Bailaba a tropiezos gracias al alcohol ingerido. Mientras me valenciana de aquí para allá escuche a mi mejor amigo Louis reír, obviamente de mi extraño baile.
–creo que deberías sentarte un momento, hermano –grito Louis sobre la música demasiado alta.
–estoy bien –le dije.
Louis puso los ojos en blancos y tomo mi muñeca con fuerza y a tirones me llevo hasta la barra donde sirven las bebidas.
– ¿quieres algo de beber? –grito otra vez. Asentí. – ¿cerveza? –le guiñe el ojo –vuelvo enseguida.
Desapareció entre la gente. Observe a la gente bailar por un rato hasta que una voz me llamo la atención.
–amigo. No seas aguafiestas… diviértete, bebe algo.
La voz provenía de uno de los muchachos que tenía a mi lado. Sigilosamente escuche el resto de la conversación.
–estoy bebiendo algo –respondió el otro chico.
–es tu primera copa –le dijo con voz obvia.
Hora de interferir.
–que patético, ¿no? Tu primera copa. –le dije a uno de los dos, pero no sabía a cuál.
– ¿Quién eres tú? –dijo el moreno ofendido, examinándome con la mirada. Este era el aburrido.
– ¿Qué importa? –le conteste con otra pregunta –hagamos un reto…
El moreno entrecerró los ojos.
–veamos quien puede beber más sin emborracharse –sonreí maliciosamente.
–creo que ya lo estas, amigo –dijo el moreno
Louis llego en ese momento y enseguida le arrebate el vaso con cerveza que sostenía entre sus manos.
–creo que puedo con muchos más que tu –le provoque y bebí la cerveza que tenía, rápidamente sentí el alcohol quemar mi garganta.
El levanto el vaso haciendo que los hielos de este sonaran contra en cristal e imito mi acción.
El juego comenzó.