CAPITULO 10

12.9K 905 30
                                    


Cuarenta y cinco minutos desde la desaparición de Avalanna, Sebástian han desplegado todo un equipo de búsqueda por todo Londres. Él no tuvo más opción que contarle a sus papas la verdad, casi por completo. La expresión de Liliana, en cuanto se entero que Avalanna es su nieta, fue... solo con verla, yo me eche a llorar.

– Nada, ya revisamos la ciudad completa. Tengo a nuestros hombres por todos lados, pero no están – la voz de rick suena distorcionada en el altavoz, pero eso no significa que sus palabras no hicieron eco en la habitación, Liliana se echo a llorar una vez mas, su marido empieza a caminar a rededor de su escritorio con nerviosimo y furia, mientras Sebástian, el solo esta ahí sentado con la mirada perdida y el ceño fruncido

– Llama a Enzo, papá – el sr. Black se detiene súbitamente, su mirada va directamente a Sebástian. Luce impresionado, ahora. Pero no cuestiona las palabras de su hijo. Toma el teléfono inalámbrico y marca de rapidez. Dos segundos mas tarde, Sebástian se lleva el teléfono a su oído. – Soy Sebástian Black, tu sueño será cumplido Enzo, estoy dentro de tu mafia. – el silencio invade la habitación, reviso de nuevo la expresión de Liliana, su llanto seso, pero sus mejillas lucen sonrosadas y sus ojos vidriosos, su marido la abraza por detrás, – Estaré allí en menos de quince minutos Sebástian vuelve a hablar para cerrar la llamada. Se levanta del sofá y camina con determinación hacia el librero, saca un grueso libro rojo, lo pone sobre el escritorio, al levantar la pasta, descubre nada mas ni nada menos que un arma, negra y brillante. Se ajusta la camisa y mete el arma en la faja de su pantalón -la cacha sobresaliendo delante de su camisa blanca- dio un asentimineto a su padre y un beso a su madre.

¡No lo dejes ir solo! ¡Destruirá medio Londres!

– Iré contigo, quieras o no, recuerda quien soy podría ser de gran ayuda – Liliana rápidamente llego a mi lado sosteniendo un arma, me la entrego y no dude en tomarla con fuerza e imitar a Sebástian -la metí en la faja de mi short-

– Dejala ir, ella puede controlarte como nadie, si necesitas a alguien contigo ahora, esa es ella – en otras circunstancias, habría sonreído y agradecido, pero, ahora no. Solo entrelazó mis dedos con los de Sebástian y lo incito a caminar.

Menos de diez minutos después, aquí estamos, camino a ver al mafioso, Enzo Bourque. Jefe del clan.

Él quita su anillo y empiza a jugar con el, es de oro. Simple y rustico. Se lo quito y lo analizo, tiene una placa, en la cual, un caballero de armadura sostiene una rosa. A los lados tiene dos palabras: amor y fuerza. ¿amor y fuerza?

¡amor y fuerza! Idiota tu tenias una de esas el dia que nos rescato el niño rico. Pero era un colgante

¡cierto!

Amor, ¿Qué significa esto? ¿Por qué lo llevas ahora, si nunca antes lo hiciste? – logre, por tres segundos, ver la sombra de una sonrisa aparecer en su rostro, me mira.

– Es el ¨logo¨ de enzo, todos los que pertenecemos a su clan tenemos uno, por eso lo llevo, deben reconocer que soy de los suyos.

¡Eso significa que tú tienes algo que ver con la mafia! ¡DILE! ¡ABRE TU ESTUPIDA BOCA Y CUENTALE!

– El dia que me encontraste – siento como si no pudiera respirar, ¿Por qué tengo tanto miedo? – ese dia, yo tenia un colgante, ese colgante es igual a tu anillo.

– Bueno, amor, yo no se mucho sobre quiénes son los socios de la mafia, pero sin duda, tu eres parte de eso

¡AY NO! ¡QUE ASCO! ¡YA EMPEZARON CON LA MAMADA DE LOS APODOS! JURO QUE TE DEJARE SIN LENGUA SI SIGUES LLAMANDOLO AMOR

Princesa De La MafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora