"Cuando lo eterno se vuelve
cotidiano, también se vuelve un sufrimiento constante "Caminaba sin rumbo alguno por las calles llenas de neblina, parecía que estaba en Londres. Pero no podía quejarme de nada, ella era mi secuaz y mi aliada, la que siempre me daba la salida a los problemas hace tantos siglos atrás.
Las calles a estas altas horas de la noche estaban desiertas, ni una mosca volando, las luces de los faroles de luz iluminaban tenuemente mi camino; sin embargo no es que necesitara de la luz para poder ver.
Mis claros ojos avellanados ocultaban algo más que mi alma, como un gato en la oscuridad yo podía ver perfectamente, como si la noche fuera día. Mis sentidos jamás habían sido mejores que nunca, se podía decir que era una de las ventajas de estar no muerta.
En las películas de terror sobre nosotros, nos hacen ver como criaturas sin corazón, sin alma. Pues se equivocan, si la tenemos sólo que está sentenciada con una entrada Vip al infierno.
Mi atuendo esta noche era muy provocador, muchos me confunden con una prostituta o trabajadora de noche como más les guste.
(Para que se den una idea)
Caminaba y caminaba sin parar, lentamente, haciendo que mis tacones hicieran ruido contá el suelo de la vereda.
Estaba por cruzar cuando unas manos me sujetaron del brazo y me llevaron hasta un rincón oscuro.- Hola chiquita ¿porqué tan solita?.-
El hombre frente a mí era fornido, poseía un aura de masculinidad que era muy excitante. Podía verlo con claridad, ojos azules, cabello castaño, un mortal muy encantador.
- ¿Y tú? Un hombre como tú a estas altas horas de la noche, ¿no deberías estar con muchas mujeres teniendo sexo?.- me apegue a él acariciando sus bien definidos brazos.
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Do not look me in the eye
VampireLa vida definitivamente no es como la pintan... La mía es de color rojo sangre, de un aroma embriagador que me cega por completo y dejá salir a la bestia que hay dentro de mí. La sangre no sólo es vida, sino también es alimento, hambre y soledad...