Capitulo 11.

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Maratón (2-3)

"Querido Justin... Se que te costara mucho asimilar esto, pero quiero que sepas que esto lo hago por tu bien. El día del baile seguramente fue el mejor de mi vida. Pero no puedo seguir con esto, se que si, te digo quien soy, como me llamo u otra información te decepcionaras completamente de mi. No soy quien tu crees, soy solo una chica que no se escuentra atractivo alguno. Te dejo un gran regalo, algo que conservado toda mi vida y que quizás, para ti no sea la gran cosa: mis amados zapatos deportivos. Son de la suerte y espero que cada vez que los veas, te acuerdes que tienes una cenicienta que te quiere con locura y que, algún día sabrás quien es en realidad... Recuerda que todo esto es por tu bien, no hagas preguntas. _______ solo trato de ayudarte y hacer que nos juntaramos, pero es imposible. Lo siento.

Con amor, tu cenicienta".

Entonces mientras leía aquella carta por enésima vez las lágrimas no dejaban de fluir. Había huido de clases para leer aquella carta que ______ le había entregado con una sonrisa triste. Aquella carta que esperaba que fuera una respuesta que le alegrara el día. Pero no. Ella había cortado con él, decía que lo hacia por su bien ¿se daba cuenta que con aquella carta lo destruía? ¿Sabría que a él no le importaba en absoluto quien fuera o como fuera? ¿lo habría hecho por rumores? En ese momento solo sabia que se sentía destrozado, pero sabia que, la quería y no se daría por vencido.

Hilary entro y lo vio y se partió el alma, estaba así por culpa de su mejor amiga. Que era una terca, una gran terca que no conocía a su amigo. Justin miro a Hilary y embozo una sonrisa triste, arrugo la carta y se seco las lágrimas. Ella le sonrió y se acerco, se sentó frente a él y lo abrazo.

-¿Estas así por ella? -pregunto. Aunque estaba segura que era por eso.

-Si, pero para que entiendas todo, tendrías que leer la carta que pensé que me llenaría de felicidad. -le tendió la carta y ella la tomo sorprendida por su frialdad-. Cuando la hayas leído; quemala, botala, rompela. Lo que hagas con esa maldita carta me da exactamente lo mismo.

Hilary quedo helada ante sus palabras. Algo en él se había quebrado y su amiga era la culpable de todo. Leyó la carta y entendió todo. _____ la escucharía, estaba obrando muy mal. Mientras ______ se sentaba en el patio a escribir cualquier estupidez en su precioso cuaderno, su mejor amiga se acerco hecha una furia.

-¿Que pretendes? -Le grito furiosa y totalmente decepcionada.

-Hilary... -Murmuro, no sabia que decir y tampoco podía.

-¡Estas destruyendo a mi mejor amigo! -grito con los ojos humedecidos-. ¿Que crees que haces escribiéndole esas cosas? ¡Sabes que no es por su bien, es por el tuyo!

-No entiendes Hilary...

Pero su amiga la interrumpió.

-¡Por supuesto que entiendo! ¿Crees que no? Has destruido a Justin, _______. -le tiro la carta y ella la miro mientras caía en la grama verde-. No se que pretendes con ese juego de las cartas, de verdad. Pero una cosa si te digo, o le cuentas a Justin la verdad lo antes posible o se lo diré yo. -sentenció con furia.

-Pero...

-¡callate ______! -le grito-. Ya te lo advertí.

Y se fue de nuevo, dejándola con la palabra en la boca. Totalmente helada por sus palabras, sorprendida y destruida. Era una completa basura.

Cenicienta.Where stories live. Discover now