》He did a mistake.《 ⓀⒶⓇⓂⒶⒼⒾⓈⒶ

➣戦い(Pelea).

❃   Lentamente corrió un mechón de su cabello, con total suavidad, causándole cosquillas. Nagisa rió con ternura, y se dejó acariciar por las anheladas manos de su pareja. Por su parte, Gakushū trataba de disculparse por estar tan ausente en la peor situación en la que el ojizarco se encontraba; más allá de ello, aún no entendía su interés en aquel pelirrojo, del cuál hablaba constantemente.

Nagisa sonrió, y se acurrucó contra su pecho, en busca de calidez. Sus labios se habían entreabierto perfectamente para dejar salir aquellas palabras que tanto parecían fascinarle a su pequeño, esa frase que últimamente se había olvidado de repetir. Sin embargo, el timbre de su celular comenzó a sonar, dejando a Gakushū con las palabras en la boca, y un cierto fastidio al oír la palabra «Akabane» tan dulcemente por parte del menor.

—¿Estás bien? Suenas algo... Raro. —comentó con cierta preocupación; se separó rápidamente de Asano, y éste puso sus ojos en blanco ante sus acciones.

—Akari, ya te dije que estoy perfectamente bien. —concretó a través del teléfono, dejando paralizado al receptor de sus palabras. —Sólo... Quiero que vengas a casa, sabes que no me gusta que andes a estas horas de la noche por las calles. Además, quiero estar con el amor de mi vida un poco más. —y Nagisa por poco no comprende a la perfección lo que quería decir; se notaba a leguas que Karma estaba borracho, debido a las palabras entrecortadas y la forma dubitativa en la que hablaba.

—A-ah... En ese caso, estoy dirigiéndome hacia tu casa. Te veo allá. —cortó apresuradamente, para luego soltar un suspiro, y dejarse caer sobre las sábanas.

—¿Se puede saber hacia dónde te diriges a estas horas de la noche? —preguntó Gakushū, con su ceño fruncido, y de espaldas a donde se encontraba Nagisa. —. Está lloviendo afuera, no tienes que ir a ninguna parte. Entiendes que él no es tu responsabilidad, ¿no?

   Nagisa miró firmemente la fornida espalda de Gakushū, eligiendo minuisiosamente letra por letra; el enojo de su pareja se hacía notar, y la tensión los envolvió una vez más.

—Él no estaría así de no ser por mí. Creo que... es lo mínimo que puedo hacer por él. —sinceró.

   Gakushū no tardó en girarse para mirarlo fijamente, aún con su ceño fruncido y una seria mueca de fastidio; Nagisa se tensó, y le miró con cierta tristeza.

—No entiendo porqué te castigas tanto. ¡Él prometió no levantar cargos contra ti, es mejor que lo dejes en paz de una vez! —comenzó a elevar la voz, causando una opresión en el pecho de Nagisa. —. ¡Deja de estar tanto con él, tan al pendiente de lo que le sucede!, Más que cuidarlo, pareciera que quieres reemplazar a su mujer.

   Aquello que había dicho sin pensar, había causado un gran vacío en el corazón del ojizarco. Con el temblor de sus manos, se levantó de la cama, vistiéndose apropiadamente, y dirigiéndose hasta la puerta, siempre con la mirada de Gakushū siguiéndolo constantemente. Sin embargo, antes de salir por la habitación que ambos compartían, decidió aclarar:

—Pienso remendar el daño que he hecho, aún si tú no estás de acuerdo. Es algo ineluctable, y lo mínimo que puedo hacer por él. ❃

🍏🍏🍏

🌈¡Pequeña intervención Asagisa!🌈
No, Gakushū no aparecerá tanto, así que no se preocupen.