"Todo el día en mi cabeza. Creo que me voy a volver loco. Sé que tienes espinas pero quiero atraparte"
"Yi Bo, el es Timoteo"
Jamás creyó que esas simples palabras podrían marcar su vida de la forma en que lo hicieron. Su amigo Tae Yang, al que todos llamaban Kid Monster por ser un monstruo puro atrapado en un pequeño cuerpecito, le presentó a uno de sus amigos de la escuela de baile. Verlos era algo divertido, su amigo era bajito pero verlo junto a este nuevo y alto chico lo hacía ver aún más pequeño, por no enmarcar el hecho que el llamado Timoteo era bastante serio, todo lo opuesto a su amigo monstruo, quién siempre estaba sonriendo y jugado bromas a todo el mundo.
Timo llevaba una playera negra de malla, con detalles en blanco, sobre una camiseta blanca sin mangas, la cual sobresalía por el borde de la primera; un pantalón negro con puntos blancos; tenis negros de suela blanca, una bandana negra atada sobre su muñeca derecha, una pulsera de plata en la izquierda, un collar, también de plata, con forma de alambre de púas, lo suficientemente grande para que cualquier persona a veinte metros pudiera verlo, un par de anillos, del mismo material, uno en cada mano y una gorra negra completaba el atuendo.
Conjunto bastante peculiar si lo comparabas con el de las demás personas que se encontraban en la fiesta de su amigo. Chicos con camisas blancas y chaquetas negras, combinándolas con estampados y accesorios divertidos, que se amoldaban a la perfección con el aura juvenil que desprendían. Entre ellos se encontraba SeungYeon, el hermano menor de Kid Mon, con quien apenas había cruzado un par de saludos las pocas veces que coincidían cuando iba a la casa de su bajito amigo.
-Tampoco me avisaron sobre como vestir- dijo Yi Bo, mientras despegaba las manos de su cuerpo y veía sus ropas. Manga larga de algodón a rayas, short de mezclilla negro y tenis del mismo color, al igual que sus calcetines. Sin accesorios, salvo su arete de argolla de oro blanco. Kid Monster caminó hacia la puerta, para recibir a los invitados que recién llegaban. Ambos chicos eran de su confianza así que no se molestarían por dejarlos solos.
-Aun que me avisaran jamás vendría vestido así- dio un sorbo a la bebida que traía en mano.
-Eso no lo sabes. Pero si llegara a pasar quisiera estar ahí para verlo- río
Timoteo lo miró fijamente
-El día que eso pase pediré mi ejecución. No podría vivir con el asco- dicho eso se fue.
Yibo se quedó intrigado sobre aquel chico. Usaría sus influencias con las chicas del consejo estudiantil para averiguar sobre él. Estaba seguro de haberlo visto en el instituto sólo que en ese entonces no le dio importancia.
Y lo había conseguido, toda la información que creí relevante sobre el chico rubio de la fiesta de cumpleaños de su amigo. Sabía que su nombre era Moon Kyu, antes usaba el cabello tintando de violeta, es de ultimo año, hijo único, le gusta la cocina tanto como el baile, está bajo juramento para no ser expulsado, es de familia adinerada, está soltero, y podía seguir y seguir... Yibo por primera vez había hecho su tarea.
Ese día tendrían una reunión con el director, pues un inspector llegaría ese día a la escuela y quería charlar con los alumnos para que todo saliera perfecto. Portarse como niños educados una vez al año no era tan malo, les decía.
Yi Bo entró a su salón de clases, uno de los más grandes del instituto y notó a dos de los chicos más populares de la escuela en el aula, como si planearan algo. Eran de penúltimo año. Los había visto antes, en la fiesta de Kid Monster. Eran parte de los chicos que platicaban con el hermano del monstruo.