¡Y entra Conejo!

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Narra Jamie

Jackie me pidió que la acompañara a la playa esta noche, nos juntaríamos allá. Llegue a la playa y no había nadie en ese lugar, así que me senté a admirar las estrellas, nunca antes lo había hecho...siempre estaba ocupado en el campamento... o Pan me regañaba si tan solo me alejaba del campamento. Pasaron unos minutos y escucho unos ruidos provenientes del bosque a mis espaldas, me escondo detrás de una roca, sin saber que o quien podría aparecer del bosque... no esperaba ver eso, era del tamaño de una persona pero tenía orejas de conejo, será un canguro?.

-Siento la presencia de un niño por acá cerca- al escuchar eso me estremecí por completo; ese canguro habla!!!- Hey chico! Qué haces por en este lugar a esta hora de la noche- escucho decir a mis espaldas. Me doy vuelta lentamente hasta quedar frente al Canguro.

-Y...Yo... no me haga daño- digo cubriéndome la cara con mis brazos.

-No te haré daño, soy un guardián ... no podría dañarte- dice poniéndose a mi altura- Eres un niño perdido?

-Si lo soy... cómo sabes de nosotros?-  pregunto curioso; pensé que estábamos en el olvido.

-Una amiga me contó de ustedes...- dice nostálgico- Tal vez puedas a ayudarme. Hace días no sé nada de ella...- me dice.

-Solamente hay una mujer en esta isla, y es Jackie...- digo recordando que había quedado en juntarme con ella, pero no ha llegado... tal vez se olvidó y se quedo  dormida.

-La conoces?- me dice sorprendido.

-Sí, es como una madre para mi...- digo recordando el abrazo que me dio hace unos momentos.

-Quién lo pensaría...Jackie haciendo el rol de madre. Tienes suerte Jamie, ella nunca ha demostrado ser una imagen materna- me dice sentándose a mi lado.

-C...cómo sabes mi nombre?- digo sorprendido. En ningún minuto le dije mi nombre.

-Soy el Conejo de Pascua. Paso siempre con Norte o mejor conocido como Santa Claus- me ha dejado sorprendido. Estoy en frente del Conejo de Pascua!!!- Pero puedes decirme Conejo.

-Conejo...- digo pensativo. Ahora que lo pienso nunca hemos tenido Pascua ni navidad en la isla- Por qué nunca han venido a la isla? No saben que existimos?- digo un poco herido.

-O nonono, no digas eso pequeño. Nosotros nos acordamos de todos los niños, incluso de los malos. Simplemente que no podemos ingresar a esta isla por mucho tiempo, podemos correr peligro y nuestra magia puede desaparecer...- hace una pausa- No sé porque te estoy diciendo esto- Se para dejándome a una altura menor a la que ya tengo- Me haces un favor?- dice ofreciéndome su mano o pata para levantarme.

-C... Claro!- le digo vacilante.

-Necesito que me mantengas informado de Jackie y todo lo que la rodee-

-Y cómo hago eso?-

- Te entregaré esto- dice sacando algo de una cosa tipo cinturón que colgaba desde su hombro cruzando su pecho.

-Pero, esto es un huevo- le digo sin entender nada.

-Es un huevo mágico, todas las noches te llamare y apareceré en un lado del huevo. Yo también te podré ver. Solo te pido que tengas cuidado. Cualquier cosa rompe el huevo y yo sabré que algo anda mal- Me dice entregándome el huevo.

-Está bien, no te preocupes- digo seguro.

-Cuídate Jamie y cuida a Jackie- dice eso y desaparece por un hoyo que creo al dar unos golpecitos con su pata en el suelo arenoso.

-Adiós...- digo a la nada.

Ahora si tengo un propósito para seguir luchando en esta isla, ya me estaba dando por vencido al ser el más debilucho de los niños perdidos. Gracias Conejo por ayudarme. Digo mirando las estrellas para ir a mi tienda y dormir; Jackie ya no vendrá, se tiene que haber olvidado de lo que me pidió.

Narra Conejo

No esperaba encontrarme con ese chico en la playa, por lo menos algo es algo, he visitado esa playa todas las noches desde la semana pasada y recién hoy pude saber algo de Jackie. Estoy entrando a la oficina de Norte, los duendes me dijeron que me buscaba.

-Pasa algo Norte?-

-Supiste algo de Jackie?- dice preocupado. Él es el que más ha sufrido desde que Jackie decidió partir a Neverland para protegernos.

-Hable con un niño perdido, es como el protegido de Jackie...él la ve como una madre...- digo esperando la respuesta de Norte.

-Cómo una madre? Si ella es tan inmadura como una niña de 10 años!!!- dice sin creer palabra alguna.

-Lo mismo pensé yo, pero parece que ha madurado en esa isla-

-Galletas?- dice caminando hacía mi con un plato de galletas recién horneadas.

-Sabes que no me resisto si están en ese estado- y saco una gran cantidad, metiendo una en mi boca.

-Así que Jackie está bien...- dice mirando la luna por el gran ventanal que tiene en su oficina.

-Eso parece, en todo caso estaremos informados cualquier cosa. Tendremos que estar preparados por cualquier problema que pueda tener- digo acercándome a Norte- Nos tendremos que sacrificar por ella, como ella lo hizo por nosotros... no crees Norte?- le digo apoyando mi pata/mano en su hombro

-Aunque sea lo último que hagamos, eso tenlo por seguro Conejo- me dice Norte con una lágrima cayendo por su mejilla.

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Nos calmamos por el capítulo anterior cierto? aún pienso como pude escribir eso. La magia de la noche.

Espero actualizar más seguido debido a que la novela ya tendra 1K!!!!

Llegando a los 3k haré una maratón de 3 capítulos.

Por cada K que obtengamos haré una maratón de 3 capítulos

Cuidado te puedes congelarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora