Un Viaje Al Pasado [Ace Frehley]

Capítulo 1

Soy _______(t/n) ________(t/apellido) tengo 17 años, vivo con mis padres y soy hija única pero eso no quiere decir que sea la consentida...todo lo contrario, mis padres al ser dueños de empresas están todo el día trabajando y se olvidan de que tienen una hija, aún así tengo una amiga que se llama Nora, ella es la única familia que tengo, soy una chica de pocos amigos, soy poco sociable pero así soy feliz.

Estoy en la universidad y soy la «chica rara», a todos les gusta el pop y géneros parecidos pero a mí me gusta el rock, en especial la banda Kiss.

Ellos son mi inspiración pero sin duda al que más amo es a Ace Frehley, aunque no esté actualmente en la banda para mi siempre será Spaceman, pero aún así considero que Tommy Thayer es un buen guitarrista.

-_________, ¿Puedes ir hoy a mi casa? -preguntó Nora haciendo que reaccionará

-Si, si puedo pero...¿Hay algo importante?-ella miró a los lados y se acercó a mi oído

-En la tarde te contaré todo.-dijo susurrando y yo la miré mal

-Pensé que ibas a decirme.-dije seria y ella rió

-Siempre haz sido muy impaciente.-rodé los ojos

-Si si...-dije tomando poca importancia a lo que dijo y ella rió más.

Entró el profesor y todo fue como todos los días, yo seguía pensando en lo que me diría Nora 
cuando llegue a su casa...ella tenía razón, soy muy impaciente.

-¡Señorita __________! ¿Nos podría decir en que planeta está? -preguntó el profesor molesto

-En Marte...-susurré muy bajo

-¿Perdón?

-No, no dije nada, lo siento...-dije apenada, todos me estaban mirando y algo que soy aparte de ser impaciente es ser tímida.

-Que no se vuelva a repetir.-dijo y yo asentí.

Las clases por fin terminaron y fui con Nora a su casa, ella me hablaba de muchas cosas y yo la entendía a la perfección.

-Primero vamos a comer, muero de hambre.-dijo riendo, fuimos a la cocina y comimos.

-¿Ahora si me dirás qué es lo importante?-pregunté impaciente

-Shh...vamos a mi habitación.-la seguí y llegamos, ella abrió la puerta lentamente haciendo que me pusiera más nerviosa, entramos y nos sentamos frente a su escritorio.-Ayer fue la subasta de las cosas del científico Michael Harris, ¿Te acuerdas de él?

-Si, hasta hicimos un trabajo acerca de él.-dije riendo

-Si, lo que pasa es que como ha fallecido sus cosas han sido subastadas y mi papá fue a ver que cosas podría comprar y mira...-dijo y me acercó a una caja muy grande, parecía un refrigerador

-¿Tu padre compró un refrigerador?-pregunté y ella rió

-No, pero es muy lindo...hace que mi habitación se vea diferente.-dijo mirando esa caja extraña

-Y...¿Nunca haz entrado por curiosidad?-ella negó

-Claro que no...además, ¿Para qué lo haría?

-Por curiosidad...-intenté entrar pero ella me detuvo

-¡No! ¡Lo vas a romper!

-¡Claro que no!¡No peso mucho ni tampoco soy alta!-dije pero ella negó

-Aún así, es muy valioso para mí, costó una fortuna y no quiero que se maltrate.- dijo muy segura y yo asentí.

-Esta bien, entonces olvidemos este extraño tema del refrigerador y hagamos la tarea.-dije sonriendo y ella sonrió conmigo

Hicimos nuestro trabajo en grupo y lo terminamos muy rápido, somos un buen equipo.

-¿Te sigue gustando Ace?-preguntó de repente Nora

-Pues claro, es mi guitarrista favorito.-dije sonriendo

-¿Qué harías si lo conocieras pero cuando recién empezaba Kiss?-preguntó y yo reí

-Eso es imposible

-Sólo decía...

-Bueno...si fuera posible, la pregunta sería ¿Qué no haría?-dije y reímos juntas

-Felizmente yo si puedo conocer a mis ídolos.-dijo sonriendo y yo reí

-Si es que sucede un milagro.-ella me miró mal

-¿Sabes? Ya me dejaste con la duda...mejor hay que entrar en el refrigerador.-dijo y caminamos hasta esa cosa extraña

-Yo entraré primero.-dije y entré

-Aquí...hay un botón..¿Y si lo presiono?-escuché que dijo

La caja no era tan grande pero si entraba cómodamente, escuché un ruido raro y luego una luz azul comenzó a rodearme completamente, me asusté, quise salir pero no podía...la puerta estaba cerrada, comencé a sentir que la caja se movía mucho, era como viajar en un avión pero muy rápido, la luz seguía rodeándome y yo me asustaba más hasta que de repente todo dejó de funcionar y por fin pude abrir la puerta

-¡Nora! ¡Nora! ¿Qué pasó?-pregunté asustada al salir pero...

Ya no estaba en la casa de mi amiga.