Siglos atrás, cuando los humanos aun no conocían a las criaturas mágicas, cuando ellas aún estaban escondidas de todos, cuando abundaba la paz y tranquilad, el reino de Frayleah, reino de las Driadas, era protegido por 4 guardianes.
El gran Dragón rojo del sur, poderoso en la estación de verano, el dios del fuego, sus llamas era tan fuertes y poderosas, que ningun Dragón en el mundo podía igualar su fuerza, su piel era tan dura como miles de rocas juntas, era impenetrable ante cualquier espada.
El poderoso Troll del bosque del Este, poderoso en la estación de Primavera, Dios del agua, era grande y fuerte, tal vez el Troll más valiente del reino, su misión era proteger y resguardar la tranquilidad en el reino.
El valiente unicornio de las nieves del Norte, Poderoso en la estación de invierno, Dios de la tierra, uno de los seres más preciosos del reino, destinado a proteger a los seres más puros de corazón.
El invencible lobo blanco del Oeste, Poderoso en la estación de otoño, dios del agua, uno de los guardianes más leales y poderosos del reino, destinado a cuidar y proteger a todos los seres mágicos del reino.
Juntos eran invencibles, cuidando los cuatro puntos cardinales del gran reino de Frayleah, protegiendo a todos los seres mágicos, trayendo gran paz y tranquilidad.
Guardianes reales de los reyes y príncipes del reino por miles de años.
Las paz abundando por años, los humanos no eran conscientes de ese gran reino, mucho menos de los 4 guardianes que custodiaban, por siglos las batallas entre seres mágicos y humanos se habían dado, dejando sin vida en su mayoría a seres mágicos por ser más inocentes.
El reino de Frayleah habia estado oculto por siglos, hasta que el humano se internó en los bosques, encontrando ese mundo mágico y maravilloso, trayendo consigo no solo destrucción, si no también desgracia para los dos diferentes mundos.
ESTÁS LEYENDO
The Princesses Of The Forest
FantasyEl bosque las había ocultado por mucho tiempo, habian vivido tranquilas hasta que el ser humano llegó y rapto a sus dos Gemelas que mantenían la tranquilidad.