Creador: Azelf5000.
"Eyeless Jack, el ciego errante"
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Yo era joven en el trabajo de la enfermería, hace un año apenas había obtenido mi licenciado para empezar.
Para entonces, me habían dejado encargando un paciente algo excéntrico por decir así... todas las noches se le escuchaba hablar, por detrás de la puerta con alguien, sin embargo cuando abría la puerta solo se encontraba él en el cuarto, completamente solo. No se si al momento en el que le habían extirpado el riñón derecho había sufrido algo craneal cosa del cual me parece muy ilógico, qué se yo, pero me parecía extraño.
Esta era la noche en el que el paciente iba a ser dado de alta, último día en el que podría escuchar sus conversaciones entre él mismo, lo cual me alegraba.
Ya eran las 6 de la tarde, la noche se acercaba, sin estrellas, sin luna. Entraba al cuarto para darle la cena al paciente, el cual, melancólicamente miraba hacia la ventana el atardecer; Le pregunté:
-¿Qué sucede, querido paciente? - Dije mientras ponía el plato en su mesa desplegable. Al parecer no me escuchó, volví a preguntar: - ¿Paciente, le sucede algo malo? - Por fin él hombre de 40 años volteó algo sorprendido, como si hubiera reventado la burbuja de concentración.
- Vendrá hoy. - Respondió. No podía evitar empezar tenerle ojeriza, su actitud ya me estaba empezando a enfadar, felizmente ya se iba mañana en la mañana.
-¿Quién? - Le seguí, para no ser descortés.
-Jack, el ciego errante.
No sabía de quien diablos hablaba el paciente, así que solo ignoré lo último, más luego volvería para recoger el plato y los cubiertos. Salí, esperé media hora hasta que el señor termine y luego regresé, el día se sentía largo, como si el tiempo tendría de segundo al minuto; Pasaron así las horas hasta hacerse realmente tarde.
El hombre, desde el fondo de su cuarto se mantenía callado, milagrosamente. Ya había sido aseado y alimentado y antes de apagar la luz de su cuarto, me senté a su lado a hablarle por un momento sobre lo que tanto lo desconcentraba de la realidad, quizá le faltaba una oportunidad de conversación con alguien concreto:
-Señor, dígame, ¿con quién habla tanto por las noches? Medio hospital se siente "extraño" por eso. -Dije.
-No es nadie que ustedes conozcan. Sé que me toman por loco. -Respondió. Me pareció tan exacta su respuesta que hasta me sorprendí- Y sé que es verdad, señorita. No reproche. - Agregó con la mirada apuntando hacia sus dedos, los cuales jugaban, parecía tener ansiedad.
-Eso es lo de menos, paciente, dígame, ¿Quien es Jack?
-Es un monstruo. Camina por las noches... como si alguien que no tuviera rumbo, está loco, derrama sangre siempre... sangre negra.
-...- permanecía callada ante esa descripción.
-Jack es como la noche, sus cuencas oscuras, como en esta noche, sin brillo. Cubre a todo el que camine desprevenido por las calles, señorita, él no se detendrá hasta que yo esté muerto, la alta es en vano, se lo juro, esta noche vendrá, ¡aléjese! Siento que la metí en esto, él no quiere que lo conozcan... le gusta estar entre las sombras.
-Wow- Dije, mi mente se estaba provocando que me vacile por la gracia, no tenía que dejar ir una risa- No veo porqué temerle a cosas ficticias, paciente. - Hablé tratando de sonar muy segura.- Me parece que usted se a sugestionado con el "famoso" Jack. - Agregué tratando de esconder mi ironía.
-Señorita, crea lo que quiera. Mañana amaneceré muerto y la siguiente es usted.
Eso sin duda expresó el quererme reprender. El hombre estaba loco, mejor me salia del cuarto, apagué las luces y me dediqué a hacer mis cosas. Eran pocas las personas que se quedaron en el lugar conmigo, todas estaban trabajando con lo suyo.
Fui al baño por un momento, ya era de madrugada, justo al entrar me vi al espejo, ¡por Dios! ya tenía ojeras, con este trabajo mi cara quedaría demacrada; Al terminar de lavarme el rostro regresé a sentarme justo al lado del cuarto del paciente, de pronto cuando se me vino el pensamiento de lo último que me dijo, me reí pensando que era algo muy ridículo; Ya casi cuando iba a cercar los ojos, escuché cómo la ventada del cuarto del paciente se cerraba bruscamente, reaccioné rápidamente abriendo la puerta, todo estaba oscuro, al dar un paso hacia adelante pude escuchar cómo un líquido salpicaba entre las cosas que tenía alrededor pero, al encender la luz me topé con el primer escenario sangriento de mi vida trabajando en un hospital más a una sombra que se marchó como rayo al mismo tiempo que había gritado como nunca.
Caí rendida, no faltaron los personales del hospital a venir, también habían visto un cuarto totalmente teñido de rojo y al paciente totalmente extirpado del área anatómica dos. Desprecié el momento en el que vine a trabajar en este hospital, ¿acaso la tontería de Jack era una realidad? Al día siguiente renuncié del trabajo, se había formado una panofobia - Confesé.
/Narrador omniconsciente/
Entonces la ex enfermera cerró su diario. Se encontraba más nerviosa que nunca, sudaba y su corazón no podía dejar de latir con rapidez, con una leve falta de aire. Ya habían pasado unos 5 días desde aquello... no podía olvidar esos intestinos que simulaban cuerdas amarrar las cuatro extremidades del paciente, todo para mantenerlo quieto, desde la abertura de su abdomen; De la nada se le vino el deseo de vomitar a ella, casi no había comido en esos días.
Se sentía insegura, su mente había alcanzado un nivel alto de preocupación, al entrar al baño para aliviar sus nauseas, cerró la puerta por completo y empezó a vomitar; Mediante el hecho, sintió como un aire frío tocaba sus finos brazos, entonces la luz se fue en su casa, se vio confundida y a la vez alarmada, volteó por todos lados tratando de tocar las paredes para no chocarse y, al sentir que tocaba una superficie muy fría, fue subiendo sus manos, -¿Qué es esto? - Se preguntó, poco a poco con el tacto descubrió de que se trataba de un rostro sin ojos... sus dedos habían entrado a las cuencas dejándolos manchados de una sustancia pegajosa, trató de gritar, pero su voz no salía.
Rápidamente la criatura la ahorcó y la alzó así con el brazo dejando sus pies al aire, esta trataba de quitarse las manos de este con desesperación, cuando este la tiró hacia el suelo chocando directamente con la bañera, se le estaba formando un chichón luego de esto; Ella trató de levantarse, quería sacar su celular para darse luz, quería salir lo más antes posible de ese lugar, mas la criatura rápidamente la echó contra el suelo y la apuñaló; Gritaba y gritaba pero nadie la escuchaba, las puñaladas eran profundas, rápidamente el monstruo ingresó sus manos y sacó todo lo que había hasta encontrar el riñón, para ese momento, ella ya estaba muerta.
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|Inútiles| "Creepypastas, máquinas para matar"
Historia CortaHola! Por alguna razón me dio a escribir este libro, algo queriendo mostrar en cada capítulo como es que ellos podrían llegar a actuar, cada uno a su estilo, claro. Me refiero a los Creepypastas y todos sabemos que ellos son únicos, mucho mucho, po...