Angie

Jamie

(Narrado por él)

¡No voy a llegar! Mi vuelo sale a las 10 y ya son 9:10...

Lo que siempre se dice es que si vas a viajar al extranjero debes estar 3 horas antes, ¡¡3 HORAS!!, no 50 minutos.

Voy corriendo a todo lo que dan mis piernas y aún así siento que voy lo más lento que puedo; aún con todo eso consigo visualizar el cartel del famoso "Check-In", se supone que este proceso no te lleva mucho pero todo tiene que ver con cuanta gente este formada, que suerte la que traigo hoy, solo hay 5 personas por delante de mí. Pero aún así siento que cada persona se tarda una eternidad... Por fin, mi turno.

- Su pasaporte, por favor.

- Aquí tiene.

- ¿De qué lado prefiere su asiento pasillo o ventanilla?

- Pasillo, por favor.

- ¿Me permite sus maletas?

- Claro.

- Muy bien, eso es todo, aquí tiene su tarjeta de embarque, que tenga un buen viaje

Ahora solo me falta pasar a migraciones y ahí hacer mis tramites para salir del país (al fin).

Lo que menos me gusta ha llegado, la revisión de equipaje, ¿qué tienen que andar esculcando y viendo lo que traigo? Cuánta indiscreción, pero bueno, sólo paso por el escáner y ahora si podre relajarme un rato.

¿Cuál relajación? Si ya son 9:49 en menos de 11 minutos sale mi vuelo, tengo que encontrar la puerta, empiezo a buscarla rápidamente cuando alcanzo a escuchar al altoparlante anunciando mi vuelo.
En eso encuentro mi puerta y veo que ya están empezando a subir a la gente. Por lo que me veo en la necesidad de acelerar mi paso, hasta llegar a abordar. Busco mi asiento en primera clase  y de inmediato me siento ya que no he parado de corre todo este tiempo.

Las aeromozas comienzan dar las instrucciones de seguridad, cuando de repente, sin esperarlo, mis ojos se quedan atrapados en una joven 3 asientos por delante de mí, es una joven muy hermosa, con su melena rubia y ojos increíblemente azules, me quedo perdido en ella unos cuantos minutos. Pero mi mente tenía otras cosas más importantes en que pensar, como por ejemplo, que en cuanto llegue a Inglaterra tengo una junta muy importante.
Entonces saco mi laptop y comienzo a hacer mi presentación.
Ha pasado una hora y mis piernas necesitan estirarse un poco, por lo tanto decido ir al baño, apenas he cerrado, cuando empiezan a llamar a la puerta con brusquedad, un poco exaltado digo:

- Está ocupado, ¿podrías esperar?

Y vuelven a llamar con insistencia a la puerta, entonces la abro  con un movimiento rápido y me encuentro frente a frente con aquellos ojos azules inundados por lágrimas que quieren escaparse de sus ojos, me quedo mudo, pero ella se mete al baño sacándome a su paso, cierra la puerta y me deja sin palabra alguna. Aún impactado con aquella escena tomo asiento pensando en ¿Qué le ocurrirá? ¿Por qué esta llorando?, sigo pensando y pensando hasta que me pierdo en un sueño profundo a causa del día cansado que he tenido.
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Hemos aterrizado y no hay ningún rastro de aquella chica, que mala suerte. Voy en camino ha buscar mi maleta, esperen, ahí está mi maleta, la tomo y en el mismo momento en que la tomo me doy cuenta de que en realidad esa no es mi maleta, es muy parecida pero la mía no tiene un candado rosa, empiezo a ver si alguien tomo mi maleta por error, al igual que yo tomé esta. Ahí esta, esa sí es mi maleta, incluso tiene la imagen de Maroon 5 (mi banda favorita), corro hacia donde esta la maleta, agarro la maleta suavemente y la persona que la trae se voltea rápidamente. Oh no, esos ojos azules de nuevo, pero esta vez me ven como si fuera un delincuente...

- Lo siento, pero creo que te has equivocado de maleta, ¿lo ves?- le digo al mismo tiempo en que le enseño su candado rosa.

- Ah, lo siento de verdad, tome- lo dice devolviéndome mi maleta y agarrando la suya.

Tan pronto como hubo agarrado su maleta se fue, sin decir nada más. Y yo me quede ahí parado, sin mover ni un músculo, sólo mirándola hasta que simplemente la perdí de vista.