El Origen: Queen Bee

Capítulo 4

Llegando a mi habitación...

-Chloe, tengo hambre...- dice la abeja gigante.

-Ten, aqui esta tu chocolate- le digo después de haber sacado una barra de chocolate de mi bolsa.

-Oye, hay otra cosa que se me olvidó contarte- dijo Bina con la boca llena de chocolate.

-Todo se te olvida a ti jaja- digo mientras me pinto las uñas sentada en uno de mis sillones.

-Bueno, esto es serio...- dice ya después de haber tragado el chocolate de que tenía en su pequeña boca- hay un supervillano que tiene un miraculous...

-¿Qué es eso?- digo interrumpidola y prestandole más atención.

-Un miraculous es un pequeño objeto que hace que te tranformes en un super héroe, es por eso que se inventaron los miraculous, para hacer el bien, pero si caen en manos equivocadas esa persona tiene el poder de volverse malo si lo desea, tu miraculous es una peineta, al momento de ponertela activaras el miraculous y con las palabras mágicas podrás convertirte en Queen Bee.

Me dirijo hacia donde había dejado la cajita, esta había quedado abajo de mi cama, ya que la había tirado por la luz que proporcionó el kwami y se me había olvidado recogerla.

Cuando la abro me doy cuenta que ahí está, es una peineta, es color negra, y tiene una pequeña silueta de abeja en ella.

-Cuando se activa es de color amarilla y la abeja se aprecia aún mejor- dice Bina con una pequeña sonrisa.

Le correspondo la sonrisa y en seguida me la pongo en la coleta que siempre me hago.

-¿Cuánto tiempo tendré que esperar?- digo con una carita triste.

-Hasta que este segura de que eres una buena persona- dice con brazos cruzados- bueno, ¿en qué me quedé?... ah si, ese super villano quiere los miraculous de Ladybug y Chat Noir, hará todo lo que este a su alcance para tenerlos.

-¿Por qué quiere los de ellos?- digo levantando la ceja.

-Porque si usas los dos miraculous al mismo tiempo tendrás el poder absoluto, y si los tiene una mala persona, ¡puede ocasionar el fin del mundo!- dice Bina alzando la un poco la voz.

-Okay, no te alteres y... ¿Quien es? ¿cuales son sus poderes?- digo algo curiosa.

-Su nombre es Papillon y sus poderes es cargar sus mariposas con energía, él puede detectar las emociones y utiliza las personas que tienen odio en su interior para que sus mariposas ya cargadas de energía entren a algún objeto que tengan y al mismo tiempo convertirlos en supervillanos- dice la pequeña Bina.

-Oh... ahora entiendo porque tantos villanos...- digo mientras analizó lo que me dijo- ¿Y por qué quieren que sea yo una super heroína?, digo, no es que no quiera, pero ¿Qué Ladybug y Chat Noir no hacen bien su trabajo?.

-Es que el gran guardián tiene un mal presentimiento- dice la abeja gigante- quizá habrá un nuevo supervillano.

-Me muero ya por ser una super heroína- suspiro- también saber como será mi traje, que poderes tendré.

-Oye, ya te dije que tienes que hacer para serlo- dice Bina- yo confío en ti y se que podrás mejorar como persona.

Las dos nos sonreimos.

Alguien toca la puerta.

-¡Pase!- digo mientras Bina se esconde.

-¡Chloe como has crecido!- dice una voz femenina que me parece familiar.

¿Mamá? Levantó la mirada.

-Mi abejita, estoy devuelta- dice mientras abre sus brazos para que la abracé.

Eso hago, mientras lloro en su hombro, tantas preguntas que  tengo, espero que me las responda y que me todas las explicaciones de su partida, ya me hacia tanta falta, tantos años sin saber de ella, por un momento llegue a pensar que estaba muerta.

-¿Pero que haces aquí?, ¿Por qué nunca habías hablado?, ¿Dónde habías estado todo este tiempo?- digo con mi cara llena de lágrimas.

-Estoy más cerca de lo que crees... -dice mientras se torna todo de color negro.

Despierto.

Otra vez soñé con mi mamá, pero esta vez fue diferente, lo sentí tan real.

Seco las lágrimas que tenía en mi cara, fue tan fuerte el sueño que hasta lloré de verdad.

La pequeña Bina aún sigue dormida.

¿A que se refiere con que está cerca?

Vuelvo a dormir, ya que mañana iré al colegio.

-

Ya es jueves, me alegra ya que mañana es viernes, esperen... mañana es viernes... ¡No he comprado mi vestido para el baile de bienvenida!.

-Bina, hoy iremos de compras después del colegio- digo mientras la despierto.

Ella dice que si y juntas nos preparamos para ir a la escuela.

Ya llegando Sabrina me abre la puerta como de costumbre.

-Buenos días, Sabrina- digo mientras que yo cargo mi propia mochila.

-B-buenos días ¿Chloe?- dijo Sabrina algo confusa.

-¿Si? Sabrina- digo mientras caminábamos hacia la entrada.

-¿Te encuentras bien?, ¿Eres Chloe Bourgeois?- dice quitándose los lentes.

-Si, pero ahora soy mejor que antes- digo mientras sonrió.

A una corta distancia de nosotras estaban Adrián con su brazo en los hombros de Marinette junto con Nino y Alya que estaban agarrados de la mano.

-¿Ya viste como esta Adrian con Marinette, Chloe?- dice Sabrina.

-Si, y no me importa, si Adrián quiere estar con ella, ya no me interesa- digo casi segura de mis palabras.

Sabrina me observa con los ojos abiertos como platos.

Después nos dirigimos al salón de clases.

El tiempo en el colegio fue largo, pero al fin acabo, Bina y yo nos dirigimos hacia las tiendas para comprar lo que necesitaré para mañana.

Marinette esta en la tienda que está enfrente de donde estoy, es una tienda de vestidos y se le queda viendo a uno por el cristal.

-¿Que tenemos aquí?- pregunto mientras me acerco a ella- Si es mi persona favorita, Marinette Dupain-Cheng.

-¿Qué quieres Chloe?- dice Marinette pero aún mira el vestido por el cristal.

Veo que ese vestido te gusta, pero no creo que tengas el dinero suficiente para comprartelo- digo mientras levantó una ceja.

-No necesito comprarme un vestido cuando me lo puedo hacer- dice volteandome a ver.

-¿Y para que hacertelo cuando yo te lo puedo comprar?- digo mientras sacó la tarjeta que mi papi me obsequió.