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Capítulo 4

Como era de esperar Danny no vino a la comida y tampoco se quedó a dormir, por lo que me tocó dormir sola en mi casa, cosa que no me gustaba nada. Decidí no pensar en el subnormal de Danny y preparar la maleta antes de acostarme, siempre tenía que dejar las cosas para el último momento.

Cuando llevaba diez minutos preparando la maleta, Nadine y Patrick decidieron comenzar una conversación de grupo, así hablaríamos de todo para mañana.

-Yo saldré a las 7:30 de mi casa, Olivia, así que te recogeré una hora más tarde. ¿Tienes comida en tu casa? – Me preguntó Nadine.

-Pues claro que tengo, ¿por qué no iba a tener?, además ¿para qué quieres comida?

-Porque podríamos desayunar en tu casa, ¿no?

-No, mejor te llevo a mi sitio favorito para desayunar, no es gran cosa pero me gusta.

-Vale, me parece bien. Y tú Patrick, ¿a qué hora llegas y a qué aeropuerto?

-Mi vuelo llega a las 14:15 a Heathrow, ¿me vais a recoger?

-¡Claro que sí! A Nadine no le importa, y así nos veremos antes – dije emocionada de que en menos de 24 horas estaríamos los tres juntos.

-No me parece justo, vosotras os veréis antes y seguro que os pasaréis todo el camino criticándome.

-Deja de hacerte la víctima Patrick o te vas a ir andando hasta el hotel. – Nadine le dijo en forma de amenaza. – Además, no eres tan importante.

-Eso ha dolido, creía que era el hombre de vuestras vidas.

-Bueno, yo me marcho a terminar la maleta, que aún me queda un rato y mañana hay que madrugar. HASTA MAÑANA y esta vez es literal.

-Buenas noches Olivia, te iba a decir que soñases conmigo, pero sé que no hace falta porque ya lo harás. – Patrick y sus tonterías.

-Buenas noches, orh. Espero que no te quedes dormida y estés puntual a la hora a la que te he dicho.

-Yo sí que espero que no te quedes dormida tú. Buenas noches a los dos. – Dije y me desconecté, aún me quedaba un rato preparando la maleta y además estaba enfadada, por lo que no tenía ganas de hablar con nadie. Esta vez Danny se estaba pasando y mucho, pero tenía claro que no me tocaba a mí dar el primer paso, así que intentaría dejarlo de lado y pasarlo lo mejor posible con Patrick y Nadine en Londres.

Una vez terminé de prepararlo todo me dispuse a acostarme, pero no paraba de darle vueltas al tema de Danny, ¿por qué no podía ver lo que yo veía? Odiaba estar enfadada con él, pero más aún cuando la culpable de todo era Michelle. Seguramente ahora ella estaría con él y yo sola en mi casa. Varias horas después de intentar dormir me di por vencida y decidí mirar el móvil, ya que parecía imposible dormir. Me di cuenta que tenía varios mensajes de WhatsApp, entre ellos había uno de Danny:

"Buenas noches esposa, ahora mismo deberíamos estar juntos y no así. Tú en tu casa y yo aquí con "mis amigos" bebiendo y ahogando las penas porque mi novia está enfadada conmigo y esta vez puede que incluso lleve razón. Pásalo bien en Londres y perdóname por ser así de idiota. Te quiero."

"Esposa"... Si no fuese por las fotos que aún conservo, no me creería que nuestros hermanos se atreviesen a "casarnos" cuando teníamos tres o cuatro años. Pero no tenía ganas de contestarle, siempre hacía lo mismo: nos enfadábamos, él se iba con sus amigos, bebía y entonces tenía el suficiente valor para mandarme un mensaje, pero no era capaz de hacer una sola llamada. Dejé el móvil sin leer los otros mensajes y volví a dar vueltas en la cama hasta que conseguí dormirme.

Dos horas después el móvil empezó a sonar, ya era hora de levantarme y prepararme para el viaje que tanto tiempo había estado esperando y el que tan poco me apetecía en este momento. Pero no podía pensar así, tenía que dejar de lado lo mal que me sentía por el imbécil de Danny y pensar en que era el viaje que tanto tiempo había esperado. Sin más me levanté de la cama y comencé a prepararme y recoger todo. Estaba nerviosa, nunca había visto a Nadine en persona y estaba a unos minutos de tenerla en frente, todo era muy raro.