Era en estos días donde maldecía haber nacido doncel, ¿Por qué no pudo haber nacido como un varón normal y no siendo un fenómeno? ¿Por qué?.
Sasuke se encontraba hecho bolita abrazándose así mismo, intenta encontrar calor y poder dejar de temblar por el frío que tenía. Su cuerpo se sentía muy frío, su estómago dolía infiernos, y su marca no dejaba de dar comezón.
Sasuke estaba rogando a todos los dioses que su aroma se mantuviera controlado y no llamará la atención, estaban muy desesperado y sabia que en cualquier momento iba a romper en llanto por la frustración que invadía cada célula de su cuerpo.
El miedo inundó sus pensamientos sin dejar que el pobre doncel pudiera conceder el sueño en toda la noche.
En la mañana despertó con unos grandes bolsas en sus ojos negros que se miraban vacíos, intentó ignorar él asqueroso aspecto que tenía está mañana y volteo el espejo para no poder ver su propio reflejo. Se había despertado más temprano que todos, con la intención de entrar primero al baño, y así fue, caminó silenciosamente por el pasillo, haciendo pequeños quejidos cuando la madera vieja rechinaba, cuando por fin pudo entrar al baño, al ser un lugar tan pequeño en pocos segundos, la habitación esta repleta de todo su olor, que para el gusto de Sasuke, era repulsivo, cubrió su nariz con su camiseta, y fue quitándose la ropa apresurado por temor a que Naruto y Minato despertaran, más de Naruto sinceramente. Encendió la bañera y espero a que el agua caliente saliera, mientras esperaba fue a la puerta para pegar su oído con intenciones de escuchar si Minato ya se había despertado, en el trayecto, tuvo que pasar por el espejo y odiaba tanto que fuera completo y pudiera observar todo su cuerpo desnudo.
El no quería verse, no quería observar nada de él y por eso cubría o volteaba el espejo de su habitación.
"Tienes que intentar aprender a observar tu reflejo"
Escuchó la voz de Tsunade en su cabeza y la anterior cita que había tenido con ella. La terapia era simple, o eso aparentaba, Sasuke tenía que dejar de cubrir los espejos o evitar verse enfrente de estos; realmente se escuchaba muy simple, pero no para una persona que se tenía mucho asco y odio.
Es complicado y la psiquiatría sabía bien que no sería fácil tratar con alguien como Sasuke que no avanzaba mucho en las terapias, le dijo que no lo iba a forzar pero no había decisión en Sasuke en hablar sobre sus miedos o tan siquiera sé le veía ganas de cambiar su mal estilo de vida.
Pero la verdad es que el Uchiha si quería cambiar, y se esforzaba más de lo que creía la gente, pero su miedo era mucho más grande que sus ganas de modificar quién era y las cosas que él sabía perfectamente bien que no eran correctas.
"Yo sé que puedes"
Odiaba el poder que tenía Minato en el, lo que unas simples palabras o acciones podían llegar a causar en el ojinegro, Sasuke se sentía vulnerable ante Minato, por qué había sido testigo de muchas reacciones suyas. Lo conocía, a pesar del poco tiempo que había pasado, y Sasuke no necesitaba que un varón supiera lo débil que podía llegar a ser.
No quería recibir las palabras de aliento de Minato, no quería que Naruto lo abrazará después de llegar de sus terapias, que sonriera de esa forma tan pura e intensa que tenía el niño, era demasiado para un chico que hasta hace meses no sabía lo que era una "bienvenida", "un desayuno en familia", "un beso en la frente", ni muchos menos había experimentado esas palmadas gentiles en su espalda que le daba Minato cuando algo se veía mal o Sasuke estaba a punto de romperse.
Sabía que ese hombre mayor tenía idea de lo jodido que estaba el azabache pero seguía dándole un techo en su casa, le seguía mostrando su aprecio, y seguía sintiéndose a gusto en este lugar, que podía llegar a llamarla "hogar" con el tiempo.
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¡Papá-teme es mío~ttebayo! |NaruSasu/ EDITANDO|
Fanfikce"-Cuando sea grande me casare contigo, Papá-teme.-" © Después de la muerte de su hermano mayor, la separación de sus padres y el desprecio de su padre obligaron a Sasuke, un joven de 18 años a intentar terminar con su corta vida, pero fue salvado po...