-One Shots NamGi-

ANATOMY

Llegue puntual a mi cita como tutor, el chico al que ayudaba tenía problemas con algunas materias que presentaría en sus exámenes de la universidad así que le daba clases dos veces a la semana. Cabe decir que su mera presencia me dificultaba la concentración, era alto, moreno y de naturaleza seductora, sus labios te incitaban a tener intensas fantasías pues eran grandes y a leguas se notaba que era un gran besador, la perfección de su cuerpo podía notarse incluso con la ropa un poco ancha que usaba y su grave voz era todo un delirio.

Al tocar la puerta me saludo de forma casi coqueta con un brillo extraño en los ojos, me dejo pasar y caminamos a la mesa de la cocina donde usualmente daba mis tutorías. Sus cosas ya estaban sobre la mesa, solo una pequeña libreta y algunos bolígrafos, comencé a sacar mis libros mientras el husmeaba en la cocina diciendo que tenía mucha sed.

Escuche su grave voz detrás de mí.-Entonces profesor, ¿puede enseñarme anatomía?-. Escuche el sonido del refrigerador ser abierto, agua ser depositada en un vaso y de nuevo el refrigerador al cerrarse.-Entonces me imagino que al fin has decidido estudiar Medicina-. Por alguna razón hoy me sentía nervioso en su presencia.-Lo pensé mucho y la elegí al final pero aún tengo problemas con anatomía-. Escuche el sutil sonido al beber agua y el vaso ser depositado en la barra.- ¿Me enseñaras Yoongi?-. Se había acercado a mi oído y me susurraba con una voz que nunca le había escuchado, los vellos de mi cuello se erizaron, su aliento me provoco ligeras cosquillas y trague saliva.-Yo... puedo enseñarte-. Cerré los ojos un momento inhalando profundo y cuando los abrí él estaba sentado a mi lado con un rostro que casi aparentaba inocencia, tenía las manos entrelazadas sobre la mesa y una pequeña sonrisa mostrando muy ligeramente los hoyuelos.

Tome mi mochila que estaba a un lado, saque un cuaderno y un lápiz, controle mis pequeños nervios.-Comenzáremos con los huesos...hmm, primero los de la cabeza-. Empecé a trazar finas líneas sobre el papel que tomaron la forma de un cráneo, sentí su mirada atenta en mi.-El cráneo se forma por 8 huesos, 2 parietales, 2 temporales, occipital, frontal, etmoides y esfenoides-. Comencé a indicarle con pequeñas flechas cada uno de los huesos, levante la vista y NamJoon estaba mirando fijamente mi rostro.-Deberías poner atención-. Le dije levantando una ceja.-Estoy poniendo atención Maestro-. Formó una pequeña sonrisa de lado y algo dentro de mí se removió.- ¿Seguro?, a mí no me parece-. Le dije queriendo reñirlo, se inclinó un poco sobre la mesa acercándose a mí, levanto su mano derecha, la llevo detrás de mí oreja y acaricio lentamente mientras me miraba directo a los ojos y mi respiración se detuvo de golpe.-Este hueso de aquí se llama temporal-. Retiro la mano y a su paso rozo el lóbulo de mi oreja provocándome un escalofrió, Mire su sonrisa y asentí.-Correcto-. Logre decir con la voz apenas susurrando, sus acciones me tenían desconcertado, volvió a poner un rostro inocente y se recargo en el respaldo de su silla de nuevo.

Comencé a trazar más líneas en el dibujo mientras dibujaba en un cráneo de frente con los huesos de la cara mientras trataba con todas mis fuerzas de controlar los nervios que me había causado.-Te está coqueteando Yoongi, deberías seguirle el juego-. Dijo una voz seductora en mi cabeza.-Es mi alumno, no puedo hacer eso-. Me dije a mi mismo.-Oh vamos Yoongi, sabes que deseas probar esos labios desde que lo viste-.Mi consciencia tenía razón, lo deseaba pero no era ético aprovecharme de él, yo tenía 23 mientras él tenía 18.-Por una vez en tu maldita vida arriésgate y disfruta, él ya es legal-. Sacudí mi cabeza ligeramente para callar las voces de mi conciencia.

Cuando más concentrado estaba sentí su mano detener la mía, acaricio mi antebrazo derecho.-Maestro ¿cómo se llaman estos huesos?-.Su voz se había vuelto más grave mientras susurraba, acaricio mi brazo con un tacto ligero como una pluma lo que erizaba cada centímetro mi piel.-Yo...eh creo que la clase terminó aquí... no soy tan bueno en anatomía-. Me levante torpemente por los nervios y estuve a casi nada de tropezar con mi mochila, me sonrió sarcástico levantando una ceja y comencé a recoger mis cosas rápidamente para salir del departamento.