Capítulo 27

356 16 0
                                    

  La feria bullía con la actividad previa a la apertura. ______ miró su puesto y dijo:

—Lo decía en serio.

______ rió. Había docenas de juegos en los que se podía perder tanto dinero como se quisiera, y más. Había puestos de artesanía, y una amplia variedad de ofertas gastronómicas y al final, un escenario. Camino de su puesto, Zayn había tenido que detenerse a firmar autógrafos y, aunque lo hacía de buen grado, eludía las preguntas personales, tan reservado como siempre.

La música llenaba el aire, y _______ se descubrió sonriendo con anticipación y entusiasmo cuando vio el sitio que les había tocado. Era un enorme depósito de agua con un asiento encima, que parecía un trampolín, y encima estaba el lugar al que había que lanzar las pelotas. Cuando una diera en el blanco, el asiento se caería.

—Mira el lado positivo, Zayn. Hay que tirar desde muy lejos, y el blanco es muy pequeño. Ningún niño le va a dar. Nos pasaremos el día secos.

—¿Sí? ¿Por qué no vas y lo compruebas? De hecho, yo seré el primero en lanzar, sólo para asegurarnos.

—Oh, no —contestó ella, entre risas—. Deberías ir tú primero.

—¿Y eso por qué?

______ se moría por ver si estaba tan guapo mojado a plena luz del día como lo estaba a la luz de la luna.

—Para comprobar que es seguro —dijo, en un arrebato de brillantez.

Él rió con complicidad, y cuando sonó su móvil, contestó.

—¿Ahora qué pasa, Harry? ¿No nos hemos visto hace tres minutos en la entrada? —preguntó, con fastidio—. ¿Qué necesitas que me coloque en ese asiento? Genial, gracias. Sí, sí, yo también lo hago con buena intención, pero como acabe empapado me las pagarás-Zayn cortó la comunicación, se guardó el teléfono en el bolsillo y miró el enorme barreño con terror.

_______ no pudo contener la risa.

—Creía que no le tenías miedo al agua.

Él se quitó los zapatos y los pantalones, debajo de los cuales llevaba un bañador azul.

—No le tengo miedo a nada —dijo, quitándose la camiseta.

Ella tuvo que hacer un esfuerzo para no tragarse la lengua. Como había comprobado la semana anterior, el chico seguía teniendo aquel abdomen tan plano y fibroso. ______ había estado leyendo mucho sobre su trayectoria profesional. Había sido uno de los mejores en 'The X Factor', hasta que llegó la hora de meterse de lleno en el trabajo y seguir con 'One Direction' para conseguir sacar su primer disco. Zayn aseguraba no tenerle miedo a nada, pero ella sabía que no era cierto, porque se lo había dicho.

—Salvo al compromiso —le recordó—. Te da miedo el compromiso afectivo.

Él le tiró la camiseta a la cara. Cuando ______ se la quitó, después de embriagarse con su delicioso perfume, Zayn arqueó una ceja.
Ella levantó la cabeza.

—De acuerdo —dijo Zayn—. A ninguno de los dos nos gusta reconocer que tenemos miedo. Somos grandes, fuertes y con una superficie impenetrable —caminó hacia la escalera que conducía al asiento colgante—. Pero apuesto tu bonito trasero a que mi superficie impenetrable se congelará si alguien consigue dar en el blanco.

______ contuvo la risa al ver la cara que ponía mientras se sentaba; parecía que prefería que lo torturasen a tener que estar allí.

—No te preocupes. Estoy segura de que el agua no está tan fría.

—Me aseguraré de que lo compruebes.

Zayn miró a la multitud que se abalanzaba desde la puerta principal. En menos de un minuto, había una larga fila de niños ansiosos por tirar a Zayn al agua.

En secreto, _______ esperaba que alguno lo consiguiera. Deseaba ver aquel cuerpo perfecto mojado y reluciente. Se había dado cuenta de que aquello era lo más merecido de ver en todo el planeta.

La primera en intentarlo fue una niña de unos siete años. _______ le cambió los billetes por dos pelotas pequeñas.

—Tíralo —dijo—. Está deseando darse un chapuzón.

La niña falló el primer lanzamiento, se mordió el labio inferior y miró a _______ con los ojos llenos de determinación.

—Lo quiero hundir.

Ella la hizo cruzar la línea y la acercó un metro y medio a Zayn.

—Inténtalo de nuevo.

—¡Eh! —protestó él.

________ lo miró y sonrió divertida.

La pequeña volvió a fallar, y a ________ le pareció oír que Zayn suspiraba aliviado.

El siguiente de la fila era un adolescente que parecía tener un buen brazo. _______ le dio las dos pelotas y lo animó a derribar a Zayn.

—Lo haré —prometió el chico.  

Seduceme |Zayn Malik y tu| TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora