Capitulo 5: El pequeño Hamster

1K 67 9
                                    



Los preparativos estaban casi listos y Dominik necesitaba encontrara a Jesús para dejarle las copias del libro de ese año, el ultimo volumen de Letras Doradas, una historia en cuatro partes bastante sencilla de temática trágica, habían decidido publicarla por lo cercana que es a la realidad de un alumno de secundaria, pero el problema ahora es que no podía encontrarlo y se estaba preocupando, mañana era el ultimo día para llevarlo a la editorial y el encargado de ello era Jesús.

Pero Jesús por su lado resolvía otros problemas mas importantes, irrelevantes a cualquier cosa fuera de lo personal en general, un hecho shokeante para cualquier varón a lo largo de su vida.

-Me gustas...

Jesús a sido amigo de Tonny desde la primaria, siempre a pensado que Tonny es demasiado inocente y confiado para su bienestar, además su aspecto pequeño y delicado igual a un hámster es algo totalmente fuera de favor.

Tonny para ser honestos no supera el metro 70, tiene un cuerpo pequeño y delgado, ojos grandes y redondo color verdoso, unas mejillas regordetas de un leve color durazno y unos labios en forma de corazón bastante voluminosos y atractivos. Toda la escuela sabia que Tonny era gay, era la mascota favorita de varios y de vez en cuando le regalaban dulces porque siendo sinceros nadie podía enojarse con el, después de todo era como un hermano menor para todos los cercano a el.

Sin embargo Jesús siempre a sido el mas cercano desde el quinto año de primaria cuando lo salvo de ser mordido por un perro mientras pasaba con su bicicleta en la calle, después de eso el pequeño Tonny se convirtió en su confidente.

Aunque el hecho de que se enterara hace algunos meses de su homosexualidad había sido un golpe algo duro podía pasarlo fácilmente, pero ahora era diferente por que el pequeño hámster llamado Tonny estaba frente a el, con las mejillas rojas como tomates y los labios temblorosos declarándose a mitad de las fechas mas estresantes para el y el club de Literatura.

-Tonny, yo no se que decir, es algo tan repentino... -respondió intentando regularizar el tono de su voz, maniobrando para no sonar tan excesivamente espantado..

No es que quisiera rechazar a Tonny, si era sincero el también sentía un poco de atracción por el desde que entraron a la secundaria, nada en exceso en realidad, podria incluso ecirse que eran cosas hormonales nadamas pero no estaba seguro aun tenia algunas dudas.

¿Que si no puede aguantar los sentimientos de Tonny? ¿Podrá corresponder de la misma forma que el? Y su familia ¿que le dirá a su madre? ¿cuantos sentimientos son necesarios? Y la lista seguía y seguía en su mente.

Necesitaba pensar, necesitaba organizar las nuevas emociones que estaba experimentando, por que no sabia que era ese tamborileo de su corazón, o ese escalofrío que recorría su espalda baja cuando miro los brillantes ojos de Tonny o ese temblor repentino en su labios y manos.

No entendía mucho y necesitaba entenderlo por que no quería darle una repuesta básica a Tonny, no quería darle unas pobres migajas de amor, el se merecía mas, mucho mas de lo que las personas pudieran darle.

-Si, yo se que es un momento difícil, pero podrías reconsiderarlo, por favor...-murmuro Tonny jugando nervioso con su dedos.

No podía sentirse mas ansioso, ¿como demonios se le había ocurrido confesar tales sentimientos en esta época? Ah, cierto, Dominik se lo había recomendado, no entendía como podía haber seguido el consejo de alguien que salia con su novio desde los nueve años.

Eran casos completamente distintos, por que ellos se correspondían y Jesús no sabia de sus sentimientos hasta ahora, el se había encargado de mantenerlos en secreto, bajo llave dentro de una caja fuerte, pero lamentablemente sin candado, aunque por alguna razón hasta hace unos días había empezado a desbordarse y se había vuelto incontrolables.

Este era el resultado, pero no podía evitarlo, Jesús era tan apuesto, sus ojos café y su cabello castaño claro, sus ojos afilado y su nariz respingona, su quijada cuadrada y sus labios finos, su cuello alargado y sus clavículas, todo era absolutamente insoportable, hasta el mas mínimo roce era un zoológico de sensaciones.

Odiaba que tan solo su voz causara tantos estragos en su corazon, odiaba quedarse sin aire hasta que le dolian los pulmones cada vez que le sentia tomar su espalda o rozar su cintura, odiaba el hormigueo constante y la exitacion que sentia cuando lo veia en educacion fisica, dios, no sabia como habia podido soportarlo.

-Hasta el final del festival, te daré mi respuesta ¿de acuerdo? -Pidió Jesús con voz suave y una décima mas baja, necesitaba tranquilizar a Tonny, parecía muy nerviosos y el temblor de sus manos no le ayudaba.

Tonny miro por unos momento el rostro de Jesús, amaba mirarlo en las tardes de estudio antes de los exámenes, pero ahora no quería por que el miedo le recorría cada molécula de su cuerpo, pero no podía evitarlo, no podía solo no ver el tono sonrosado de su piel. De alguna manera se sentía satisfecho, ya no importaba si no aceptaba sus sentimientos, había dado el mayor paso que marcaría su vida y eso le llenaba de orgullo.

Sabia que dolería, estaba consciente de ello, Jesús había sido por lo mucho todas sus primeras veces, su primer amigo, la primer persona que confió en el, que lo cuido, que le presto atención. Desde que el había llegado las cosas habían mejorado, su padre había ganado la demanda y se le había sido cedida la cuatodia total que su madre tuvo durante años, se había mudado ha la casa de su padre y a pesar de que este le había sugerido cambiarlo de escuela el no cedió.

Por Jesús, solo por esa razón no había querido cambiarse de escuela, no había querido mudarse tan lejos, pero debía hacerlo por su padre. No era tan malo, su madrastra era una mujer amable y cariñosa, además esperaban a su pequeño hermanito y no podía solo irse de casa.

Su familia sabia de su orientación sexual y lo había aceptado calladamente, hubo problemas al principio por que su padre pensaba constantemente que cualquier hombre de la calle podría ser una opción, hasta que el aclaró las dudas y su padre se tranquilizo por saber que aquel que dominaba su corazón era Jesus.

Sonrio amablemente y acepto la propuesta, no perdía nada, ahora ya no.









Dominik caminaba aprezuradamente por los pasillos intentando alejarse lo mas posible de aquel lugar.

El recordaba perfectamente las charlas que habia tenido con Tonny anteriormente, sabia que algun dia lo veria con un chico apuesto a su lado, sin embargo nunca penso que fuera Jesus, no es que le molestara el pensaba firmemente en que se veían adorables estando juntos.

El problema es que no pudo evitar avergonzarse, el jamas habia sido parte de una declaracion, quizas cuando era pequeño pero no lo recordaba del todo, recordaba la forma en la que Oliver le habia pedido ser su novio pero, segun el recordaba llevaban cuatro años de novios, pero aun seguia siendo un gran impacto.

Por lo que sus mejillas sonrosadas y su acelerada respiracion eran un poco dificiles de controlar.

Aunque tenia la pequeña espinilla de la duda, realmente queria saber la respuesta de Jesus, pero por ahora se conformaria con terminar la publicacion de Letras Doradas, asi que esperaria un poco en la sala de Literatura a que Jesus llegara.




Roses InocentesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora