Sorry, daddy? ; [2da Temporada.] KookV / VKook

X

[TAEHYUNG]

"Le sonreí, como si nunca me hubiera hecho daño."

No podía parar de llorar. Lo intenté, pero era casi inevitable y estar encerrado en uno de los baños no ayudaba en nada. Me hacía pensar en el gran estúpido que había sido y que probablemente Hoseok, no me disculparía y mierda, mi pecho dolía de solo la idea.

Porque tenía miedo de quedar solo. Otra vez por mi culpa. Como deseaba haber apartado a Jungkook de mi y no haberle besado. Soy un idiota, mascullé con enojo. Porque era lo único que podía hacer después del gran error que había cometido. La mirada de Hoseok fue lo que posiblemente más me dolió de ver. Sus ojos vidriosos y tratando de no quebrarse con cada palabra que me decía. Aunque no todo era tan malo, si yo lo solucionaba a tiempo o eso quería hacerme pensar a mi mismo.

Limpié mis lágrimas y salí del baño del piso en que se encontraba mi area de trabajo. Me acerqué al escritorio y empecé a empacar mis cosas, tenía que arreglar las cosas con Hoseok. Decirle cuanto lo sentía, que lo quería demasiado y que lo último que deseaba, era haberle herido de la forma en que lo hice.

Mis manos temblaban inconscientemente, mi mirada borrosa, amenazando con que lloraría de nuevo me hacía sentir como lo peor. Tapé mi boca callando un leve lloriqueo. Limpiando las lágrimas rápidamente.

Di la vuelta, listo para ir detrás de Hoseok pero la presión en mi muñeca hizo que diera vuelta. Encontrándome con Jungkook, mierda. Quería golpearlo.

-No te vayas Taehyung.

-¿Qué? -Pregunté irónico. -Vete a la mierda.

Lo empujé bruscamente. Haciendo que este se sobara el lugar del pecho.

-Entien...

-No te quiero escuchar.

Lo callé y este me tomó de la muñeca nuevamente, girándome hasta hacerme quedar muy cerca de su cuerpo. Probablemente, años atrás hubiera dejado que me tratara como mierda, pero ahora no.

Lo miré con enojo, tenía ganas de gritarle cuanto lo odiaba, pero lo peor, era que realmente solo serían palabras de perro que ladra y no muerde. Porque aún seguía teniendo sentimientos por el menor.

Levanté la mirada llorosa y me aferré fuertemente al torso duro del menor. Sintiendo las manos de este tomarme de la cintura, acercándome más a su cuerpo. Posando sus labios en mi cabello. Dando leves besos en mi cabello y no hice nada más que llorar en su pecho y arrepentirme por la estupidez que había cometido. Quería golpearle pero al mismo tiempo seguir amándole como un idiota que era.

-Taehyung mírame. -Levantó mi rostro. -Ven a pasarla a mi casa.

-Pero tengo que ir a traer mis cosas -Dije entre nervios. -Y Ho...Hoseok estará allí. -Lloró más fuerte. -Te detesto Jungkook.

Dije mientras este acariciaba mi espalda y levantaba mi mentón para besarme. El beso fue suave, saboreando los labios del contrario mientras Jungkook me aferraba más a su cuerpo.

-Lo sé.

Articuló entre el beso. Separándose para limpiar su rostro y nariz con sus manos. Alejándose del menor para verle sonriendo con amargura. Definitivamente le haría pagar por esto, por haberlo tratado como una completa mierda o más seguro, el terminaría cayendo en lo encantos del menor.

Ambos nos alistamos sin dirigirnos más palabras que podían hacer que el mayor explotara y dijera miles de cosas las cuales estaba sintiendo. Taehyung se arregló la ropa y salió de la oficina con Jungkook a la par, mientras este le decía a una chica del elevador que hoy ambos se tomarían el día libre por problemas personales.

