- ¿ Nos podemos unir?. - alzo mi vista y Amber se ve feliz y él ni se diga.
- Claro, ¿ porque no?. - sonríe Gibson, pero yo no quiero.
Ambos toman asiento y se siente todo muy incómodo, Amber está al lado de Gibson y Matty del mío.
- ¿ Van a pedir algo? , adelante, nosotros ya comimos. - comenta Gibson y yo sigo comiendo mi postre.
Siento calor y no se si es porque estoy enojada.
Decido quitarme mi chaqueta y la dejo a un lado de mi asiento.
- No, solo venimos por el postre, son muy buenos aquí. - veo a Amber y le sonríe a Gibson, quien le devuelve la sonrisa.
- ¿ Quieres algo, Luke?, ¿ Me acompañas Gibson?, tú mamá es la mejor con los postres. - ambos se levantan y me dejan sola con Matty.
- ¿ Como que su mamá es la mejor con los postres?. - alzo mi vista a Matty y esta algo enojado, tiene las manos en puño y no se que le molesta.
- La dueña del lugar es su mamá. - se limita a responder y ni siquiera me mira, es más me evita y fija su mirada en una de las mesa.
- ¿ Estas bien?. - toco su mano y él la quita.
Entiendo todo, no quiere que su chica nos vea juntos, me limito a comer mi postre y no verlo, es un idiota, solo soy amable con él.
Que se joda.
- ¿ Te arreglaste solo para él?. - su tono es bajo y me mira suplicante.
- ¿ Qué?, no, las chicas me obligaron. - pongo mis manos en mi regazo.
- Ponte la chamarra, puedes pillar un resfriado. - lo miro confundida pero lo hago, se ve triste pero aliviado.
- Listo. - llega Amber, pero Gibson no.
Le da a Matty una pequeña tarta de manzana con nueces, y ella uno igual al mío.
- Gracias por todo, Gibson. - le doy un beso en la mejilla y entro a mi casa.
Después de que la cena terminará, Amber y Matty se despidieron, pero yo no me acerque a él, solo dije adiós con la mano.
Era viernes y por fin llegaba el fin de semana y la fiesta de Coralina.
Al siguiente día de la cita nos reunimos en casa de Daría y les conté todo, menos lo de Matty, no valía la pena.
- Rápido chicas, saca el uniforme y cambiate. - Daría me tocó la espalda, estábamos en el vestidor de chicas y yo seguía buscando mi uniforme, no estaba en mi casillero.
- No está mi uniforme, ¿ Qué hago?. - seguí buscando pero nada, hasta que me vino un recuerdo, me lo había llevado para lavarlo y no lo traje conmigo.
- Toma el mío, algo es algo. - Coralina me arrojó un uniforme suyo extra.
- No me va a quedar, tu estas delegada y yo no. - miro el uniforme y es muy pequeño, ellas les gusta así, pero a mi no.
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SALTAR AL VACÍO
RomanceQuien iba a saber, que unas simples tutorías, tendrían como resultado conocer a una persona que se iba a volver especial en mi vida, y que con él podría a pasar momentos, increíbles. Todos sabían que él, era un caso perdido, y yo no me o ponía a eso...