despido de ellos con un gran abrazo que reconforta. 

—Son más cuquis los dos, por no decir que me han acogido desde el primer momento de maravilla, —le miro mientras paseamos por Madrid—, tienes una gran suerte.