-One Shots NamGi-

DRAWING

Tome mi pequeña libreta de bocetos y acaricie la pasta antes de dejarla escondida en mi mochila y me acerque hasta el escritorio de mi compañero de clase.-YoonGi, ¿me dejarías dibujarte?-.Le pregunte tímidamente, el pequeño chico me miro desde su asiento con una ceja levantada.- ¿Dibujarme?-. Moví mis dedos nervioso mientras esperaba su respuesta, sus ojos felinos me intimidaban... tal vez era por el tipo de proposición que le estaba haciendo.-Si...yo estoy en una clase de arte y me pidieron hacer un boceto de un modelo real-. Frunció el ceño y me miro un rato sin decir nada hasta que relajo la expresión y levanto una ceja.- ¿Por qué yo?-. Y ahí estaba la tan temida pregunta, ¿qué debía responderle? "ah es que tengo sueños húmedos contigo cada noche" o "es que cada que te veo necesito arrancarte la ropa y hacerte mío" o mejor aún "es que mi fetiche es dibujarte utilizando atuendos atrevidos que imagino cada noche antes de dormir".

Lo pensé solo un segundo.-Tu complexión es perfecta para el estilo de dibujo que debo hacer-. Ni siquiera tartamudee esta vez, ya estaba tomando confianza para hablarle, lo pensó un momento y casi me arrepentía de habérselo pedido.-Esta bien, ¿Dónde me dibujaras?-. Una pequeña sonrisa salió de mis labios pero por dentro estaba temblando de emoción.- ¿Te parece en mi casa?-. Se levantó de su asiento.-Si está bien, hoy a las 6 tengo libre pero iré con mi uniforme del trabajo, pásame tu dirección en un mensaje-. Observe como comenzaba a caminar a la puerta fuera del aula.-Si a esa hora está bien...-. Hizo un pequeño gesto con la mano antes de salir y sonreí como un tonto cuando no lo vi más.

Arregle mi cabello una y otra vez frente al espejo, quería darme un estilo despreocupado, verifique que cada rincón de mi casa estuviera limpio antes de que él llegara, estaba muy nervioso, los dibujos que tenía de él eran apenas leves bocetos que se basaban en mis recuerdos al verlo caminando por los pasillos o mi imaginación, eran ligeras líneas de su cuerpo envuelto en suave ropa femenina, en un provocativo traje de enfermera con sus delgadas piernas a la vista, delicadas medias a la mitad de los muslos que me incitaban a ver más allá, ligueros de encaje de colores oscuros proyectando su personalidad, bocetos de su pálido pecho desnudo apenas mostrándose en una camisa desabotonada. Aun que ahora lo dibujaría de una forma profesional, con su ropa de trabajo quizás, eso me daría las proporciones correctas para mis futuros bocetos.

Tome mi block de dibujo y los acomode en mi mesa de trabajo frente al sofá de la sala, movía mi pie izquierdo en un tic nervioso cuando tres golpes sonaron en la puerta, me apresure a abrir y tome un momento para calmarme antes de girar la perilla.- Ya estoy aquí-. Dijo con un poco de rudeza y me hice a un lado para dejarlo pasar, inspecciono alrededor con la mirada y me agradecí mentalmente haber limpiado todo a fondo.-Bueno... ¿gustas algo de tomar?-.Cerré la puerta y se giró para verme.- No, gracias, acabo de salir del trabajo y he tomado algo allá-. Asentí y le indique con un dedo que debía sentarse en el sofá frente a mi mesa de trabajo.- ¿Que posé debo hacer?-. Lo pensé un segundo mientras me sentaba en la mesa y tomaba el block.- Algo natural, puedes tomar tú celular o algo, solo no te muevas mucho-. Sin decir nada saco su teléfono y se relajó notablemente, cruzo sus piernas ligeramente y se concentró en la pantalla.

Comencé suaves líneas, delineando cada centímetro de su perfil perfecto, delgadas líneas empezaban a tomar la forma de su cabello negro, el apenas boceto me estaba llevando poco tiempo pero perdía la concentración a cada segundo.

Después de un rato deje descansar el lápiz un momento.-Puedes descansar, iré por agua, ¿gustas?-.Negó suavemente y me sonrió, fui hasta la cocina, me recargue en el lavabo y solté un enorme suspiro relajando mis hombros. Esto me estaba sobrepasando, era demasiado para mí, tenerlo tan cerca y permitirme ver cada detalle de él sin parecer un pervertido que lo mire desde lejos era una bendición.