Capítulo 13

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-¡No puedo creer que estoy montada en un lamborghini! -Ana se emociona cuando voy a buscarla para comprar los vinos que beberá mi familia mañana.

-Lo sé, y ni te imaginas lo bien que se siente conducirlo. -Rio y ella no para de observar todo el auto.

-Es una preciosidad, Peter no podía creer que Alex te diera uno. Ahora se sentirá el doble de presionado para que me regale mi auto. Un audi R8 color negro, joder lo deseo.

-Creeme que yo tampoco pude creerlo cuando Alex me lo obsequió. Me quedé sin palabras y solo pude besarlo.

Ríe y yo la sigo.

-¿Irás a la cena de esta noche?

Suspiro, la dichosa cena. La empresa ha decidido hacer una cena con los principales trabajadores de la empresa para dar por finalizado un año duro de trabajo con muy buenos beneficios.

-Alexander no ha parado de convencerme.

-No puedes dejarme sola Juli. Sabes que de todas las demás esposas tú eres la única que se adapta a mis locuras y gustos.

Sonrío y estaciono al frente de la tienda de vinos.

-Sabes quien estará ahí. No creo estar lista para ver a esa gata asquerosa.

-Amiga -entramos a la tienda y en el centro yace una mesa con una enorme escultura de una botella de vino- ¿Ves eso? -lo señala- Es lo que le lanzaré a Gilda si llega a meterse contigo.

Rio y la tomo del brazo para llevarla a mi sección favorita.

-Iré. Solo por no dejarte sola.

-Genial. -Me abraza y añadimos en el carrito los vinos para fin de año.

* * * * *

Ha llegado la noche y mi hombre abre la puerta de la habitación justo cuando me estoy poniendo mis tacones y estoy lista.
Recorre mi cuerpo con su mirada y suspira para luego acercase y rodearme con sus brazos.

-Definitivamente me casé con la mujer más hermosa del mundo. -Sonrío y lo beso-. Te ves preciosa con este vestido.

Llevo puesto un vestido largo hasta mis pies. Es ajustado a mi cuerpo, manga larga y es color crema con detalles dorados.

-Y ni te imaginas lo que llevo debajo... -Beso su mejilla y siento como sonríe.

-¿Por qué me tientas morenita?

-Porque quiero que me hagas el amor.

-¿Y crees que yo no? -me besa hasta acabar con mi aire-. Estoy loco por escucharte jadear por mí. Pero no momento.

-Eres muy terco.

Me da un azote y yo sonrío.

-Andando o terminarás convenciéndome.

Bajamos las escaleras y Albert esta en la entrada junto a Caro, Ryan y Kris.
Por supuesto que el dueño de la empresa debe estar presente. Mis padres prefirieron quedarse en casa con mis abuelos y Luz así que después de despedirme subo al audi de mi hombre y nos dirigimos a la empresa, ambientaron la sala de reuniones más grandes para celebrar la cena.

Subimos al ascensor y al llegar al piso en donde se encuentran los demás siento mi estomago revolverse. Sé que ella estará aquí y también sé que todos están al tanto de lo sucedido con Dominik por lo que seremos el blanco de los chismes. Pero si mi marido esta a mi lado, lo otro no importa.

-¿Confías en mí? -susurra mi hombre antes de entrar al salón.
-Asiento y aprieto su mano-. Estas conmigo, es lo único que importa.

Beso sus labios y entramos.
Los aplausos inundan la sala y Albert junto a Caro sonríen. Agradecen y después de saludar los invitan a todos a la mesa.
Cuando me doy cuenta de la presencia de Ana y Peter no tardo en saludarlos y por supuesto que siento junto a ellos, Alex se sienta a mi lado y como es de costumbre posa su mano en mi rodilla.

Eres Mía para Siempre  II [ REALIZANDO CORRECCIONES ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora