Fin de semana

1K 45 22
                                    

El tiempo paso volando desde que Kaneki se fue. Rize se encontraba lavando las tazas de café, sentía muy bien que el la abrazara, ella aún recordaba como se podía sentir el duro y fuerte pecho de Kaneki chocaba con ella y la hacía estremecer del calor que sintió en ese momento no como algo más si no algo consolador, pensó en ello y las piernas se pusieron débiles ante la idea de que la volviera a abrazar de esa manera

Se sonrojo e intento dejar de lado sus pensamientos

Dejo las tazas escurrir para salir de la cocina y se dirigió al sofá gigantesco, sentada tomo una almohada acostándose pero se sentía muy pesada, no había dormido la noche anterior por culpa de Yomo, siempre salía y la dejaba sola aunque ya no dependía tanto de él, estar sola le daba miedo

Se acordó sobre el libro nuevo y rápidamente lo empezó a buscar

—¿Dónde lo deje...?

Se pregunto Rize por su preciado libro, buscándolo entre las almohadas esparcidas para hallarlo, paso sus manos por el libro con una sutil sonrisa recordando como Yomo le había regalado algo tan especial para ella, siempre le quería agradecer pero él decía que mientras lo apreciará era suficiente, aún que sabía que se enojaba mucho cuando le decía eso. Empezó a leerlo con cautela, se había quedado en una parte excitante de la historia donde se desarrollaba el escenario de una guerra mortal entre quien estaban arriba de la cadena alimenticia, simplemente sorprendente

Sin embargo un ruido se escuchó afuera del departamento, Rize rápidamente quito la atención de su libro con molestia, dejándolo en la mesa para ponerse de pie y dirigirse a la puerta de la entrada, y cuando abrió esta

—Pero que...

.

.

.

—¡Kaneki!

Gritó Tsukiyama intentando capturar la atención de algún modo del líder pero él estaba en otro mundo. Kaneki seguía completamente hundido en sus pensamientos, debía de encontrar una forma en el que Yomo no se enterara de la situación, no era el mejor momento para emboscar al cuervo, fácilmente lo podría dejar muerto. Sin previo aviso recordó como toco a Rize para ponerse todo rojo

Se tapo la cara rápidamente con un libro intentado calmarse, Tsukiyama lo miro curioso y se acerco más a él hasta estar sentado a su lado, levanto el ceño cuando vio como las orejas de Kaneki estaban rojas, supuso que debía de ser por alguien

—¿Y cómo esta la señorita Touka?

Pregunto suavemente para inclinarse un poco a su izquierda dejando el peso en sus manos haciendo que el sillón de cuero sonara crujiente, Kaneki parpadeo por el comentario de Tsukiyama

¿Qué tenía que ver Touka? Se cuestiono haciendo que el sonrojo desapareciera ligeramente, Tskiyama sonrió y cruzo sus brazos para ponerse en una posición algo dominante

—Pues supe que se quedo un buen rato charlando con Touka y solo tenía curiosidad por ella, Yomo-san a estado mencionando lo hermosa que se...

Pero Kaneki dejo de escuchar cuando dijo Yomo, ¡lo había olvidado por completo!, maldita sea, como pudo olvidar que tenía que hablar con él maldito de Yomo, se rasco la nuca enojado y rápidamente miro fijamente al ghoul puro, por un momento el joven heredero se le congelaron los huesos por la fría mirada de Kaneki

—¿Tskiyama, sabe dónde se encuentra Yomo-san?

Dijo Kaneki sin pensar en su tono de voz, era tranquila pero fría y cortante como si diera una orden, Tskiyama trago saliva antes de responder y parpadeo varias veces, ¿No estaban hablando de la belleza de Touka? se dijo en su mente por la pregunta de Kaneki sobre la ubicación de Yomo

El Ciempiés Caníbal Y La GlotonaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora