DOPE

F I V E

la espalda de matty golpeteo ligeramente contra la pared de mármol. las manos de george reposaron sobre sus caderas mientras depositaba cálidos besos.

una sonrisa se formó en sus labios creando una curva ligera. la piel del castaño era tan suave que podía permanecer ahí durante un buen tiempo. libre de alguna marca, tan sólo llena de tinta que expresaba el proceso de su historia aún no concluida.

george retomó su lugar en los labios del castaño y logró definir visualmente la sensualidad que matty poseía en ellos. mordió la comisura con delicadeza e introdujo su lengua con fuerza una vez más para continuar experimentando el delicioso elixir que el castaño le ofrecía.

matty se sintió envuelto en un ajetreo lleno de murmullos y sonoros chasquidos provenientes de la sincronía de sus bocas. los períodos de distancia para retomar oxígeno eran cortos, ya que la necesidad de permanecer juntos era incontrolable.

gotas de sudor resbalaron de la frente del rizado permitiendo a george una vista mucho más prodigiosa. aquello que tenía en frente era una pieza perfecta de arte a la cual se debía admirar con detalle.

las manos de matty ascendieron a las mejillas de george aumentando la presión de sus labios. ninguno tenía un paso exhaustivo, aún queriendo aumentar su ritmo, ambos sabían que tomarlo con tranquilidad funcionaría.
george clavo con más fuerza sus manos en las caderas del contrario y presionó para que sus genitales creasen la fricción necesaria.

un gemido envuelto escapó breve de ambos labios ya que sus erecciones crecían aún más con el paso del tiempo. los recuerdos de george se crearon vomitivos, la mirada incompleta de sille que formaba parte de ella, sus seguridad y sus instintos persuasivos para adivinar todo en concreto.

aunque todo eso restó importancia en cuestión de segundos porque los ojos del castaño se encontraban puestos sobre él exigiendo que no pensara, que no dañase el momento que parecía resultar bueno.

george sonrió con tranquilidad y retomó el control para besarlo una vez más. sus manos dejaron de presionar las caderas del castaño ya que ascendieron, sujetaron con fuerza sus muñecas y las pego hacia la pared. sentía la necesidad de poseer control.

—quiero follarte —el más alto murmuró junto a los labios de matty, los cuales gesticularon una sonrisa ladina llevándolo a la locura.

—hazlo —finalizó musitando y saltando a los brazos de george—. quiero que me rompas —recitó.

las palabras del castaño le dieron acceso total a su cuerpo. no había restricciones, sólo había sonidos  y expresiones placenteras.

no había necesidad de detenerse, el sexo rudo parecía ser lo suyo, aunque claramente no parecía tan violento, pero con el paso del tiempo incrementaría la velocidad.

relamió sus labios y bajó hacia el cuello de matty percatándose de marcas viejas depositadas. su cuerpo se tensó al instante ya que no parecía gustarle en absoluto no ser dueño de aquello.

reaccionó breve apretando las muñecas del contrario acompañado de un mordisco leve en su labio inferior que fue sacudido por un gemido poco reprimido.

sus manos descendieron con velocidad e hicieron de una posición incomoda algo cómoda puesto que sujeto a matty de sus delegados muslos y presionó su miembro con la entrada del castaño.

matty echó su cabeza hacia atrás al sentir aquel rose. los labios de george se curvaron y comenzó con un vaivén lento que duró poco ante las súplicas.

—más-más rápido —matty exigió entre gemidos.

el más alto en minutos se deshizo de aquella posición favorable y colocó al castaño en cuatro mirando lo bien que lucía su trasero alineado frente a él para así poder ejecutar la acción deseada.

tan pronto como pudo lo penetró con dureza y escuchó los gemidos de matty al contacto de sus caderas contra su trasero. todo era ágil que se mantuvo en un vaivén brutal disfrutando de las expresiones de matty.

ambos sudaban a pesar de que el éxtasis se presentaba de una manera lenta y momentánea. el orgasmo se acercaba siendo percibido por la pared anal del castaño.

matty era tan estrecho que george se sentía en el paraíso. era jodidamente caliente y él no lo había notado antes.

su cuerpo se sacudió en la última embestida, aunque francamente ninguno se sentía cansado.

el éxtasis del rizado estaba por los cielos, como sí hubiese metido alguna dosis a su cuerpo, sin embargo, todo se trataba de lo bueno que era george. sus alucinaciones se colocaron frente al más alto y su gran erección, observando las características excitantes del más alto.

matty relamió sus labios y soltó un último jadeo antes de levantarse y posicionarse frente a george, tomar un poco de aquel lubricante de sabor y untarlo sobre el pene de george.

—¿estás seguro? —george sonrió mientras preguntaba.

matty asintió e introdujo de una lamida completa a su boca el gran miembro de george, quien se retorció al sentir lo cálida que era la boca del castaño.

—n-no t-tan lento —murmuró y colocó su mano en la cabeza del rizado para presionar más sus movimientos.

sus movimientos eran feroces y sin piedad, puesto que disfrutaba mirar la sonrisa de george siendo quebrantada por el placer de sus gemidos.

se sentía bien consigo mismo. aunque tal vez su mente divagaba entre pensamientos patéticos. tal vez george no estaba en sus cinco sentidos, tal vez se trataba de una broma, aunque claramente no importaba. amaba tener a george para él.

—matty, me voy a correr —amenazó el de cabellera rubia antes de soltar un último gemido acompañado de su nombre.

sonó tan bien como el triunfo.

george lo tomó de las caderas nuevamente y lo penetró profundamente para poderse correr dentro de él mientras que el castaño también se corría.

sus respiraciones maravilladas y extasiadas, sus ojos entrecerrados, las gotas de sudor presentes en ambos cuerpos. se sentían bien, liberados finalmente.

ambos se dejaron caer lentamente al suelo. matty yacía sobre su pecho, descansando su cabeza con tranquilidad, mientras george sonreía y acariciaba el hermoso cabello del rizado.

—promete que no estarás con alguien más —habló george acariciando el torso desnudo de matty.

—lo intentaré —musculló sin alientos de continuar una conversación.

- smut basura. lo intenté pero no salió, espero les guste.