No eres tú

6.- Ahora eres un miembro más de Fairy Tail

Makarov Pov

El mócoso y yo habiamos llegado al pueblo, ese niño se asombró con lo que veía, pues estaba claro que solo vivía con su padre en el bosque y no pisó ningun sitio como este por lo que me habia contado en el camino.

-Anciano, ¿qué lugar es este?- me dijó el niño.

-Es un pueblo, Natsu, aqui encuentras desde comida y vestimenta hasta objetos magicos y alguna que otra baratija-.

-Increib...- escuché un sonido que no se me hizo dificil reconocer.- ¿Tienes hambre, mócoso?-

-Siii-dijó el pelirosa pasandosé ambas manos en su estomago.

-Esta bien, vamos a comer- esas palabras fueron suficientes para alegrar al niño. Buscamos un restaurante en todo el pueblo en el cual solo habian tres, dos de ellos estaban ocupados, aunque, al fin y al cabo, la comida no era tan exquisita.
Encontramos un restaurante que no estaba en tan buenas condiciones pero, algo era algo.

Entramos y nos sentamos en una mesa cerca de una ventana, se acercó el camarero y hicé mi orden, el muchacho escogió todo lo que estaba a su disposición, <<Es del tipo de los que comen y no engordan>> pensé mientras me bajabá una gota de la cien. En el tiempo que sé preparaba la comida, a mi cabeza le llegó la idea de preguntarlé algo al niño.

-Oye mócoso ¿nunca antes habias estado en una ciudad o en un pueblo?- inquirí, lo hicé por lo menos para tener algo de que hablar y que no se forme un silencio tetríco.

-No, todo el tiempo me la pasaba con el, no me he despegado ni un segundo de él desde que me encontró cuando solo era un niño.

-¿Entonces no es tu padre verdadero?

-No, dijó que me había encontrado en el bosque, decidió educarme y enseñarme su magia, y le estoy muy agradecido por eso, espero que él este bien y que pueda reencontrarme con él.

<<Pobre muchacho, abandonado por su familia, no voy a dejar que pasé por ello de nuevo>> pensé para mi mismo, voy a hacer lo posible para que no sufra de nuevo.

- Bueno, al menos no estaras solo de nuevo mócoso, te presentaré a tu nueva familia y te pondré la marca del gremio.

-¿Marca de gremio?- preguntó Natsu

-Si mira- le mostré mi marca de gremio que se encontraba en la mitad de mi pecho, era de un color blanco.

-¡Jooo, genial! Yo quiero que mi marca sea en color rojo y que este en mi hombro derecho.

Me alegró la emoción del mócoso por unirse al gremio, habia llegado la comida, solo me fue entregado un solo plato, mientras que a ese niño le dieron como unos diez, solo procuré a implorar que no tenga que pagar tanto dinero.

Me impresionó cuanta cantidad de comida podía digerir este mócoso, parecía como si no hubiera saboreado nada en dias o que comía de todo lo que encontrara para que nadie se lo arrebatará. Yo comía tranquilamente, mientras que trozos de comida salían por los aires y la gente nos miraba sin quitarnos la vista de encima y, eso no era lo peor: de 100.000 jewels que traía en mi bolsa, tuvé que gastar 50.000, eso me hizó derramar lagrimas sin parar, ya me era suficiente tener a un montón de niños haciendo travesuras y causando daños por doquier. Pero agradezco por no tener que lavar platos. Al parecer el implorar funcionó.

Despúes de salir del restaurante nos dirijimos a la estación de trenes, compramos los boletos, que menos mal tuve el dinero suficiente para pagarlos.

Entramos al tren y en cuanto comenzó a andar, Natsu se puso extraño.

-¿Oye mócoso, que te sucede? Te ves raro.- y no era solo un decir, tenía las manos en su estomago y en su boca como si tuviera ganas de vomitar.