Esta solo asentó y me miró raro. De seguro, sabía que algo andaba mal o que los dos ocultábamos algo. Porque mis ojos rojos de tanto llorar no se escondían con nada, ni yo, que planeaba hacerlo. Llegamos al piso del S1 y nos dirigimos al carro de Jungkook. Este abriendo las puertas y yo entrando sin mediarle palabra alguna. A veces, el silencio era mejor en este tipo de ocasiones.

Bajé la mirada en todo el camino. Tragando duro, tratando de no romper a llorar otra vez y me detestaba, porque probablemente no había persona más estúpida en la faz del planeta tierra como yo. Probablemente, el único idiota extremo en todo el planeta era él y su puta inseguridad de poder amar a alguien que lo hiciera sentir seguro.

El problema era, que Jungkook lo hacía sentir seguro, pero le causaba miedo que lo dejara sufrir como una vez lo dejo y es que Taehyung era de esos que se aferraban a lo que una vez sintieron seguro. Porque él jamás había crecido en una familia unida, si se podía decir así y dolía admitirlo.

Giró la cabeza hasta yacer su frente en el vidrio de la ventana, dejando que su mirada divagara por toda las cosas que iban dejando atrás. Su corazón dio un vuelvo cuando pasaron por la cafetería en que Hoseok le había pedido ser su novio y sintió la necesidad terrible de llorar por horas. Su pecho dolía y la respiración cada vez más se le iba haciendo más corta.

Las personas eran así, los humanos eran así. Por más dolor que pasaran siempre querían más. Sabiendo lo mal que se hacían a ellos mismos. Cayendo en cuencas que eran ideas casi estúpidas. Levanto la mirada y miró de reojo al menor. Quien se encontraba manejando con el ceño fruncido. Haciendo que se olvidara por segundos lo que lo estaba haciendo sufrir y despertó del trance cuando este le sonreía como idiota.

-Jungkook -Tragó duro. -Llévame a casa de Hoseok. -La sonrisa del menor se borró de su cuerpo.

-Dame una segunda oportunidad Taehyung.

-¿Por qué? -Preguntó mirando fijo al menor. -Tu me heriste y lo propio sería que yo hiciera lo mismo.

-Quisiera remediar mis errores antes que sea tarde.

-¿Tarde? -Rio sarcástico. -¡¿Acaso tienes una enfermedad terminal o que coños te pasa?! -Gritó. Callándose de golpe cuando el menor no respondía y lo miraba serio. -¿Qué te pasa?

Trató de decir, pero el nerviosismo en su voz hizo que las palabras no se escucharan casi, pero Jungkook las escuchó demasiado bien.

-Eso no importa Taehyung. -El menor paró el carro y tomó de atrás de su cabeza al mayor, acercándolo a su rostro. Para seguido pasar su dedo anular por todo su rostro hasta llegar a sus labios. -Solo dame una oportunidad.

Taehyung tragó duro, sintiendo la respiración del contrario sobre sus labios temblorosos.

-Si lo hago, ¿saldré herido? -Lo miró nervioso.

-Si eres fuerte no.

Su respuesta hizo que el mayor frunciera el ceño. Sintiendo un dolor en el pecho, posando sus manos en el torso firme del menor.

-¿A qué te refieres con eso?

-El futuro lo dirá todo, bebé.

Acortó la distancia entre ambos. Tomándolo de la nuca para hacer del beso más profundo. Mordiendo sus labio inferior para después volver a besarlo con lentitud y sintió que no se trataba de un beso más, sino, de algo más intimo y personal. Algo del cual ambos probablemente se arrepentirían mañana.

Taehyung tomó del cuello del saco negro al más alto, acercándolo más a su cuerpo, haciendo que este posara sus manos en su cuello, masajeando todo lo que estaba a su paso. Jungkook era tan hijo de puta, de esos que por más mierda sean siempre terminan obteniendo lo que quieres.

"Éramos un par de imposibles queriéndose."

Falta poco.

Los amo.