Sorry, daddy? ; [2da Temporada.] KookV / VKook

XIV

[[ Dedicado a Jexngguk , gracias por el dm más hermoso que alguien me haya enviado jamás♡ Te aprecio demasiado♡.]]

"Lo intenté, o eso creí haber hecho."

Todo era tan confuso, era como hacer preguntas y jamás obtener una respuesta coherente que llenara esa ansiedad. No era como si sus ideas ayudaran a su cabeza y sus acciones, lo hacían pensar que necesitaba ayuda más intensa. Porque las personas heridas por amores también necesitan ayuda, para poder dejar sus problemas emocionales a un lado, pero Kim Taehyung tenía miedo.

Miedo de decir lo que jamás pensó decir. Los dolores de cabeza cada vez se hacían más intensos y sus sentimientos no ayudaban en nada. ¿Por qué todo lo que hacía estaba totalmente malo? No era como si no se esforzara en sacar adelante algo, de hecho, ponía todo su empeño en hacerlo, pero al final, todo salía malo. Pero estaba dispuesto a que esta vez no fuera así.

Retiró el anillo que Jungkook le había regalado de su dedo anular y lo botó a la basura donde era más que probable, que Jungkook lo miraría tarde o temprano.

Respiró hondamente pasando sus manos por su cabello. Tenía que realmente confesar lo que estaba pasando por su cabeza. Pero es que todo era tan confuso. Hasta el punto en que cuando Jungkook estaba en el trabajo y él llegaba antes que el menor, aprovechaba esos momentos para desahogarse hasta quedar dormido.

Jungkook había cambiado o mejor dicho, estaba en proceso de cambio. Porque habían momentos en que se le salía más que otra palabra estúpida de esos labios que serían su muerte.

Sentía que el menor últimamente le estaba rechazando, hasta el punto en que venía a casa casi a las dos de la madrugada. Pero Taehyung no reclamaba, porque ¿cómo reclamarle algo a alguien que no se amaba? Pero Taehyung le amaba ¿o no?

Tragó duro conteniendo las lágrimas que amenazaban con salirse. No quería llorar, mucho menos en frente de la persona que había prometido hacerle pagar por lo que le hizo. Pero no podía, quería vengarse y decirle el hijo de puta que era. Pero su debilidad era él. Ese chico que lo hacía perder los estribos con una sola palabra. Ese chico que le hacía el amor hasta en la cocina de su apartamento, susurrándole al oído cuanto lo sentía, para luego follarle duro y terminar haciéndolo lento y suave. Sabiendo que eso volvía loco al mayor.

Pero Taehyung amaba sentir que le pertenecía a alguien. Porque todos tenemos esa necesidad de pertenecerle a alguien. De escuchar de otros labios que no son los mismos un "te amo" o "Eres hermoso". Jungkook, iba a ser su muerte.

Tragó duro y levantó su mirada vidriosa. ¿Desde cuando todo el dolor que sintió meses atrás se había convertido en "me importas mucho aunque no lo de a notar"? Limpió sus lágrimas y se sentó en la orilla de la cama, tomando su cabeza entre sus manos y sollozar fuerte. Mierda, lo detestaba tanto. Lo detestaba por hacerle sentir como si su vida dependiera de la suya. ¿Así era el amor después de todo, no?

Se sobresaltó de golpe cuando la puerta de la habitación fue abierta rápidamente y Jungkook entraba por esta con el maletín de trabajo en su mano derecha. La cerró y quitó su saco, colgándolo en un perchero para después acercársele al mayor con el ceño fruncido.

-Estuve tocando cerca de 20 minutos y tu no abrías. -Dijo enojado.

-¿Y? -Levantó una ceja. -Tu tienes llaves. No tengo porque abrirte.

Jungkook levantó una ceja con sus cejas fruncidas, tragando duro. Causando un pequeño enojo en Taehyung y no entendía el por qué. Probablemente ambos necesitaban ayuda o separarse para siempre.