Gracias

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Lucas suspiro y miro por última vez ese hermoso paisaje del mar. El cielo estaba de un calido color naranja y el sol se escondia poco a poco en el mar, ya casi oscurecía por lo que eran visibles algunas estrellas. La brisa era suave y el sonido de las olas increiblemente relajantes. Realmente no queria dejar de mirar ese hermoso espectaculo, pero sabia que debia llegar cuanto antes a la mansión Smash.

Se sentia cansado y lo único que queria en esos momentos era dormir, Se dio la vuelta y comenzo a caminar lentamente. Pudo ver a lo lejos como la mayoria de los peleadores se dirigian a su mismo destino, algunos ya se conocian desde antes y caminaban en grupo y esas cosas. Eso era lo malo de ser un novato y además tímido; estar solo.

-¡Hey, Lucas!.-El rubio levanto la vista y vio a cierto entrenador corriendo hacia el. Era Red, el chico al cual acompañó en toda esta caotica aventura que por suerte ya habia terminado.-¿Caminamos juntos? Al parecer ese lugar al que tenemos que ir esta bastante lejos.

-S-si, seguro.-Lucas respondio con timidez. Gracias a Red, Lucas habia podido reunir el valor suficiente para luchar y no temer a los distintos obstaculos que se cruzaron en su camino este día. Lo admiraba mucho y si no hubiera sido por el entrenador seguramente seguiria solo en ese lugar tan sombrio en donde...

En donde conocio a ese chico de la gorra... El rostro del rubio cambio a uno de tristeza al recordarlo, cosa que Red notó.

-¿Todo bien?.-Pregunto preocupado y poniendo su mano en el hombro del menor.

Lucas aparto la mirada y asintio.-Estoy bien.- Trato de sonreir aunque no lo logró muy bien que digamos.-Y-ya vamonos...

-De acuerdo.-Red sabia que algo le ocurria al rubio pero decidio no presionarlo. Apenas hoy se habian conocido pero le importaba el rubio, lo noto bastante triste cuando lo encontro solo y además no podia negar que hacian un gran equipo juntos.

Luego de un par de minutos caminando, el cielo ya estaba completamente obscuro y brillando gracias a la luna y las estrellas. No quedaba mucho para llegar a la mansión. En todo ese tiempo de caminata Lucas no podia dejar de pensar en aquel chico de la gorra roja. Se sentia como un completo idiota, ese chico lo salvo de convertirse en trofeo y él lo único que hizo fue huir y llorar, no pudo salvarlo de Wario. De seguro que ahora lo odiaba.

-"Me pregunto si estara en la mansión el también...".-Lucas pensó con tristeza.-"De seguro que si me ve allí no va a volver a hablarme."

-Soy tan tonto...-Susurro el rubio para si mismo.

-¿Dijiste algo, Lucas?.-

-E-eh, nada, olvidalo...

Red estaba a punto de responder cuando una voz a lo lejos se lo impidio.-¡Espera! ¡Alto!

Ambos chicos voltearon sorprendidos al escuchar esa voz. Lucas abrio sus ojos azules sorprendido.-El.. el es chico del que te hablé, Red...

-Oh vaya.-El mayor no pudo evitar sonreir al notar la expresión del oji azul, sus ojos estaban completamente abiertos y un ligero sonrojo se apodero de sus mejillas. Además de que Lucas se escondio ligeramente detrás del entrenador.

El chico de gorra roja se acerco a ambos y se tomó unos segundos para respirar, habia corrido demasiado. Lucas sonrio un poco, ¡el chico estaba a salvo! Se sentia tan feliz, pero algo asustado por lo que fuera a decirle.

-Buuueno, supongo que ustedes tienen mucho de que hablar.-Red se hizo a un lado y comenzo a caminar.-¡Nos vemos, Lucas!

-¡R-Red!.-El rubio quiso segurlo pero una mano en su muñeca se lo impidio.

-Espera, no te vayas por favor.-El chico sonrio todavia algo cansado por el viaje.-¿Lucas?.-El menor asintio apenado.-¡Que bonito nombre!.

-E-eh...-Lucas sintio su cara algo calida, además el niño no dejaba su muñeca aun.

-Soy Ness, estoy tan feliz de que estes a salvo. Creí que Wario te habria atrapado tambie...-El pelinegro no pudo terminar de hablar pues el rubio se lanzo y lo abrazo con fuerza.

-¿Por que lo hiciste?.-Lucas susurro con tristeza, Ness lo miro sin comprender.-No debiste empujarme, por mi culpa te atraparon y yo solo huí... no fui capaz de quedarme a defenderte, fui un cobarde. 

Ness no dijo nada y solo acaricio su espalda con suavidad.-Y-Yo estoy tan feliz de que estes bien... Yo debi de convertirme en trofeo, no tu, Ness...-El rubio apreto aun más al abrazo, cosa que al mayor no parecio molestarle.-Porfavor perdoname...

Unos segundos en silencio, que de pronto se rompio cuando Lucas sintio algo en su cabeza seguido de una leve risa de Ness. El rubio se dio cuenta de que tenia la gorra del chico en su cabello, esa gorra roja que lo caracterizaba tanto. Ness sonrio y limpio las pequeñas lagrimas que empezaban a salir de los ya mojados ojos de Lucas.-Esta bien, no llores, no pasa nada.

-P-Pero...

-La gorra te queda bien, ¿Sabes?.-El pelinegro sonrio mostrando sus dientes.-Pero no tanto como a mi.-Lucas no pudo evitar sonrojarse completamente, para despues reirse también, Ness tenia una risa muy contagiosa.

Ness ya conocia a Lucas, habia leido su información poco antes de entrar al universo de smash. Sabia casi toda su historia, que eran del mismo universo... algo en su interior le decia que debia de cuidar a ese chico, y asi seria. Pero eso obviamente nunca se lo diria.

-Te note triste.-Dijo Ness de repente.

-¿eh?.

-Te note triste, por eso te segui hasta ese lugar, ese parque abandonado.

-¿M-me seguiste?

-Hehe, seh, lo siento.-Ness se rasco la cabeza nervioso.- a decir verdad te venia siguiendo desde hace un rato también. Fue por Dedede que tuve valor de acercarme.

-Oh...

-¡Oye Ness! ¡Ya vamonos, me estoy muriendo de hambre aquí!.-Ambos psiquicos voltearon y vieron a Dedede y a Luigi a lo lejos.

Ness suspiro y tomo la mano de Lucas.-Vamos Lucas, ya queda poco para llegar a la mansión y de paso te presento a mis amigos.

-D-de acuerdo, Ness.-Lucas sonrio divertido y acomodo la gorra roja en su cabeza.

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Luego de unos minutos de caminata y una comica charla, llegaron finalmente a la mansión smash, era visible a lo lejos.-¡Ya verás, Luke! Te va a encantar este lugar te lo asguro, vas a conocer a mucha gente y nos haremos aun más fuertes.-Ness dijo divertido.

Lucas solo sonrio y asintio.-¿Ness?...

-¿Si?

-Gracias.

El pelinegro miro sorprendido al menor, para despues reir con ternura.-¡Vamos!.-Y corrio colina abajo junto con su nuevo amigo.

-¡E-espera no tan rapido, Ness!

Y en todo el camino ,ninguno de los chicos psiquicos se dio cuenta de que iban con sus manos entrelazadas. Cosa que el rey Dedede y el fontanero de verde notaron perfectamente, pero se sintieron feliz por su amigo.


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