15- Verdad o reto

118 13 27
                                    

- ¿Por qué no te fuiste con ella?- Le pregunté un día a Tae.

- ¿ Y dejarte sola?

- ¿Acaso no sé llegar a casa sola? ¿Qué tiene de malo que sigas tu noche con ella? ¿No te gusta?

- Sí, no. ¿Por qué preguntas tanto últimamente?

- Porque no te entiendo. Nunca llegabas a casa cuando salías de rumba y ahora siempre llegas a casa.

- Ahora tengo un motivo para llegar a casa

- ¿Cuál? - Pregunté inocente

- Tú - Habló como si fuera algo muy obvio - Ahora tengo a quien ver cuando llego, ahora siempre te tengo presente y quiero volver a casa para saber cómo estuvo tu día, me interesa pasar más tiempo contigo. Cuando salgo sin ti no puedo dejar de pensar si estás bien, si ya comiste, si estás cansada, si necesitas algo, tengo que saber que estás bien. Así que vuelvo a casa y me aseguro de que lo estés; y si llego y ya estás dormida, me cercioro de que estás ahí y te doy las buenas noches.

Me quede sorprendida, era la cosa más tierna que me había dicho Tae desde que nos conocimos, yo tenía una sonrisa dibujada en mi rostro pero mis ojos estaban llenos de confusión. ¿Qué estaba pasando? ¿Qué significaba eso de que Tae estaba cambiando su vida por mí?

- Wow, eso fue muy tierno de tu parte... pero no deberías preocuparte tanto y dejar de hacer lo que solías. Sabes que estoy bien.

- Yo también estoy bien así. He cambiado, tú también has cambiado mucho. Hasta la forma en que caminas cambió. 

- ¿De qué hablas Tae? No seas loco.

- No son locuras, todos lo han notado. Te ves mucho más radiante cada día.

- Wow... - Una sonrisa triunfante se dibujó en mi rostro. Sí me sentía diferente, incluso cambié mi forma de vestir, y ahora me preocupaba por lucir más elegante y sofisticada incluso si usaba mis adorados convers. - Bueno, con más razón, no deberías preocuparte por mí si me ves así de bien como dices, no deberías cambiar tu vida por mí.

- Espera, si he cambiado es porque así lo he decidido yo. Si ahora prefiero estar en casa hablando contigo a estar tomando con amigos, es porque así lo quiero yo. Tal vez maduré y no me divierten los temas de borrachos tan frecuentemente.- Los dos reímos - Pero no lo estoy haciendo para ti, o esperando que me lo agradezcas, o que lo notes, simplemente desde que nos mudamos las cosas cambiaron y me gusta el cambio. Siento que estoy viviendo más feliz mi vida desde que estás más cerca de mí, estoy más tranquilo. Y eso ya es mucho porque de por sí soy muy relajado. 

Volví a reír, aunque seguía sorprendida. Tae sonaba como un hombre enamorado. ¿Se estaba enamorando? No, si fuera así, ya me lo hubiera dicho. Aunque haya cambiado seguía siendo el amigo que conocía, su sinceridad y serenidad nunca cambiarían. No quise darle más rienda al asunto y resolví simplemente tomarlo como un cumplido.

- Me alegra mucho escuchar eso. Es bonito saber que de alguna manera yo también te he ayudado a estar más feliz.

- Así es, sin darte cuenta, tú cambias a las personas, me haces querer ser mejor. Incluso he dejado de fumar.

- ¡Es cierto! ¡Te felicito por eso!.

- Creo que somos un buen equipo.

Eso, ahí estaba, un equipo, nada más. Eso me quitaba las dudas, si estuviera enamorado me hubiera dicho algo más o incluso me hubiera propuesto uno de sus tratos raros.

-------

Un viernes yo estaba saliendo del trabajo cuando sonó mi celular, era Tae.

- ¡Hola tú! - Contesté saludándolo.

Castillo de NaipesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora