Rápidamente, Leon bajó por las escaleras.
-¿Sois vosotras, verdad?
-Ay madre, que somos nosotras. Nos van a matar, a vender en el mercado negro, nos van a violar Emma. ¿Qué vamos a hacer? Ellos son muchos y solo somos dos y...y...
-No, somos 4.-dijo Leon seriamente.
-¿Qué?-preguntó África sorprendida.
-Que somos 4. No pensaréis que vamos a dejar que os maten.
África no tenía palabras.
Todos miraban a Leon.
-¿Y tú qué, Derek?
Las miradas pasaron a Derek.
-Sí, yo también voy a ayudar.
-¿Y qué se supone que vamos a hacer?-preguntó Emma.
África daba vueltas por toda la habitación.
-¿Es lógico, no? Irnos de aquí-dijo Derek con firmeza.
-¿Irnos? ¡¿Tú estás loca?! Nos matarán si nos vamos de aquí.
-Nos matarían aunque nos quedásemos-dijo Leon sin tapujos.
-Ay Dios, soy demasiado joven para morir. ¡Solo tengo 18 años! No me ha dado tiempo a publicar un libro, ¡ni siquiera a tener un hijo! Viviría en un chalet, con sus perritos, su piscina, y con mi marido Jared Leto. ¡Ay que triste!-dijo África sentándose en el suelo y con toda la ansiedad de la vida.
Emma se acercó a África.
-¡Nadie va a morir y tampoco hemos querido nunca tener hijos! ¡Así que levanta el culo y relajate!
África se levantó y poco a poco se fue tranquilizando.
-¿Nunca, nunca?-dijo Derek de pronto.
Emma y África le miraron extrañadas.
-Lo de los hijos decía... ¡no se puede preguntar nada!
-Así que tenéis 18...
-¿Queréis dejar de interrogarnos? No, nunca y sí, tenemos 18.
-Vamos a morir...-seguía susurrando África.
-Nos vamos mañana.-dijo Derek
-Ay, ¿mañana?. Mañana nos morimos, y no todavía no he publicado un libro ni tenido un...
-Calla ya, pesada.-dijo Emma.
Leon puso una mano en la boca de África, impidiéndole hablar.
África le chupó la mano, consiguiendo que Leon la retirara.
-Pues me he hecho una paja.-dijo Leon riéndose.
África empezó a escupir.
-Es broma, si me la hago no lo digo-dijo Leon riendo de nuevo
África se estaba descojonando, mientras Emma y Derek les dirigieron una mirada mutua.
-Bueno, sobre los preparativos para mañana: tenemos que llevar armas obviamente, comida, agua, munición y...ya estaría.
-¿Y dónde vamos a llevar todo eso?-dijo Emma.
-Emma tiene razón, no podemos llevar todo eso en una mochila. Si tenemos que correr no es lo más útil, Leon.
-Pues yo no voy a amenazar a nadie, robar sí pero amenazar no.
-Genial, pues no lo hagas, ya lo hago yo.-dijo Emma metiendo algunas flechas más en su carcaj.
-Pues vale.-dijo Leon seriamente.
-Yo también lo voy a hacer, Leon. No me voy a morir de hambre porque tú sientas pena. Tú y yo hemos robado mucha veces juntos.-dijo Derek intentando convencerle.
África no hablaba.
-¿Y tú qué, África?-le preguntó Leon.
-Yo...ya sabéis que opino.-dijo África.
Leon no habló.
-Mi traje y el de África llevan bolsillos, podemos meter barritas de cereales o algo así.-dijo Emma mostrando los bolsillos.
-Nosotros también tenemos.-dijo Derek señalando los suyos.
-Anda, que menudas sois. Habéis conseguido que nos pongamos ropa por la mañana...mujeres.-dijo Leon.
-Deberíamos practicar un poco, mañana vamos a tener que disparar mucho me da a mi.-dijo Emma apunto de salir de la casa.
-Esperate, vamos todos-dijo Leon.
Salieron de la casa dispuestos a practicar.
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La Invasión T.
ActionNos encontramos en la 3ª guerra mundial, en un mundo corcomido por el miedo. Pero sobre todo corcomido por el poderoso líder Theo. Sólo unos pocos, denominados "X", se atreverán a romper las normas de los "T" o partidarios de Theo.