¿Travesuras? ¿Dónde?

Capítulo 2

Micaela's POV

No lo puedo creer.
Esto es realmente fantástico.
¡Los idiotas tienen mi ropa interior de gatitos!
Estos chicos no saben con quienes se metieron.

Ariel toma mi sujetador de gatitos y lo mira con cautela.

–Aww ,¿No es esto totalmente tierno , chicos?– Todos se empiezan a reír y escucho susurros diciéndome "patética"–. ¿Y se supone que esta es la chica mala del grupo?– Se pone el sujetador–. "Oh mírenme , soy Micaela , doy miedo porque al que me mire mal le pego , hay pero por favor no me miren , en serio"–. Se empieza a reír a carcajadas y todos los demás también.

Al demonio, este chico tiene una lápida con su nombre escrito.

-¿Desde cuando yo digo que no me miren?– le digo al mono que tengo arriba–. Oye sirenita, comprendo que no tengas vida propia, pero no busques molestar en la de los demás, te hace ver como una niñita.

Todos alrededor hicieron "uhhh" y él me fulminó con la mirada.

–No me llames sirenita– dijo entre dientes.

–Oh, ¿por qué?– me empecé a reír– ¿A la nena le gusta la bella durmiente en vez de la sirenita?– Esta vez todos rieron de lo que había dicho de él. Él sólo me miraba como si quisiera saltar saltar y caer sobre mí.

–Micaela, basta– dijo Nat.

–Sí Mica, no gastes palabras con éstos monos– dijo Aaron y me miró con travesura en sus ojos.

Los chicos y las personas que habían de la nada se habían ido, pero habían dejado nuestra ropa interior por todos lados.

–Mejor juntemos nuestra ropa y vallamos a planear algo para enseñarles quien manda a estos chicos– dijo Aaron. Todas asentamientos y empezamos a recoger nuestra ropa.

–¡Oigan! ¡Falta mi sujetador de gatitos!– le dije a las chicas–. Ese sucio perro, ¡Me lo robó!

–Tranquila Mica, ahora es nuestro turno de hacerles una broma– dijo Nat.

–¿Pero qué es lo que les hacemos?– le dije a ella.

–¡Les teñimos el cabello!– soltó Aaron.

Realmente es una grandiosa idea.

–¿Y cómo lo hacemos?– dijo Nat.

–Es muy fácil chicas , nosotras entramos a la habitación de los chicos cuando estén dormidos y con los tintes que tiene Mica se los echamos al cabello. Fácil y sencillo.

–Pero, ¿Qué pasa si se despiertan?– preguntó Nat.

–Por favor, Nat. ¿Tú crees que esos chicos se despertarán?– dijo Aaron.

–Tal vez ¿Cómo entramos?– dijo Nat.

–Conociendo a Shawn, es tan infantil que seguramente deja una ventana abierta o algo por si el Coco se lo quiere robar– dijo Aaron y todas reímos–. Bueno, ¿lo hacemos?– todas gritamos un sí y nos preparamos para el proceso Pelirrojo.

(...)

Ya estábamos listas para el proceso, sólo teníamos que entrar en su fraternidad y aplicarles el tinte, el cual era rojo.

Estábamos en frente de su casa cuando logré ver una ventana abierta.

–Se los dije chicas, el maldito infantil tiene miedo de que el Coco lo venga a buscar– dijo Aaron.

Todas nos reímos y volvimos a nuestro plan de Pelirrojo.

Mientras estábamos en la ventana pudimos ver que los tres estaban dormidos y que la cama de Shawn tenía sábanas del rayo McQueen.

Aaron estaba que se meaba de la risa, vi que sacaba su teléfono y le tomaba una foto.
Nata se estaba riendo de como Daniel abrazaba la almohada y...¿tenía puesta una mascarilla para verrugas¿ Y bueno, yo las miraba a ellas que ni siquiera me había percatado de que Ariel estaba durmiendo con unos boxers de ¿Gatos zombies vestidos de superman? ¿Qué carajo? Esto es ridículo. No, él es ridículo.

¡Micaela no te distraigas! Sigue con el plan, tonta.

–¡Chicas, no nos dristraigamos!– les dije entre susurros y volvimos al plan.

Entramos silenciosamente y cuando ya estuvimos dentro saqué la bolsa con los tintes.
Les di una bolsa a cada una con el tinte para que se los aplicarán a los chicos y yo con mi tinte me dirigí a Ariel.

Empecé a aplicarle el tinte lo más rápido y sigilosamente y cuando termine le puse una bolsa para que el tinte quedará en el cabello por un laaargooo tiempo.

Ahora sí va a parecerse a la sirenita Ariel.

Una vez que termine me fijé en las chicas que se estaban sacando selfies, con los chicos dormidos y con bolsas en sus cabezas, les hice una seña media vudú y las chicas entendieron que nos teníamos que ir.

Mañana será un día FAN-TÁS-TI-CO.

[...]

Ya estábamos en la puerta de la escuela y estaba ansiosa por ver el nuevo look de las princesas.

Cuando entramos a la escuela no había nadie en el pasillo por alguna extraña razón.

Con las chicas nos fijamos en todos lados y cuando estábamos por el pasillo de la cafetería se escucharon unas risas.

Entramos y los primero que vimos es todo un mundo de gente al rededor de algo y cuando nos acercamos pudimos lograr ver a los chicos con los pelos totalmente rojo.

Los chicos tenían la cara escondida entre sus manos mientras que las demás personas les sacaban fotos. Cuando se dieron cuenta de nuestra presencia se pararon inmediatamente y nos encararon.

–¿Cómo se atrevieron a tocar mi hermoso cabello?– dijo Daniel, muy molesto.

–Para tú información, vi canas– dijo Nat con un toque de gracia–. Que te pusiera el pelo rojo fue tu salvación– ella le guiño un ojo y él estalló en furia.

–Escúchame, rubia barata, presumi...– empezó Daniel amenazándola con su dedo, pero Aaron lo frenó.

–Oye, rubia barata tu abuela, estúpido. Si no puedes tolerar una pequeña broma, está claro que ustedes no tienen destino de líderes– dijo Aaron y todos alrededor hicieron un "Te ganó amigo".

–¿Crees que por esto nos retiraremos?– dijo Shawn.

–Por favor, los grandes están hablando ahora, niño– le dijo Aaron y nos reímos las tres. Él se estaba por defender pero notó que era cierto y se retiró con las manos en el aire.

–Escúchenme y escúchenme bien, mocosas– empezó Ariel–. Esto no va a quedar así– dijo en tono de amenaza y se retiró con su grupo.

-Oye, ¿A dónde vas sirenita? ¿Tu papá te está llamando para que regreses al mar?– le dije a Ariel y el me mostró su dedo del medio y salió del comedor con sus otros dos amigos.

Está claro que estamos lejos de terminar esta guerra y no va a ser nada fácil ganarla.

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Hi bitchesssssss 

¿Les gusto el cap? Bendícenos con hermosos comentarios y bellas estrellitas 

Micaela Cliffer en multimedia 

Bueno. Sin nada más que decir por aquí.

Nos leemos pronto.

10-4. Cambio y fuera.