One-shots

Shu SakamakixReader.

Dedicado a quien me dio la idea: deniskapo
Narra (T/N):
Me encontraba caminando sola por la mansión disfrutando de la agradable melodía de mis audífonos. Iba rumbo a la habitación de mi prometido, el mayor y mas vago de los Sakamaki's; Shu (salud xD). Al llegar a la habitacion del susodicho tenia planeado entrar sin siquiera tocar pero un extraño sonido me hizo detenerme antes de girar el porton. Era un gemido; uno femenino. Aunque creo que eso era imposible, puesto que la unica mujer en la mansion era yo y de vez en cuando una de las prostitutas que traia Laito para divertirse un rato. De seguro solo es de nuevo ese horrible CD que le grabo el mayor de los trillizos--Oh... Mas. Por favor...mas...¡Shu!--dijo una mujer dentro de la habitacion.No sabia que hacer, aunqur creo que lo mejor seria abrir la puerta... Y eso hice. Al abrirla inmediatamente me arrepentí pues pude ver Shu completamente desnudo sobre una mujer. Mientras que ella le arañaba ferozmente la espalda el la besaba salvajemente y ninguno habia sentido mi presencia.

El, mi prometido, quien me prometio estar conmigo por toda la eternidad y jamas serme infiel en este momento se encontraba sobre otra, besandola, acariciandola, de una manera que jamas habia hecho. Las lagrimas no tardaron en aparecer, al igual que el nudo en mi garganta--Oh Shu, que sorpresa no me dijiste que tendrias visitas--dije un poco sarcastica evitando llorar; no lo haría, no permitiría que el me viera debil. En cuanto ambos escucharon mis voz se sobresaltaron y rapidamente se separaron. Shu tenia una mirada preocupada y dolida, en cambio ella, parecia disfrutar mi expresion.---¿No se supone que a esta hora estas ayudando a Reiji con las cosas que hacía falta en la despensa?--pregunto el intentando acomodarse un poco el cabello--No, hoy no. Dijo que tenia mucho trabajo que hacer, asi que desde muy tempreno mando a uno de los empleados por las cosas. Claro que antes de salir de su laboratorio me invito a tomar el te con el, como en los viejos tiempos--al decir esto el rostro de Shu se desfiguro notablemente.

Según el, Reiji estaba enamorado de mi y por eso intentaba que yo pasara el minimo tiempo posible con el--¿Quien te dio permiso para estar con el?--me pregunto molesto--¡Tu difunta madre! No, no te creas, olvidalo, yo respeto a los muertos. De cualquier modo no necesito tu permiso si mientras que yo estaba fuera tu traias esta maldita a NUESTRA cama--tuve que parar para contener las lagrimas--¿Hace cuantos pasa esto?-- pregunte temerosa--Desde hace 6 meses--respondio la zorr...señorita que aun seguia acostada en la cama limandose las uñas. En ese momento mi corazon termino de romperse.
Seis meses.
Seis malditos y jodidos meses.
Los mismos seis que yo tenia de estar compromrtida con el. Ahora varias cosas enacagaban. Sus ausencias en toda la mansion, su extraño perfume, la forma indiferente de tratarme, sus comparaciones con otras mujeres segun el porque generalizando y su extraña mania de prosponer la boda--Eso es mentira! Es la primera vez que yo lo hago aqui en la mansion. ¡No, no! Quiero decir que es la...--¡CALLATE!--Interrumpi su extraña explicación--Solo callete, ¿Quieres? Lo que hagas o no apartir de este momento no me importa. Es mas, toma-- le dije sacando el hermoso anillo de diamante en forma de corazón color zafiro de mi dedo anular aventándoselo en la cara. Camine rápidamente hasta mi closet y saque una maleta, comenzando a meter toda mi ropa, sin doblar ni nada lo unico que queria era irme de aqui--No puedes deshacer el compromiso asi. No te lo permito--me dijo parándose rápidamente mientras buscaba su ropa interior.

Lo ignore y seguí metiendo las cosas a mi maleta--¡Te prohibo terminar de esta manera nuestro compromiso!--me grito parandose en frente de mi con tan solo los boxers puestos, dejando a la vista su marvilloso y esculpido cuerpo. Negué levemente la cabeza, no era momento de pesar en eso. Cerre mi maleta y camine con ella hacia la salida de la habitación y antes de tomar la puerta, sentí como me tomaba bruscamente del brazo--¡EH DICHO QUE TE PROHIBO TERMINAR NUESTRO COMPROMISO AS...!--un gran golpe resonó por toda la habitación. Su cara esta ligeramente volteada hacia un lado y con mi mano marcada del otro lado--¿Acaso yo me he estado acostando con alguien mas? ¿Acaso soy yo la que se volvió mas fría y te decía que tu presencia era irritante? ¿No fui yo la que te complacía incluso en el menor de los caprichos con tal de hacerte sonreír? ¿No fui yo la que te perdono el hecho de no haber estado presente en cada uno de nuestros aniversarios? No digas idioteces Shu, no fui yo la que termino con esto, fuiste tu y es mas, no estoy segura si en realidad esto comenzo. Así que déjame en paz y sigue con tu estupida vida... Pero déjame continuar la mia--poco a poco mi voz se fue a pagando hasta ya no escucharse.