Capitulo 2

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Al día siguiente, después de instalarnos en esta pedazo de casa, me decidí por explorar un poco este pueblecillo. Justo antes de salir por la puerta, mi madre me paró y me dijo lo siguiente, quizás en uno de los tonos mas serios de los que jamás me ha hablado, : " No se te ocurra volver después de que anochezca, te quiero aquí antes de las 7, ah y no te acerques a la colina White Stone"
Si, mamá, esa fue mi respuesta.

La colina White Stone, ese nombre no paraba de repetirse en mi cabeza, es como si ya lo hubiera escuchado antes no sé, es algo extraño. Intenté no pensar más en esas palabras.
Eran las cinco y media asi que tenía tiempo para seguir explorando. Busqué el lugar el cual el día anterior vi un grupo de chicos y ,bueno esto si me parecio raro, una sola chica. ¡Bingo! Lo conseguí encontrar. Era un lugar frío, colores palidos y muy blancos abundaban la zona, un árbol muy frondoso presidía el lugar en el que todos se reunían, tenía muchas raíces y muy grandes, me fijé en algo extraño, parecía haber una puerta en él, serían cosas de mi imaginación.

-Eh... Hola, me llamo Lenna -

Mirad a esa chica, es muy guapa y esta buenísima, le quedaría de muerte la capa roja. (Esto fue lo que les oí cuchichear a todos los chicos, tenían intención de seguir pero...).

-¡Basta! ¡Callaos ya! - Gritó la unica chica en tono celoso. -No nos hemos presentado chicos eso es de mala educación- Dijo en forma de superioridad.

-Me llamo Sofie, y estos son de izquierda a derecha: Tomas, Edward, Matt y aquel de las gafas es Daniel.

-Habladles de nosotros chicos. ¡Vamos!

-¡Esperad! - Grité. - No quiero ser descortes, pero me tengo que ir, ha sido un placer conoceros.( Eran las seis y media, estaba empezando a anochecer y no quería que el primer día mi madre me castigará.

Al salir de aquel lugar, Matt se acercó a mi, sin que los demás lo notarán. Y me dijo:

-No sabes dónde te estas metiendo.

-¿Qué, porque ? Acaso no sois buena gente, porque lo parecéis, bueno Sofie...

-Si, ya lo sé tenerla como hermana a veces también es muy difícil, pero con el tiempo te acabas acostumbrando. Bueno debo irme. Adiós.

Cuando me giré no había nadie, como si hubieran desaparecido todos.

Llegué a casa, toque al timbre, me abrió mi padre, eran las siete menos cuarto. Estuve hablando con mis padres sobre el día más raro que había tenido. Me repitieron los dos muchas veces, que había mucha más gente de mi edad en el pueblo y que si no me gustaban que me fuera con otros. Eran las ocho y ya no quedaba nadie en las calles algo raro, porque de día había mucho ambiente en el pueblo.

Me puse a hacer una videollamada por swipe con mis amigas y Mary ha conocido a una chica que es genial , y Chloe también ha conocido a un chico, Sergio, es buena gente, pero un poco demasiado chulo. Y yo, yo sin novio, aquí en este pueblecito.

No las echo de menos porque dentro de 2 días vuelvo a DownLinch, nuestra ciudad, y las veré.

Lock VillageDonde viven las historias. Descúbrelo ahora