CAPITULO 6

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-¿Qué haces tú aquí? – digo firme y enfadada al ver quien me ha quitado mi lugar de entrenamiento.

Entro sigilosamente por detrás dejando la puerta entornada, sin cerrar del todo para no hacer ruido innecesario

-Buenas noches a ti también, si claro, la educación que no falte – comenta irónico a lo que me voy acercando poco a poco hasta quedar cerca de el

-No estoy para educación ni tonterías, ¿Qué haces tú aquí? ¿Y a estas horas?- exclamo elevando mis manos hacia el aire – este es mi lugar de entrenamiento – digo remarcando el mí para que le quede claro

-¿Me estas echando? ¿Me estás diciendo que tu puedes estar aquí y yo no? ¿Y eso porque...?

Pesado.

-Si no fueras tan idiota lo sabrías, pero como lo eres pues hay que explicarte las cosas despacito, tú no puedes estar aquí principalmente porque a este lugar solo pueden venir los que se llevan como mínimo dos meses, no dos días novato

-Pues para que te quede claro yo no me pienso mover de aquí

I-N-S-O-P-O-R-T-A-B-L-E

Ruedo los ojos y sonrió maliciosamente mirando a la mesa rectangular gris del fondo donde por las mañanas y tardes están todo tipo de armas y pistolas para poder practicar pero las recogen por la noche por medidas de seguridad.

Me muevo hacia la izquierda cogiendo su pistola que está en su bolsillo para salir por al lado y llegar a la mesa gris pero se interpone impidiéndome el paso dando un paso hacia la izquierda intentando recuperar su pistola a lo que me echo para atrás para que no la pueda coger

-La próxima vez será novato – sonrío de lado y me vuelvo a acercar a él poniendo una mano en su mejilla mirando directamente sus profundos ojos negros y me acerco aun mas quedando demasiado cerca.

Cuando cierra los ojos se pueden ver sus largas y abundantes pestañas cayendo sobre sus mejillas, sonrió y quito mi mano de su mejilla consiguiendo escapar y llegar a la mesa gris para sentarme sobre ella moviendo mis piernas hacia delante y hacia atrás continuamente.

Lo veo girarse alzando una ceja y caminando con pasos acelerados hacia mí abriéndome las piernas y colocándose entre ellas volviendo a quedar muy cerca de mí

-¿Qué ha sido eso? – pregunta con un cierto tono molesto

-Regla número uno, nunca te distraigas con tu adversario novato – le lanzo una mirada de superioridad

-Esa es tu regla número uno, pero yo tengo una norma, y es que nadie deja con ganas a Jack Daniels

-¿Estas admitiendo que te he dejado con las ganas novato con nombre de whiskey? – no sé porque pero mi pecho se infla de ¿orgullo? si probablemente sea eso, me encanta molestarlo y es una sensación nueva en mi ya que me suele dar igual lo que hagan otras personas y como se sientan

-Yo lo diría con otras palabras pero no estamos aquí para perturbar la mente de la señorita – me da una sonrisa demasiada falsa y apoya sus manos en mis muslos acercándose demasiado con los ojos cerrados.

Creo que mi rostro ahora mismo es neutro y no demuestra ninguna emoción salvo confusión, ¿Qué se piensa? ¿Qué lo besaré? – suelto una carcajada interna y cuando veo que se acerca todavía más y su labio inferior roza el mía echo la cabeza hacia atrás y le suelto una bofetada

-Espacio vital novato

Escucho unas fuertes risas que provienen de la puerta y miro hacia allí apartando al novato de un empujón mientras el se toca la mejilla y diviso a Maggie apoyada en la puerta.

Caso 214Donde viven las historias. Descúbrelo ahora