Capítulo 7

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La nueva prueba.

Sujeto: 003

objeto: información bacteriológica.

Procedimiento: aplicación de inyección con dixonima rebajada.

Se espera: ver a cuanta de esta sustancia se puede exponer el sujeto sin ser dañado de forma permanente.

Resultados obtenidos: _____

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La siguiente fase a la que Astrid seria sometida, solo era parte de la nueva prueba.

Nate cada vez estaba mas aterrorizado de los nuevos procesos que fueron aprobados, si bien era un científico, no era un asesino.

Usualmente trabajan con animales y en pequeñas dosis para no provocar daños graves.

Alguien tiene que tomar el riesgo.

Eso es lo que había dicho Henry.

Y todo por avances biológicos, querían ser mejores que los demás países y no les importaba el precio.


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Todo estaba listo, dos enfermeros pasaron a la habitación donde se encontraba Astrid.

Ella dormía aun por los suministros de vitaminas que le había inyectado Nate.

Aun así tuvieron que obligarla a despertar.

Cuando Astrid despertó sintió miedo al ver a los enfermeros levantándola y obligándola a caminar, se sentía mejor pero sus piernas aun estaban entumecidas. Uno de los enfermeros tiro de su brazo haciéndola tropezar, otro intento sostenerla pero fue en vano, callo directo al piso golpeando su cara en el.

Fue tan rápido que en cuento callo la jalaron logrando rasparle la nariz que al instante comenzó a sangrar, debilitandola aun mas.

Aun así tuvieron que meterla ala cámara de gases, para ser limpiada.

Astrid sintió un escalofrío recorrer toda su piel al momento que aquellos hombres que la habían arrastrado salieron de la habitación dejándola sola y encerrada. Estaba rodeada de paredes de metal.

Miro sus pies descalzos antes de que un humo verde saliera de los rincones de la habitación por instinto Astrid cubrió su rostro con sus manos.

Desesperada golpeo la puerta constante mente, sentía angustia.
Pronto comenzó a llorar aterrada.

No sabia que era aquello, nadie le decía nada, pero ardía en su piel, como una quemadura era leve pero dolía.

El gas cesó. Pero el llanto de Astrid no.

La puerta se abrió y Nate estaba detrás de ella, Astrid corrió y lo abrazo.

No confiaba en el. Pero fue lo primero que vi para aferrarse y no entrar en pánico.

Necesitaba urgentemente a alguien que la ayudara en toda esa locura.

Astrid ya no soportaba.

Y ni si quiera habían empezado.

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Nate sentía la culpa palpable por aquella pobre muchacha pero no podía hacer nada. Pronto quito los brazos de Astrid de su alrededor.

Le dio un apretón de mano y se alejó.

Astrid se sentía asustada y eso incrementó cuando Nate se retiró, apretó su mano en señal de aliento pero nada más.

Eso era todo.

Los enfermeros la volvieron a transportar a una nueva habitación.

—Acuéstese.— hablo uno de los enfermeros con severidad.

Astrid obedeció.

Esta vez no habría anestesia pues se trataba de cuanto podía soportar.

El mismo enfermo que hablo, se colocó unos guantes de látex tomo un algodón, lo lleno de alcohol y lo frotó en una de las venas de Astrid antes de inyectarla a una especie de máquina que transportaba la dixonima.

En cuanto el líquido entro en el cuerpo de Astrid, sintió fuertes punzadas en la cabeza, náuseas, de repente todo se volvía borroso y sentía tanto dolor que ya no lo diferenciaba.

Perdió el conocimiento.

Enseguida la desconectaron de la máquina.

ASTRIDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora