Capitulo 13

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De camino miraba el paisaje, Lord Matuck no decia nada...o debería decir mi prometido, solo íbamos los dos en silencio, uno frente al otro intentando esquivar nuestras miradas.

- Iremos al palacio Cloux del Norte??.- Dije preguntando e intentando romper el silencio incómodo.

- No, iremos a la casona Matuck, esta cerca del palacio Cloux del norte pero no demasiado.- Dijo el mirando el paisaje al igual que yo.

- ¿¿Cuándo será la boda??

- No lo se, aun no se hacen los preparativos, lo veremos después  en los días con más calma.

- ¿Por que yo? - Le pregunte mirándolo a los ojos.

- Eres joven... - Dijo el evitando mi mirada.

- Tengo 17 años y usted casi 50, no cree que es una diferencia importante??.- Insistí.

- Lo importante lo veremos con el tiempo, se que debe ser extraño para ti, pero ya veras que con el tiempo te acostumbraras.- Dijo el con un tono muy tranquilo, como si no le interesara lo que yo pensara.

- Cuanto falta para llegar??- Dije ya queriendo bajar de la maldita carroza.

- Unas 4 horas más asi que si quieres puedes dormir.

La verdad me daba un miedo tremendo dormir frente a él, asi que me quede todo el camino mirando el paisaje, era algo muy bello ya que no conocía los alrededores, jamás habia salido del castillo asi que era algo hermoso.

Despues de 7 horas en la carroza completamente en silencio llegamos a la casona Matuck, un señor muy alto de cabello negro se acerco a la carroza y abrió la puerta. El fue el primero en bajar el señor alto lo ayudo.

- Robby ayuda a la dama con sus cosas por favor.- Dijo Matuck al hombre, el solo asistió con la cabeza y me extendió la mano para ayudarme a bajar.

- Gracias, Robby.- Dije al hombre, el sonrió y saco la bolsa con mis cosas.

La casona era enorme, de color blanco marfil tenia unos hermosos pilares circulares que formaban un arco en la entrada. Despues de tanto viaje me dolia el trasero (7 horas en carroza me habia dormido las piernas, me costaba hasta caminar), al entrar habían muchos muebles antiguos, a la derecha se encontraba el salón con una hermosa chimenea y a la izquierda el gran comedor con una mesa de madera oscura, unas sillas con un tapiz blanco que le daba un contraste increíble.

- Mily, acompaña y enséñale a la dama su habitación.- Dijo Matuck a una mujer con un vestido y delantal blanco -  ayudala a desempacar.... Ahh y si... Dale algo de comer debe tener hambre. - Por primera vez miro mis ojos y dijo- Pide lo que quieras Mily se encargara de ello o puedes dormir es tu decisión, puedes hacer lo que quieras...

La verdad es que no tenia hambre, mi estómago tenia un nudo, no sabía si de tristeza, rabia o miedo, estaba lejos de todos me sentía totalmente insegura y desprotegida. La mujer me llevo por un pasillo donde habia una escalera no muy alta con una alfombra color marrón oscuro, camino hasta llegar a una puerta, al abrirla habia una cama enorme color blanca y un gran ventanal a su costado que se cubría con unas cortinas rojas.

- Esta sera su habitación momentánea, si no le gusta puede escoger otra, hay 3 más disponibles en la casona. - Dijo la mujer muy servicial.

- ¿El tambien dormirá acá? - Le pregunte a la mujer.

- No señorita, la habitación de el señor Matuck esta al frente. Pidió que le diéramos una especial, para una mejor comodidad de usted. - Dijo con una sonrisa muy cálida.

-  Puedes llamarme Lisa? No estoy acostumbrada... Yo soy..

- Ya no, desde ahora es una mujer, lo siento pero debe empezar acostumbrarse... estara bien creeame.- Dijo ella sonriendo haciéndome sentir un poco mas acogida en el lugar.- Desea algo para comer? O prefiere descansar? Creo que podemos desempacar mañana, ademas el señor Matuck la llevara de compras mañana por la mañana asi que necesitará ordenar y hacer espacio para las cosas.

- Ya veo... Creo que prefiero descansar por ahora, muchas gracias.

- Permiso mi Lady, que descanse muy bien, puede llamarme si me necesita..- Hizo una reverencia y cerro la puerta.

Al ver esa mujer tan servicial me sentía como una princesa falsa, una sirvienta haciéndose pasar por una princesa. Me senté en la cama, sentía que esta noche no podria ni dormir, me sentía totalmente sola y desprotegida en un lugar desconocido. Solo podia pensar en que estaría haciendo mamá y Félix, me extrañarán? Por que yo si...

De pronto siento que alguien golpea la puerta.

- Señorita Lisa?? Puedo pasar?? - escuchó la voz de Mily al otro lado de la puerta. Al mirar a mi alrededor me di cuenta que ya habia amanecido me habia quedado dormida sin darme cuenta.

- Adelante, pasa. - Dije levantándome rápidamente intentando aparentar que ya estaba levantada hace un buen rato.

- Señorita, lamento molestarla pero es hora de su baño. - Dijo ella con una toalla en sus manos.

- oh... Claro.- La seguí por la casona y llegamos a otra habitación, al abrirla adentro había una hermosa bañera con burbujas y espuma, en el aire se podía oler una escencia de vainilla.

- La ayudaré a desvestirse, permítame.- Al decir eso se me puso la piel de gallina y me aparte rápidamente.

- No no no, puedo hacerlo sola, enserio. - Normalmente me había tocado bañar a Lianna unas cuantas  veces pero no estaba acostumbrada a que alguien más me viera desnuda a lo mas mi madre pero nadie más.

- Pero señorita, es mi deber... - Dijo ella sin saber cómo ayudarme.

- ¿Puede esperar afuera? Lo siento es que no estoy acostumbrada a que alguien me ayude en el baño a parte de mi madre. - Dije intentado optar a su lado comprensivo, lo cual resulto por que ella solo asintió y se retiró.

Al terminar mi baño, coloque mi ropa habitual, al salir Mily entro al baño limpiar y ordenar las cosas, me quede por un minuto observando, ya que probablemente si estuviera en el castillo estaría limpiando y ordenando al igual que ella.

- Señorita Lisa, baje las escaleras abajo estara Sara, ella le prepara lo que desee de comer. - Dijo ella volteando al ver que solo estaba mirándola. Asentí y baje las escaleras como ella dijo.

- Señorita Lisa, un gusto conocerla soy Sara, desea algo de comer en especial?? O podría traerle yo algo, hoy Tom preparo unos ricos pasteles están deliciosos de verdad.- Sara se veía muy joven de unos 25 años, tenía un pelo rojizo y unas tiernas pecas en su rostro.

- Pues... Suena bien.

- Adelante, siéntese no se arrepentirá!!! Le traeré un rico té con leche para acompañar.- Su entusiasmo me hacia sentir un poco mal, ya que no se sentía muy feliz de estar en este lugar.

A mi costado había una ventana que daba al jardín, el pasto estaba hermoso con un color verde intenso tambien habían algunos pinos y unas rosas blancas.

Sara tenía razón el pastel era perfecto era de vainilla con una salsa de chocolate muy suave, el té con leche lo acompañaba a la perfección.

- Señorita Lisa, el señor Matuck ha llegado la esta esperando afuera en su carroza, dice que cuando este lista la estará esperando para ir de compras.- Sara retiró mis platos sucios y se fue a la cocina.

Quizás... No sea tan malo este lugar, pero me siento más sola que nunca... Félix te volveré a ver denuevo??.

............... 
Lamento ausentarme tanto pero he tenido muchas cosas que hacer. Si lo se son vacaciones pero he tenido que buscar un trabajo...sii llego la hora de trabajar 😭😭 mami por que no me quieres mantener??? Yo solo quería ser una vaga por siempre...

Bueno pero muchas gracias a la gente que aun lee mi historia y que espera cada capítulo. No se a quien dedicar este capitulo pero se los dedico a todos los que aun la siguen leyendo. Muchas gracias, seguire subiéndola no se preocupen (no se olviden de votar y comentar por favor 😳) chau.

Una Sirvienta RealDonde viven las historias. Descúbrelo ahora