FUEGO Y AGUA (NOVELA)

Desde la mañana hasta la noche

No he dejado de sonreír desde hace un rato. Hallie se acaba de ir, mamá la invitó a cenar como de costumbre. Durante este mes nos la hemos pasado juntos, todo el tiempo. LITERAL. Todo el tiempo. En las mañanas jugamos retándonos a ver quién sale primero de casa para luego irnos juntos y tomar el bus. Nos reunimos con Alex y ya dentro esperamos que lleguen Ross y Sam. Ella se sienta junto a mí y al llegar también se coloca a mi lado en clase. Ocurre que mis padres tienen la costumbre -desde que Stephen nació-, de hacer algo todos los viernes (solo para ellos); juegan, cocinan juntos, salen a algún lugar, o simplemente descansan juntos en casa. Dicen que eso los ayuda a despejarse de la rutina y no perder ese toque emocionante en su relación como pareja. Yo no estaba muy contento al principio de esto, pues era yo quien tenía que cuidar a los SS, pero después de un tiempo me acostumbré. Me volví más paciente con mis hermanos y entable un buen lazo con ellos. Y claro, la casa estaba solo para nosotros, y mis papás me dejaban invitar a mis amigos de vez en cuando. Así que todo resultaba realmente genial. Normalmente salen fuera, pero cuando deciden quedarse en casa nos dejan a cargo de una de mis tías o mis abuelos, pero ahora que vieron la gran cantidad de tiempo que pasaba con mi nueva compañera, hicieron algo espectacular.

Habían pasado varias semanas y Stephan quería cenar hamburguesas, entonces aprovecharon la oportunidad e invitaron a los padres de Hallie a nuestra casa. Mi papá asó la carne en la parrilla y cenamos todos juntos en el jardín. Ella se sentó a mi lado y nuestros padres hablaron durante horas, su madre me preguntó cómo me estaba sintiendo en la escuela y su papá me veía serio pero sonreía constantemente. Terminamos de cenar mucho antes que los adultos, así que fuimos dentro y pusimos una película de comedia. Un rato después escuchamos cómo mis papás les explicaban a los de ella su tradición de los viernes, se emocionaron tanto con la idea de mi familia que decidieron salir todos juntos los viernes. Miré a Hallie y chocamos las manos sonrientes, pasaríamos más tiempo juntos.

Y así fue. Nos mensajeábamos uno a otro:

"Ya voy a tu casa". "Te veo en 2". "Apúrate, mi mamá hizo pastel".

Pasábamos casi todos los días juntos, ya fuera si yo iba a su casa o ella a la mía, y era rara la vez que no lo hacíamos, (excepto los jueves, ya que ella tenía servicio en la escuela). Llego un momento que mi madre se molestó conmigo, y me espetó que no dejaba a Hallie en paz, y ella que necesitaba su propio espacio; pero se rindió tiempo después, cuando comprendió que no íbamos a parar de vernos.

Trabajábamos juntos en las materias de las clases, y al terminar escuchábamos música todo el tiempo, yo le cantaba canciones, sacábamos a los perros: Laika, Jake y Niki, veíamos películas. E incluso accedí a ver la serie favorita de Hallie: Pretty Little Liars... no es que estuviera mala, al contrario, pero con cada temporada que finalizábamos yo terminaba más confundido. Así que cuando acabamos la tercera acordamos ver una bajo mi elección. Empezamos Arrow y a continuación The 100.

Pero los mejores días eran los viernes, sin duda. Nuestros padres salían, el hermano mayor de Hallie iba a trabajar o salía a alguna fiesta, y nosotros (a pesar de tener que vigilar a mis hermanos) nos la pasábamos en grande. Hicimos una noche de películas para los SS, en mi casa, vimos Monsters Inc., Coraline, Los Aristogatos, Balto y El extraño mundo de Jack. Dejamos un rato a mis hermanos y nos fuimos a la sala, llevamos cojines, almohadas, sábanas, mi guitarra y unas lamparitas eléctricas de la mesa de Sophia. Empezamos a hablar y cantar, pasó como una hora, hicimos sándwiches y tiempo después, entre risa y susurros, caímos dormidos en la fortaleza con techo de tela que habíamos hecho. Cuando nuestros padres llegaron se rieron al vernos tumbados como niños pequeños. Al día siguiente era sábado y mis papás tenían una boda, eran alrededor de las cinco y Hallie y yo hicimos video llamada por Messenger.