Eleonor.

1- Wakefulness

-Oficial Rojas.

-Torres, necesito que investigue un caso, no tenemos la suficiente información, y la poca que tenemos no es contundente, por tanto, con exactitud no le puedo decir qué o a quién va a atrapar.

-¿Es decir que mi deber será investigar el caso de principio a fin?

-Es muy astuto.

-¿Por qué a mí?

-Es el único que veo en la capacidad de resolver algo de esta dimensión.

-¿Soy el único disponible, cierto?

-Lo es, pero algo así no se lo puedo encargar a cualquiera.

-Bien.

-Retírese.

-Permiso.

¿Qué le pasa por la mente a Rojas? No hay pruebas ni hay nada contundente, es decir, si me da un moco y un trozo de plástico qué espera que haga; bien, vamos a ver... dos asesinatos, uno a las 3:30 y otro a las 14:00, pero ambos son lugares públicos, esto debe ser una broma, posiblemente es de las 3:30 puede ser creíble, pero el de las 14:00, y mas en un lugar tan frecuentado, pero si quiera hay algo en común, ambas fueron con arma blanca, pero esto no me sirve de nada.

-Gutierrez- dije.

-¿Qué pasa?

-¿Dónde están los cadáveres de los asesinatos del Bar Nocturno Jackeline?

-Les están realizando una autopsia.

-¿Y hay indicios de quién fue?

-La están realizando.

-Sé lo que están haciendo pero puede haber una prueba, algo.

-No hay nada, de ser así estaría en el informe que le acaban de entregar, ¿qué no es obvio?

-Tu altivez es maravillosa.

-Al menos le pongo lógica a las cosas. Vamos, eres un detective y esperas que todo se te de masticado, se nota que eres un novato, un llorón.

No tengo nada de paciencia.

-¡Calla la puta boca!

-Sabes que con solo mover un dedo puedes quedar desempleado y hacer tu vida más miserable de lo que es.

-Bien.

No puedo soportar la gente tan mentecata, y Gutierrez siempre ha sido parte de esa tan funesta sociedad, en fin, es la vida de él, pero aunque poco me importa, quisiera tanto partir su cara de niño mimado que tiene, es un caguetas, aunque cualquiera dirá que yo también soy uno por no hacerle mierda su cara.

No quiero hacer este maldito trabajo, digo, ¿qué caso tiene? Esa gente ya perdió la vida y eran personas solitarias, nadie quiere justicia, a lo mejor tal criminal les estaba haciendo a un favor, a ellos o a la sociedad, alguien siempre sale beneficiado, pero no, tenemos que velar por el bien de todos ¿y si la muerte era justificada?¿Qué gano yo? Los cuerpos aún no son identificados. Bueno, mejor dejo de suponer y me siento a esperar qué dice la autopsia, iré por un café.

-Torres, hola- dijo con su voz chillona mi compañera de trabajo.

-Hola.

-¿Tienes mañana libre?

Yo bien sé que la tengo libre, pero ella no me interesa, digo, tiene buenas tetas, buen culo, pero un verruga en medio de su cara no me permite estar con ella ni si quiera para un minuto de cita. Además, se la pasa coqueteando a todos por solo conseguir sus cinco o seis minutos de gloria y placer, pero yo no voy a caer en su juego; aunque todos los que se la han cogido me han dicho que es excelente en la cama, debo decir que es tentador, pero va en contra de mis principios, tal vez la verruga sea contagiosa y me salga una en el pene, eso no me agradaría en lo absoluto, y si algún día encuentro una mujer que sea apropiada a mis expectativas, no quiero que su manjar principal se vea afectado porque su hombre quiso un acostón que ni valió la pena, y no, no me dejo guiar de lo que me han dicho sobre ella y su flexibilidad, no es lo mismo coger con una puta a la mujer que uno ama.

-No.

-Nunca tienes ninguna momento libre ¿qué tanto puede hacer un hombre en su vida?

-Cosas más importantes que coger con la primera que abra las piernas, me gusta más cogerme lo que me cuesta.

En sus ojos vi muy bien la intención de darme una cachetada, pero ella en el fondo bien sabe que es verdad, por ello, se guarda las ganas.

-¿Sabes?

-¿Qué?

-Eres un idiota.

Unas ganas infernales de decirle que es una puta tuvieron que ser controladas.

-Lo sé, ahora dime algo que no sea obvio.

-No sé cómo me interesé en ti.

-No sé cómo te interesas en todos, vamos, el hecho de que te hubiese besado en la escuela cuando recién nos entrenábamos no quiere decir que me intereses, de inmediato te digo, no me interesas y puedes decir lo que quieras de mí, yo sé quien soy y la opinión de una... de una mujer como tú no me interesa en lo absoluto, adiós.

Ya entiendo por qué nunca tengo novias, son vacías y yo soy directo, y si no las cojo o si no me desgasto siendo un dramaturgo admirando sus ''atributos'', me dejan.

La mujer de mis sueños no existe, lo sé. Por eso debo aceptar lo que sea diciendo que no me importa su raza, sus creencias, su familia, sus operaciones, si no tiene curvas, si está calva. Bueno, realmente lo único que quiero es que su pensamiento sea abierto, que no se crea superior a nadie, que sepa ser directa, que no tenga pelos en la lengua, aunque no me molestaría que la mujer de mis sueños existiera.

Lo más importante es que su mentalidad y su pensamiento sean asombrosos, que tuviera un cuerpo hermoso, sin operaciones y su rostro que sea perfecto, en fin, dudo que una mujer con tal calidad de pensamiento exista.

Recuerdo que hace unos cuantos meses vi una mujer, según lo que me dicen era recién llegada para entonces, vivía en Estados Unidos, nacida en México, pero nunca logré saber su nombre, y si no lo logré saber, debió ser por algo, seguramente no es para mí, pero era hermosa, recuerdo que sus ojos eran azules, pero tenían algo en ellos que la hacían más especial a cualquier otra mujer que hubiese conocido en cualquier otro momento o lugar.