Y aquí están los dos últimos capítulos. Espero, de verdad, que os haya gustado. Y estad atentas. Pronto habrá nuevas historias. Besitos, y gracias por vuestros votos y comentarios.
Nadie preguntó por la ausencia de Alexia durante la cena aunque Marc miraba furioso a Damon en cuanto tenía oportunidad. Todos, excepto Elise, suponían que la había castigado por lo ocurrido.
-¿Puedo saber por qué me miras como si quisieras matarme, Marc?-preguntó Damon sin levantar la vista de su plato.
El humano sin responder salió del comedor.
-Creo que iré con él-murmuró Miriam levantándose.
-Miriam-llamó el rey-dile a tu novio que no he castigado a mi esposa. Así quizás pueda volver y terminar su cena.
-Sí, majestad.
Damon se levantó y salió también del comedor. André miró a Elise con fijeza.
-Tienes cara de ser el gato y haberte comido el canario de la casa sin que nadie más se haya enterado.
Elise soltó una carcajada
-Hay que reconocer que me conoces bien, hermano.
Damon subió a su habitación a media noche. Esperaba encontrar a su esposa durmiendo y poder observarla un rato antes de alejarse de ella. Al día siguiente ella se iría, eso era seguro. Entró en la habitación y se sorprendió al no verla en la cama. ¿Se habría ido sin decir nada? La sintió detrás de él pero antes de poder volverse ella le abrazó desde detrás.
-Tengo que decirte dos cosas Damon. No te vuelvas antes de que acabe, por favor.
Él asintió. Alex se alejó un par de pasos antes de seguir hablando.
-Tienes razón. Has sido conmigo todo lo que se supone que un vampiro es. Un verdadero monstruo.
-Alexia...
-Sin embargo-siguió la chica sin dejarse interrumpir-también me has mostrado que tienes un lado humano. El empeño que has puesto en que se hiciera la paz entre humanos y vampiros ha sido...bueno, ha sido maravilloso por tu parte y eso unido a que seas capaz de dejar que me vaya a pesar de quererme...hace que...que... yo también te ame. No me di cuenta hasta estos tres meses que...
-Alexia-llamó Damon aún sin volverse.
-¿Qué?
-Sé que te he dicho que no me volvería pero... necesito abrazarte. ¿Me das permiso para mirarte, por favor?
Alex rio divertida.
-Sí, claro...
No pudo decir más antes de que la boca de Damon cayera sobre la suya y la silenciara. Alex le abrazó y respondió con la misma pasión y cuando él la cogió en brazos y la llevó a la cama colaboró gustosa en quitar la ropa a su vampiro.
-Alexia, creí que te había perdido.
-Estoy aquí-susurró ella moviéndose contra él para buscarle-no voy a irme a ningún sitio.
Damon entró en ella con cuidado.
-Te amo, mujer-murmuró contra su boca-no sé qué habría hecho el resto de la eternidad sin ti.
Ella volvió a reír.
-El resto de la eternidad es un poco paradójico, ¿no crees?
Él sonrió y embistió con más fuerza en su interior haciéndola jadear.
-No estarás riéndote de mí ¿verdad, señora?
-No, mi señor. No me atrevería.
-No sé por qué me parece que mientes, señora. Pero creo que tendré que acostumbrarme a eso.
Y él procedió a demostrarla lo dispuesto que estaba a acostumbrarse a ella.
Cuando terminaron Alex se acurrucó contra Damon.
-¿Qué más querías decirme?-preguntó él.
-¿mmmm?-dijo ella medio dormida.
-Me has dicho que tenías que decirme dos cosas, ¿qué era la otra?
-Estoy embarazada-murmuró ella sin abrir los ojos.
Damon se quedó paralizado por un momento.
-¿Qué has dicho?
-Por Dios, Damon, eres un vampiro. Oyes perfectamente.
-¿Estás segura?
-Sí, hablé con Elise hace un rato y fue a por un test. No pareces muy...contento.
El vampiro se incorporó.
-¿Contento? No puedo creerme lo afortunado que soy, mi amor.
La abrazó con tanta fuerza que ella le tuvo que pedir que parara.
-¿Estás bien? ¿Te encuentras bien?
-Sí, de hecho por eso he tardado tanto en saberlo. No tengo la regla desde que nos separamos pero no tengo otros síntomas y por otra parte...
-Pensabas que era imposible hasta que supiste la verdad sobre tus padres.
Ella asintió.
-Nuestro hijo va a ser ¾ vampiro y ¼ humano. ¿Ha habido alguna vez algo parecido?
-No te preocupes por eso, querida. Iremos solucionando las cosas como vengan. Sabiendo que estás junto a mí, todo parece fácil.
-Sabes que seguiremos discutiendo, ¿verdad?-preguntó la chica somnolienta.
El vampiro suspiró.
-Espero que el embarazo te quite las ganas de enfrentarte conmigo continuamente-dijo abrazándola-pero si no es así, al menos tendremos las reconciliaciones.
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Alexia (saga Saint-Croix 1)
VampireAlexia ha caído en manos de su peor enemigo, el vampiro que juró vengarse de su padre. Ella está decidida a no dejarse dominar. Sin embargo, pronto se dará cuenta de que lo que había creído hasta entonces no es necesariamente la verdad. Registrada...