Princesa De La Mafia

Capitulo 21

Algunas veces, cuando amamos algo con todo nuestro ser, cuando cada célula de nuestro cuerpo trabaja en pro de ese sentimiento. Cuando sabemos que nos pertenece para siempre y comentemos un error, intentamos dejarla ir, avandonar ese sentimiento a como dé lugar, pero nunca es tan fácil, por qué en los asuntos del corazón no manda nadie. Pero siempre terminan volviendo a nosotros, y vuelve con dos únicas opciones, o regresan para convertirse en parte de ti o para destruir.

Sebástian Black y Skarleth Cavalcanti pueden dar fe de ello; se han dañado tanto en su intento de dejarse ir, que aún me pregunto cómo han sobrevivido. Tanto orgullo y ego, poco a poco, han carcomido sus corazones, pero ¿por qué? Creo que todos nos lo hemos preguntado, y la respuesta es tan básica que os asombrará Miedo
Tienen miedo él uno del otro, miedo de lo que se han convertido. Hace muchos años, Giconda juro no amar a nadie y entregarse a la mafia por completo y Sebástian ha roto ese juramento sin escrúpulo alguno. Está tan asustada de eso creciendo en su corazón que al primer error de sebástian, huyó. Tomando fé de palabras de borracho.
Sebástian por su lado también está asustado, pero no al mismo grado que su amada. Su temor se basa en su antigua experiencia. De alguna forma, una pequeña fracción de su ser sabía que ser abandonado era una posibilidad porque ya le ha ocurrido; cuando ama y se entrega, es abandonado, pero esta vez él estuvo dispuesto a recuperar lo que nunca debió dejar. Además, esa mujer tiene la mafia dentro de sí, un mundo al que él juro jamás meterse de cabeza, pero allí estuvo él, a punto de convertirse en uno de los máximos cabecillas del imperio. La oferta resulta tentadora. Dinero, poder, soberanía y Skarleth. Pero, aunque ese paquete resulte tentador, la mafia le quito más de lo que todo el dinero del mundo puede devolverle. paz, tranquilidad, felicidad y años de adolescencia.

Luego del fatídico encuentro de esa noche, las cosas cambiaron, tenían que cambiar

Skarleth se fue de la fiesta en la madrugada, totalmente ebria y miserable, hecha un mar de llanto e incompleta.
Sebástian y Ashley no regresaron a la celebración. Y para el amanecer, ellos estaban en un vuelo privado a Los Ángeles.

Sin Sebástian allí, Skarleth se quedo por toda una semana. Aferrándose a su hija, el más vivo recuerdo del hombre que un día la rescató de las calles. Y se fue de allí con la promesa de regresar para noche buena.
Nícolas y Leila, no tuvieron una luna de miel, problemas en la mafia, lo usual. Y con Nícolas, recién entrado en ese basto mundo, la situación se tensó aún más. Nicolás y Skarleth son un equipo, y en las reuniones, él puede captar en ella un vacío enorme. Esta mas delgada, con pronunciadas ojeras, los ojos más apagados de Londres y una tableta de antidepresivos en el bolso; una verdadera lástima. Pero Nícolas puede hacer nada, es más, nadie puede. Cada uno se mata a su manera, y aunque nadie se ha muerto de amor, ella cree que podría ser la primera.

Es tan frustrante ver cómo un amor tan vivo como el de ese par, muera lentamente. Pero así es la vida, no siempre obtenemos los finales felices,pero aprendemos, para bien o para mal.

Skay aprendió a amar y Sebástian a tener los pies sobre la tierra.

Tal vez demos por acabada su "historia de amor" pero, ¿no es la esperanza lo único más grande que el miedo?
Y si, ellos aún tiene esperanza, y nosotros también, todos los queremos juntos de nuevo, ¿o me equívoco?
Hay una pequeña chispa de esperanza para nuestra pareja de mafiosos perfecta, una esperanza amante de Dora la exploradora y que usa dos coletas. Una llamada Avalanna

Y es que cuando Skarleth recibió una copia de la carta de Navidad de su pequeña, no pudo parar de llorar en todo el día.

Querido Santa, soy Abby y solo quiero dos cosas, me harían muy feliz y he sido casi una niña buena. Mira, por favor (para que veas que soy educada) quiero que mis papis estén juntos otra vez. No me gustaba escuchar a papi llorar por mami y mami nunca duerme porque lo extraña, en serio, es lo que más quiero en todo el mundo, que me abracen los dos y me cuenten un cuento antes en la cama y dormirnos los tres juntos. A veces me pongo muy triste porque mami tuvo que regresar al trabajo y papi está con mi tía Ashley (ella es genial) en otro país y los extraño a todos.
Los abuelos son geniales jugando, pero se cansan mucho e Isabela no siempre viene a jugar, así que te pido que traigas a mis papis juntos. Los quiero debajo del árbol cuando me despierte. Bueno no me molestaría si junto a ellos hay un monopatín de Dora la exploradora.
Te ama, Abby.