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— Bienvenida a Mc'Donalds, ¿cuál es tu orden? — Habló tratando de sonar normal, aunque un sentimiento de decepción me abarcará en ese instante.

— Hola a ti — Respondió con la maldita sonrisa de siempre. — Pensé que habíamos dejado las formalidades. Ya sabes, "bienvenida a Mc'Donalds" — Trató de sonar como yo, con una pésima imitación, por cierto.

Me hubiese reído si la situación no fuera la de ahora.

— Si no vas va pedir nada, será mejor que le cedas tu lugar a la persona de atrás. — Dije serio mirando la pantalla, porque estaba seguro que si la miraba, caería por ella.

Entre abrió sus labios sorprendida. Quizás por mi actitud. Pero yo estaba más sorprendido por el hecho de que me allá ocultado algo más importante, como el hecho de que tenía novio.

— Uhmm... Lo siento. — Sus mejillas se tiñeron de rosa y miró hacia el suelo. El tipo que la acompañaba se encontraba en la mesa sentado, con su celular. — Supongo que pediré dos cuarto de libra con queso, dos bebidas y un McFlurry. — Pronunció con un toque divertido y está vez mire por primera vez sus ojos. — Pero el Mc'Flurry es para ti. Un agradecimiento por el helado gigante del otro día. — Sacó el dinero de su bolso.

— Eso no fue nada, no necesito una recompensa.

— Pero quiero hacerlo.

— No Brooke, no seas terca. — Suspire al mismo tiempo que Brooke.

— Jimin. — Me reprendió.

— Brooke, no.

—¿Necesitas un tiempo Jimin? — Pregunta Jesse, un chico de la cocina que a veces me reemplazaba en la caja cuando tenía ganas de hacer pis.

— No.

— Sí. - Respondió Brooke a lo que yo elevé mi ceja por su repentina confianza.

— No la escuches, está loca.

— ¡No estoy loca!

— Chicos, los clientes no tienen precisamente un buen rostro en este momento. - Dijo Jesse tratando de calmar la situación.

— Entonces que hable conmigo.

— Estoy trabajando.

- ¡Habla conmigo! - Gruñó Brooke.

— La siguiente. — Le dije a la muchacha detrás de la chica Mc'Donalds.

— ¡Jimin! — Gritó.

—¡Brooke! — Habló el tipo que venía acompañandola.

— ¡Jesse! — Lo llamé.

— ¡Ustedes dos arreglen sus problemas fuera! — Exclamó Jesse elevando la voz, sobresaltandonos a ambos.

Salí de la caja, dirigiendome hacia afuera con Brooke detrás de mi. Su acompañante se quedó dentro, recogiendo el pedido que había hecho Brooke tiempo antes.

— ¿Estás consciente del escándalo que hiciste allí adentro? — Pregunté una vez que estuvimos fuera del local.

— ¡Fue tu culpa! Tú estas intolerable hoy.

— ¿Por que no me dijiste que tenías novio? — Solté la duda que me estaba comiendo por dentro, después de unos segundos de silencio. Solo salió de mis labios sin darme cuenta. Ella en un comienzo se sorprendió. — Pensé que... te interesaba. — Hice una mueca.

Probablemente mis sentimientos por ella eran mas fuerte, por que hace bastante tiempo la venía observándola. Pero yo no sabía cuanto tiempo ella había hechado el ojo en mi. Probablemente ni siquiera lo ha hecho y yo me veo bastante estúpido haciendole este tipo de preguntas tan personales.

— Lo siento... no debi preguntar eso, digo, es tu vida...

— Yo no tengo novio. — Me interrumpió con el ceño fruncido. ¿Qué, qué? — El es uno de mis sobrinos.

— ¿Tu... sobrino? — Ella asintió. — ¿Cuántos años tiene?

— Diecisiete. Está algo grande para tener niñera, pero digamos que su comportamiento no es el mejor y...

Tienes que estarme jodiendo.

¿Por qué no mencionó que uno de los sobrinos que cuidaba, ya era adolescente?

McDonald's Love- BTS/Jimin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora