En un momento hablaba de un tema y al segundo pasaba al otro, un día se acordaba de alimentar a su gato y al otro día ni sabía si tenía gato o no, un día recordaba su dirección y al otro día no, pasaba caminando por la calle, solo, con su bata, buscando su casa, un día recordaba su nombre y a la mañana siguiente no sabía si tenía nombre, hasta que llegó el día en que se olvidó quien era, se olvidó en donde vivía, se olvidó de todo y jamás volvió.
El Alzheimer había ganado, el Alzheimer había avanzado.
ESTÁS LEYENDO
Nano relatos
De Todo-Ella no te quiere- decía la mente- Tú la amas y en el fondo sabes que ella también- replicó el corazón -¿Cómo lo compruebas?- Cuestionó la mente -Tienes que intentarlo y lo sabrás- respondió el corazón -Morirás si lo intentas- sentenció la mente Y...