El Circulo de Eonix

Capítulo 3: "Volver a olvidar"

¿Era posible lo que me estaba sucediendo?, si tan sólo era un sueño, las personas normales no sangran en la vida real cuando tienen una pesadilla, y tampoco se despiertan con un tatuaje en su espalda así porque si.

¿Y si no había sido un sueño? ¿Y si ese tatuaje apareció allí por alguna razón? Termine por tener esta conclusión después de todo.

-Capaz los aliens me abdujeron , me llevaron a su planeta y luego me hicieron un tatuaje -luego reí. Obviamente era sólo una broma. Me parecía extraño que pudiese reírme cuando me estaba sucediendo todo eso.

Todo lo que pasaba era completamente imposible.

En realidad yo no podía determinar que era lo posible o no en este mundo. Cada día en la televisión y en el periódico aparecían nuevas noticias, trágicas, sorprendentes, fantásticas, o dramáticas. El solo hecho de que una persona pudiese secuestrar, robar o asesinar me parecía imposible. ¿Que tipo de ser humano era el que realizaba esos actos inhumanos?

Además tenía tan sólo 16 años y había recuerdos de hacía 7 años atrás que ni memorizaba.

Mi identidad estaba perdida. Yo misma había tomado la decisión de olvidar. Que horrible palabra, ¿no es cierto?

A veces el olvidar es lo mejor. Es un camino fácil, en el cual intentamos no hacerle daño a los demás ni a uno mismo. Con el paso del tiempo eliminamos imágenes y momentos de nuestras cabezas.

Con el solo hecho de no recordarlas, de no acordarse alguna vez, estamos olvidando.

Es como cuando crecemos y no recordamos el rostro de algún familiar o amigo de la infancia, algún hecho, ya sea feliz o triste. Intentamos memorizar, pero por más que nos esforzamos no lo logramos.

Así me encontraba yo, sin recordar quien fui, y quien era. Mi pasado, debía ser reconstruido pero no sabía como iba a lograrlo.

Me levanté lentamente del suelo. La rodilla me seguía doliendo, pero no tanto como antes. En mi espalda sentía aquel extraño cosquilleo.

Me coloque nuevamente mi remera y comencé a buscar en los cajones algún tipo de venda.

Lamentablemente no encontré nada por lo que me tuve que poner un poco de papel higiénico para no ensuciar la colcha con sangre.

Luego me dirigí a mi dormitorio, me recosté en la cama, y cerré los ojos.

El cansancio término por ganarme.

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El sol de la mañana entro por mi ventana, iluminando mi rostro. Observe el reloj, apenas eran las ocho de la mañana. Seguramente mi madre se levantaba para ir al trabajo, ya que ella no tenía vacaciones actualmente. Mi hermano, Lily y yo nos encontrábamos en el intervalo de invierno, por lo que las clases estaban suspendidas.

Por un lado eso era algo bueno ya que no me estresaba tanto, pero por otro, hacia que me aburriese mortalmente en mi casa.

Lily seguía dormida a mi lado. Parecía un angelito cuando se encontraba en ese estado, pero luego era una hiperactiva.

Sonreí y le di un beso en la cabeza. Luego me levanté silenciosamente para no estropear su profundo sueño.

Me dirigí al cuarto de baño. Quería darme una ducha con urgencia. Me sentía completamente sucia y sudada.

¿Que me habría pasado la noche anterior para estar así? ¿Había tenido otra pesadilla más? Odiaba cuando eso ocurría, me despertaba toda sudada, con mal olor, y sin recordar nada.