Una Sirvienta Real

Capitulo 6

Un día más ... Y mi vida seguia siendo una basura, asi me sentía. Mamá me miraba y sabia que algo ocurría pero no preguntaba nada y asi lo prefería, yo limpiaba la ropa de Lianna tratando de dejar mi mente en blanco.

- Creo que ya no podrás sacar esa mancha hija, déjala ya de resfregar - dijo mamá haciéndome volver a la realidad.

Me levante y fuí a tender la ropa de Lianna miraba sus hermosos vestidos, vestidos que jamás podré tener.

- Señorita Lisa la llama la princesa.- Dijo Marta al entrar.

-Ya voy.- Dije sin ganas de ir.

Al llegar al cuarto de Lianna, la vi en su tocador peinando su cabello rubio.

- Necesito que me ayudes a colocar mi vestido, cual crees que se verá mejor el rosa o celeste?.- Pregunto ella apuntando los vestidos sobre la cama.

Pensé en elegir el mas horrible para ella, pero era imposible ambos eran igual de hermosos y cualquiera de ellos le quedaría bien.

- El rosa, me gusta más - Dije escogiendo uno.

- Bien, entonces despues de ayudarme te pondrás el celeste, iras conmigo a la fiesta en el teatro.- Dijo ella levantándose a tomar el vestido rosa.

- yo? Por que ?.- Pregunte extrañada.

Jamás habia salido del castillo y menos para una fiesta. Eso era imposible para los sirvientes, nuestro deber es solo hacer labores en el castillo.

- Si niña, necesito que alejes de mi a mi prima Bella, es una niña tan imposible, la detesto, se pega a mi como si fuera un parásito y necesito estar a solas con mi Félix.

- Va ir Félix? - Dije mientras la emoción y la felicidad se esfumaban de un segundo a otro.

- Pues claro niña torpe, por que no iría?? Es el príncipe debe ir al igual que yo, ahora ven y ayúdame o llegaremos tarde.

Luego de peinar y vestir a la mugrosa, era mi turno de arreglarme estaba lista y por primera vez me sentía como una princesa con un vestido hermoso y un peinado que me hacian sentir que estaba en un cuento de hadas.

Fui a la habitación de Lianna a decirle que estaba lista para irnos. Al entrar ella voltio a mirarme.

- No, no, no.- Dijo ella caminando hacia uno de sus cajones.

Creí que talvez el vestido no me quedaba bien o mi peinado no le habia gustado, hasta que saco de su cajón un collar muy hermoso de plata, lo coloco en mi cuello y apunto al espejo, al mirarme sentí que Lianna era como mi hada madrina que me volvería princesa, por primera vez sentía que era Lianna era una buena persona.

- ohh!! Falta el perfume - sentí algo húmedo en mi cuello y luego un aroma suave y dulce.- ok, vámonos ya llegaremos tarde, recuerda tu misión aleja a Bella de mi.

Al salir habia una carroza esperándonos Jonh el portero me miro asombrado pero luego de asimilarlo me sonrió.

- Adelante señoritas la carroza las espera. - Dijo el ayudándonos a subir a ella.

Era la primera vez que veía mas allá del castillo, la cuidad, las personas, era algo maravilloso.

Al llegar un hombre recogía los abrigos y los sombreros, en el interior habia mucha gente de la familia real, me sentía completamente en un mundo extraño.

Un hombre con una bandeja llevaba bebidas y comida, en una esquina otro hombre tocado el piano, la melodía volvía el ambiente mas animado y alegre.

- Ella es Bella, la pequeña rubia que se acerca. - Dijo Lianna esquivando la mirada de la niña que venia corriendo hacia a nosotras.

- Lii!!!! Te extrañe tanto !!!.- Dijo la niña lanzándose a abrazar las piernas de Lianna.

Era una pequeña de tan solo 6 años que adoraba a su prima (no se por que es odiosa), Lianna odiaba que la abrazara y que la siguiera a todos lados, por eso Lianna me habia llevado para que jugara con ella y la mantuviera alejada lo mas lejos posible de ella.

- Tu debes ser Bella, la princesa me ha hablado mucho de ti y tengo que decir que ella tenia razón eres una niña muy hermosa. - Dije ganandome su confianza, ella sonrió y soltó a Lianna.

- ¿como es tu nombre? - Me pregunto la niña con unos hermosos ojos azules.

- Lisa - En ese momento mire a Lianna comprobando que ya me habia ganado su confianza pero Lianna ya no estaba, habia desaparecido de un segundo a otro.- ammm... te gustaría ir a bailar conmigo?.- Le pregunte a la niña que aun me miraba con asombro.

- No se bailar.

- Es muy facil ven te enseñaré.- La tome de sus manos y empece a mostrarle como mover los pies, ella muy rápido me siguió, a unos minutos ya el sonido del piano nos habia dominado a las dos, mucha gente tambien bailaba a nuestro alrededor.
Bella despues de unos minutos bailando conmigo la llamo su madre, la cual la llevaba buscando hace unas horas por el teatro.

Cuando Bella se fue quede sola en un rincón, no sabia que hacer, no conocía a nadie, Lianna no estaba y no habia rastros de que estaba Félix.

Me sentía sola, estaba en una esquina intentando ver si conocía a alguien pero era obvio que estaba sola.

- ¿¿Por que esa cara de funeral?? - escucho a mi lado

- Adam!! ¿¿Que haces aca ??.- Dije tan emocionada que ya no estaría como una maldita leprosa .

-Pues la verdad... Solo presencia, detesto estas fiestas.- Dijo comiendo unos panesillos que tenia en la mano.

- Queded baidad? - Dijo con la boca llena de pan.

- Amm claro, vamos pero no me escupas pan en la cara.- Solté una carcajada

El riendo se limpio su boca con una servilleta y luego estiro su mano para que la estrechara.

- Mi Lady , me concede esta pieza?? - comportándose como todo un caballero.

- Mi principe, seria un placer..

La música era lenta así que el tomo mi cintura y lentamente ambos empezamos a bailar, él miraba mis ojos fijamente lo que empezo a ponerme nerviosa, "recuerda solo una sirvienta", vino de pronto a mi mente y volví a calmarme.

Después de bailar algunas horas y reírnos de los trajes y peinados de las personas, apareció Lianna.

- Debemos irnos, ya es muy tarde y Félix se va ¡¡vamos apúrate!!.- Dijo irritandome.

Mire a Adam y el tomo mi mano y la beso.

- Adiós mi lady, fue un placer verla esta noche.- Dijo dándome una sonrisa.

- Igualmente principe, adiós. - Hice una reverencia y me fui con Lianna.

Aun que me esperaba que la noche fuera diferente, me alegro no toparme con Félix en la fiesta, pero seguramente lo vería al día siguiente en el castillo.

Si no hubiera sido por Adam, toda la fiesta hubiera estado sola, ya que mi intento de hada madrina fue una traidora que me abandonó...
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Lamento la espera he estado muy ocupada pero volví ... Gracias por votar y comentar *-*