Es extraño pensar en lo que era hace apenas unas semanas, nunca imaginé que lo que pienso ahora, lo pensaría algún día.
Bueno, tal vez sí; siempre supe que era diferente a mi familia y a mis amigos, nunca quise saber realmente el por qué, todo el tiempo trataba de auto tranquilizarme diciendo que sólo eran ideas mías, que en realidad sí era como los demás.
Que equivocada estaba. O al menos, no soy como la gente que conozco.
Cuando era niña, tenía una que otra duda, aunque siempre que alguien me atraía, era un niño, nada fuera de lo "común" tomando en cuenta que actuaba como la sociedad lo establece.
Tuve interés por la comunidad LGBT, desde que supe sobre la existencia de personas que tenían pareja de su mismo sexo. Nunca me molestó, de hecho, me agradaba la idea de que sin importar el género, dos personas pudieran amarse. Mis padres tampoco son personas que se sientan incómodos conviviendo con ellos, tienen varios amigos que pertenecen a esa comunidad.
Claro, siempre va haber gente que juzgue a los demás, que no se sientan cómodos con la idea de alguien homosexual cerca. A esas personas, trataba de ponerle la menor atención posible, me enojaba que se expresaran mal de otras personas, de personas a las que no les importaba el qué dirán; simplemente eran quiénes querían ser.
Yo decía que me molestaba, porque era una falta de respeto, que me molestaba porque todos tienen derecho a estar con la persona que quieran, eso me decía a mí misma, pero a veces no me sentía tan segura.
Así es como comenzó todo, como se plantó esa pequeña semilla que llamamos duda, la traté de ignorar, pero me di cuenta que ahora es imposible, que ya no es más una semilla, ahora ha crecido y se convirtió en un gran árbol, para colmo, cada vez que hay viento, ese árbol hace ruido, y simplemente ya no puedo evitar escucharlo, ya no puedo ignorarlo, y sé que es momento de ponerle atención.
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Aceptando quién soy
No FicciónHa pasado el tiempo, siento que ya nada es igual; yo soy diferente, veo las cosas de otra manera, y es cuando finalmente me percato de que ya nada será lo mismo. Tengo 16 años, he descubierto parte de quién soy realmente, no lo he hecho completam...