Un gran campo de flores estaba ante él, de pronto acostado sobre ellas, los pétalos picando su rostro mientras que su mirada mostraba tristeza, a pesar de estar en un lugar tan bello se sentía vacío. Solo unos minutos después unos brazos le envolvieron el cuello con suavidad y un dulce olor como la comida de su madre lo invadió
Trayendo aunque fueron por unos segundos se serenidad y felicidad
Hasta que la escucho
—Kaneki...
—¿Rize?
—Kaneki...
—¿Kaneki?, Oye Kaneki.
—Eh... A lo siento Tsukiyama, estaba distraído.
Tsukiyama suspiro empezando desde el inicio su conversación a su pesar
—Te recordaba que los trajes Blancos que pediste ya están listos. Aunque como ya sabes Naki aún no se acostumbra a la forma... Llegando a llamarlos "basura cara".
Finalizando con un claro descontento
—... Ya veo.
Contesto cortante como siempre pero aún más desinteresado, tal vez su cuerpo estaba presente en esa mesa pero la mente no. Tsukiyama lo notó al instante
—Kaneki-kun, te ves un poco distraído. A veces puede llegar aburrir tanta información asi que sal un rato, yo me encargaré de esto.
Hablo con un tono suave y dulce como si no tuviera otras intenciones pensó Kaneki
—Está bien...
Salio sin apuros controlando su paso hasta dejarse caer en un poste como si estuviera al lecho de morir. El frío congelaba sus manos y si fuera un humano ya debería haberse enfermado pero ya no lo era desde hace tanto tiempo, ya no. Intento volver a recordar en esa alucinación que se sentía tan real de Rize.
Eso fue extraño... Se dijo a sí mismo sospechando de que probablemente era algún síntoma por no haber comido y en consecuencia estaba delirando de nuevo. Sintiendo que su boca se estaba secando decidiendo ir por un café al único lugar donde se sentía a salvo
Al entrar a la pequeña cafetería:re, sonrió al ver a Touka. Intercambiaron saludos para que rápidamente la mujer empezará a servirle una taza de café. Sentándose al frente de ella saboreó el amargo liquido que le hizo olvidar sus antiguos pensamientos
—Esta bueno Touka.
Le felicito para terminar su taza de café y dar un suspiro satisfactorio, con solo un sorbo le traía muy agradables recuerdos de Anteiku y sus días ahí viéndose sentado admirando el lugar... Y a Rize
Estoy loco
—¿Te sucede algo, Kaneki?.
—¿A—a mí? No, estoy bien.
—No lo se, llevás mas de 10 minutos viendo la taza de café vacía, ¿Mas?.
Habló Touka burlona para mover un poco la cafetera ofreciéndole cortésmente
—Por favor.
Empezó a servir y sin quitar la vista Kaneki observo como el liquido marrón llenaba de nuevo su taza
—Gracias Touka, me volvería loco tu café.
—De nada.
La mirada de Kaneki choco con la suya sonriéndole agradecido provocando un extraño sentimiento, tal vez era vergüenza de parte suya. Touka rápidamente miró hacia otro lado y Kaneki tomo un sorbo del café quemándose la lengua por accidente
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El Ciempiés Caníbal Y La Glotona
FanfictionDespués de que Kaneki viera a Rize en la bodega de Yomo, todo cambio, solo de ver a la persona que le dió fuerza y valor, llorando y pidiendo ayuda a su padre... Fue de desastroso para nuestro cienpies... Y qué pasaría si el cienpiés caníbal se volv...