~ Amor A Primera Vista.

"Un nuevo comienzo".

Capítulo 1:

Narra Matt:

Me encontraba en mi nuevo apartamento terminando de desempacar algunas cosas, estaba devastado con tantas horas de vuelo. Cuando terminé de desempacar decidí darme una ducha para luego acostarme, necesitaba descasar un poco, aún no podía creer que me había mudado a otro país, todo ha sido muy difícil de digerir para mí, terminé de ducharme y me puse mi pijama para al fin, irme a dormir.

                                                                         (...)

Siento una luz en mi rostro que me hace abrir mis ojos, miro por la ventana y ya había amanecido, me levanté y decidí tomar un baño. Al terminar, me puse una camiseta de mangas cortas color blanco, unos jeans de mezclilla y unos tenis negros. De la nada, el sonido de mi móvil interrumpió mis acciones, lo busqué por mi habitación y al leer el nombre de quien me llamaba, me sorprendí, era mi padre. La verdad, es que él no me ha tratado como un hijo desde que mi madre falleció de esa horrorosa enfermedad, ha sido indiferente conmigo desde entonces. Contesté la llamada y al otro lado de la línea escuché la voz de mi padre:

—Hola, hijo ¿Cómo llegaste ayer a tu nuevo apartamento? —le oí, mientras intentaba peinarme con mi otra mano.

—Hola Rubén, llegué bien, gracias —respondí con indiferencia.

—Bueno, Matt, te tengo que colgar, tengo asuntos de trabajo que resolver, adiós.

y colgó sin esperar despedirme antes.

Desde que tenía 10 años llamo a mi padre por su nombre ya que, no lo he sentido como uno.

Seguí divagando en mi mente hasta que salgo de mi pequeño trance, no tenía ganas de desayunar así que termine por decidir salir un rato para conocer la nueva ciudad, así que bajé las escaleras para ejercitar un poco mis piernas y empecé a caminar sin un destino fijo. Nuevamente sentí mi teléfono vibrar e instantáneamente sonrío al ver que se trata de Alex, mi mejor amigo. Él también se mudó a ésta ciudad y al parecer irá a la misma universidad que yo, las clases, lamentablemente comienzan mañana. Iba a deslizar mi dedo por el recuadro verde que decía "responder", pero me impidió un golpe en mi hombro izquierdo, lo siguiente que escuché fue quejidos de una chica, había chocado con alguien, levanté mi vista y me doy cuenta que me encontraba en un parque, no sé como había llegado hasta aquí. Observé a la chica que se seguía quejando y noto que tiene un hermoso rostro y cuerpo, pero su mirada reflejaba tristeza, rápidamente le pedí disculpas sintiéndome culpable de sus quejidos, pero se marchó molesta sin decirme nada, dejándome hablando solo en medio del parque. Una brisa envolvió mi cuerpo produciendo en mí un escalofrío inevitable. Me gire dispuesto a volver  a mi apartamento, recordando vagamente el camino.

                                                                                     (...)

No he podido sacar de mi cabeza a aquella chica con la que he chocado, no puedo dejar de pensar en sus ojos cafés, su cabello negro y largo, sus carnosos labios... Rápidamente abandoné esos pensamientos

–¡AHH QUÉ ME ESTA PASANDO! Yo soy Matt, quien esta con la chica que quiere, cuando quiere y que juega con ellas, no puedo estar enamorándome, es imposible. Ese sentimiento no existe en mi corazón —hablé en mi mente.

Luego de un tiempo sumergido en mis pensamientos siento que mi móvil por tercera vez en el día vibra, lo saco de mi bolsillo y veo que es un mensaje que me ha llegado de Rubén.

«Matt, tus clases comienzan mañana, debes estar en la universidad a las ocho en punto, adiós, cuídate».

Terminé de leer el mensaje y me quedé pensando en cómo es la nueva universidad a la que asistiré, ¿Haré amigos reales como Alex?, al pasar el tiempo me he dado cuenta que he tenido muy pocos amigos de verdad, el resto solo esta conmigo ya que mi padre es un hombre muy poderoso y de mucho dinero, el único que se ha quedado conmigo desde niños, es Alex.

Sentí mi teléfono sonar y rápidamente pienso en qué se le habrá olvidado a Rubén, pero al tomar el móvil me doy cuenta de que es un número desconocido, descuelgo la llamada y hablo:

—¿Alo?

—JURO QUE TE ARREPENTIRÁS DE HABERME DEJADO, MATT — escucho una voz del otro lado.