La habitación estaba completamente sucia y ensangrentada. Habían sacos de tela ensangrentados, intente ver en un pero no pude ser lo suficientemente valiente para mirar adentro.
Intente abrir la puerta que continuaba pero estaba cerrada. ¿Una llave? ¿María la tenía, tal vez?
Volví por donde había venido y entonces alguien susurro algo. Había una cabeza debajo de una de las camillas.
Una cabeza que intentaba decirme algo.
-¿Dónde-esta- c-cuerpo?
¿Eh? Quiera encontrar su cuerpo... Supongo que podía revisar a quien cuerpo de faltaba la cabeza.
Me acerque a una de las camillas.
Solo debía levantar la manta y observar. Ya había visto muchos cuerpos hoy. Porque no podía levantar un simple sabana. Me arme de valor y...
No podía. ¿Destapar un cuerpo? No. Esto era demasiado para mí.
Me rendí. Buscaría la llave. No tenía otra opción.
Cuando estaba por alejarme del cuerpo... algo tiro de mi vestido.
¿Su mano?
¡Su mano!
Tire rápidamente de mi vestido y me aleje, y el cuerpo se destapo, cayendo un cadáver decapitado al piso.
Y comenzó a seguirme.
Me acerque a la cabeza y entonces, sus manos tomaron su cabeza del suelo y entonces se la coloco.
Su cuello hizo un extraño ruido, se había colocado la cabeza algo torcida y al encajarla me miro.
Pensé que iba a matarme.
Pero solo me miró unos segundos, y extendió su mano, antes de hablar.
-G-Gracias Señorita. – Sonrió, tomo mi mano y coloco una llave.
-¡¿Eh?! De D-De N-Nada. – Y entonces desapareció.
La puerta se abrió.
Era un pasillo lleno de pasadizos. Entre a la primera puerta, y estaba muy oscuro, pero pude visualizar una escalera muy pequeña, como si le faltara una parte.
El latico, allí arriba estaba lleno de jarrones, quizá podía encontrar algo.
Tome la escalera y arrastre por el pasillo, seguí por otra de las puerta y continúe caminando. Enconches salí por una de las puertas de la sala común del la casa. Era ese pasaje secreto por el que no podía entrar pero si podía desde adentro. Abrí la puerta y la trabe con una caja que encontré ahí. Esta forma iba a llegar al latico más rápido.
Cuando llegue a latico la coloque como pude. Era algo inestable pero podía servirme por el momento.
Los jarrones eran muy pesados, apenas podía mover uno, pero no llegaba hasta arriba para ver que había dentro así que lo empujé para abajo. Al caer hizo un ruido bastante escandaloso pero entonces pude ver que tenía algo adentro. Bajé rápidamente y encontré lo que buscaba.
La mini-motosierra de papá. Me podía servir bastante para poder romper algunas cosas.
Ah, ¡Qué nostálgico!
Recuerdo a papá regañándome por jugar con esto una vez...
Estaba en el jardín intentando encenderla, en aquel momento no sabía cómo funcionaba. Pero entonces papá salió de la casa y me miro muy enojado.
-¡¿Aya, que haces jugando con esa cosa?!
-Lo l-lo s-siento.
-¡Esto no es un juguete! Es una herramienta muy peligrosa, Aya ¡¿entendido?! ¡Nunca juegues con nada como esto otra vez!
-Lo siento papá. – No sabía que hacer más que disculparme nunca había visto a papá tan enfadado conmigo. Entonces se agacho y me miro.
-Me alegra que no esté herida, aunque ¡Es extraño! Creí que esto estaba en un lugar donde no podías alcanzarlo ¡¿Dónde diablos la encontraste?!
-Lo s-siento. Lo siento, papá.
-Uff. - Papá parecía aliviado en ese entonces.
Espero que papá este bien. Que este aliviado, ¡porque iré a salvarlo!
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¡¿Entre las mil mejores y doscientos votos?! ¿Cómo voy a agradecerles tanto apoyo?
Los quiero y de verdad muchas gracias por leer ¡Esperen las próximas actualizaciones pronto!
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Mad Father
Horror¿Qué pasaría si un día tu padre desaparece? ¿Qué harías si de un día para otro tu casa es acechada por una maldición? Una maldición para tu padre, que la tiene bien merecida: Un hombre que experimenta con animales y humanos. Los somete a una serie d...