E l empresario Des Styles, dueño del hospital estaba por llegar al dicho lugar, bajo de su camioneta negra blindada y por supuesto rodeada de hombres enormes vestían dos de negro con un micrófono en los sacos. Varias enfermeras le saludaron hipócritamente, queriendo así ganar un buen puesto o mas dinero.
- Buen día señor Styles, le estábamos esperando aquí esta la información de los nuevos pacientes. El mas joven es un chico de 16 años que ingreso hace una semana, hasta el momento no ha dado problemas su nombre es Louis Tomlinson su hijo Harry esta a cargo de su tratamiento – la enfermera informaba al hombre mientras caminaban.
- Harry, mi hijo tiene el caso de ese niño, bueno quiero que tengan cámaras y varios guardias alrededor de la clínica de mi hijo, no creo que harry pueda ser un buen doctor pero tendré que apoyarle, sin embargo no me voy a arriesgar a que ese enfermo le haga daño – Las palabras de Des eran lentas y desinteresadas.
Siempre había sido un hombre ocupado según el por su trabajo, la política absorbía todo su tiempo, así dejando de lado a su único hijo con Anne, la mujer sabia que Des la engañaba hasta con la peor mujer, pero se hacia de la vista gorda solo para conservar el dinero, lujos y apariencias en la vida del político Styles. Su mansión gracias a las estafas que le hacia al país, sus autos lujosos que podrían alimentar a 6 familias durante un mes y un poco mas. Harry siempre habia estudiado en los mejores colegios, en lo que mas había invertido había sido en su hijo.
Pero de que servia tener una gran casa con una piscina olímpica, un campo de golf y tenis, sin contar el gimnasio y las canchas de futboll y basquetboll. Tener tres carros por cada uno con chofer para cada automóvil, miles de sirvientes dispuestos a consentir las 24 horas del día, tener un pantalla plana con todos los videojuegos que podrían existir, el celular que aun no estaba en el mercando, mierda de nada le servia si era infeliz, si sus padres le ignoraban. Cada nota alta de harry se premiaba al igual que una nota baja. Las fiestas que daba eran las mejores de todas, llenas de alcohol, sexo y drogas sin que nadie les molestara gracias a que el político era intocable.
Harry había necesitado tanto de su padre y madre, no estuvieron en su primer partido, en su primer golpe, en su primer amor, siempre estaban ocupados con cosas mas importantes que su hijo, no les guardaba rencor eran sus padres y los amaba con toda su alma, en serio lo hacia. A la corta edad de 15 años el y liam que había sido su mejor amigo desde la infancia habían empezado a drogarse para olvidar la mayoría de sus problemas y vaya que funcionaba.
Sus padre jamás se dieron cuenta de su adicción hasta que tuvo una sobre dosis enviándolo al hospital a punto de morir, todo fue muy discreto para que los votantes no supieran nada, cuando salio del hospital le enviaron directamente a un internado para rehabilitación de drogadictos, claro que había dejado las drogas gracias a la ayuda de ese hermoso lugar, pero había aprendido a auto lesionarse para liberar el estrés, estaba orgulloso de decir que el solo lo dejo, que derroto ese tan espantoso habito que se apoderaba de su cuerpo haciendo y dejando marcas que estarían toda su vida, no solo físicamente si no también psicológicamente.
- Padre no sabia que venias –
- Hola hijo, ya sabes tengo que visitar de vez en cuando este lugar, las elecciones están cerca y necesito nuevas fotos para la campaña –
- creí que lo hacías de corazón, estas personas necesitan mucho amor y comprensión, es mas tengo un paciente muy tierno y lindo, tiene 16 añitos se llama Louis –
- Debes tener cuidado con el, es un loco hijo en cualquier momento te saltara encima y te hará daño si no es que te mata –
- como crees papa, yo estudie para esto, para manejar con personas con desordenes mentales llamarlo loco es ofensivo padre, a pesar que no están en sus cinco sentidos ellos entienden lo que les dicen –
- basta Harry tu solo debes medicarlo su locura no tiene curo, solo míralos todas estas personas están locas , han hecho daño a otros seres humanos que les intentaban ayudar –
- no tienes el corazón suficiente padre, debes ver dentro de ellos para poder juzgarlos-
Des iba a hablar cuando un pequeño de ojos turquesa se acerco corriendo hacia harry dándole un abrazo que su hijo correspondió gustoso, era el abrazo mas tierno que había tenido según harry, cuando sus cuerpos chocaron sintió una conexión eléctrica que le dejo sin aliento. Tratar de explicar y poner en palabras de que se trataba esa conexión que se daba entre ambos chicos es sumamente apasionado. Porque una persona se siente atraída por una determinada persona y no por otra, el algo muchas veces inexplicable.
La atracción que también se puede definir como química, es esa poderosa fuerza que nos lleva a querer estar solo o todo el tiempo con la otra persona elegida y no poder sacárnosla de nuestro pensamiento.
En esa electricidad que podemos sentir estando en su presencia, una mezcla de ansiedad, nerviosismo y total bienestar. Ese abrazo había explotado con todos los sentimientos del rizado, tanto tiempo de no recibir un abrazo con tanto amor.
- HARRY- chillo mientras se separaba del rizado, mordió su labio inconsciente de ese acto.
- Hola cariño, hoy nos toca alguna cita ¿verdad?- revolvió el cabello del pequeño. – Louis, te presento a mi padre –
- mucho gusto señor – extendió su manita hacia Des.
- Señorita necesito todo el papeleo antes de que me retire del lugar – Hablo Des ignorando completamente al pequeño. – estaré por acá hijo nos vemos al rato –
Harry estaba muy enojado al ver en la forma que su padre habia ignorado al pequeño, lo que le partió su corazón en muchos pedazos fue ver la carita Louis, sus ojos tristes, cuando regreso su mano y la sobo, vio ciertas marcas en ellas, iba a preguntar pero un guardia lo detuvo.

- TODOS A LAS DUCHAS –
- no quiero ir a las duchas – casi suplico el ojiazul en dirección a harry. – el agua duele mucho, arde – y no era para menos, las mangueras con los que los rociaban eran tan potentes que ardían cuando hacían contacto con la piel. Los gritos de los guardias le asustaban de sobre manera.
- como que duele Louis – no le dio tiempo de responder ya que un guardia lo había tomado del brazo casi despegando sus pies del suelo, la cara del pequeño lo dijo todo, se notaba miedo, dolor y mucho pánico en serio era lo que mas transmitía.
- Déjalo, le haces daño –
- joven harry, debería alejarse de la mayoría de estos, pueden tener alguna enfermedad-
El rizado jamás olvidaría esa mirada turquesa llena de dolor anteaquellas palabras, serian sus peores pesadillas, le perseguiría para toda suvida, un niño solamente que estaba enfrentando todo esto solo, sin familiares,sin apoyo de amistades. Las marcas que tenia en su cuerpo, cuando le escuchaballorar sin que el se diera cuenta. Quería ayudar y fortalecer aquel frágilcorazón que quería ser envenenado por la mierda del mundo
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Psiquiatra
FanfictionLouis sufre de esquizofrenia. Su familia cree que es malo. Todos lo dejan. Cuando creía que todo había acabado un ángel llamado Harry aparece